ShoreView, el ‘google maps’ del mar
En apenas tres años, esta aplicación de realidad aumentada está cambiando la experiencia de echarse al mar para miles de personas
El ingeniero de Telecomunicaciones José Manuel Arnaiz (62 años) fue uno de los primeros en detectar cómo su sector nos iba a cambiar la vida. Sin embargo, ni Jazztel, ni DigiMobil, ni ninguna otra de la docena de empresas que ha fundado trataba de hacerlo ligada a su pasión por el mar: “Mi padre me generó ese vínculo. He navegado desde que tengo uso de razón y es una de esas pocas cosas en la vida que hago tanto como puedo. Hace unos pocos años le dije a mi amigo Miguel Ángel Santos (52 años), ¿por qué no creamos una solución de base tecnológica para todos los que salimos al mar?”, cuenta en e...
El ingeniero de Telecomunicaciones José Manuel Arnaiz (62 años) fue uno de los primeros en detectar cómo su sector nos iba a cambiar la vida. Sin embargo, ni Jazztel, ni DigiMobil, ni ninguna otra de la docena de empresas que ha fundado trataba de hacerlo ligada a su pasión por el mar: “Mi padre me generó ese vínculo. He navegado desde que tengo uso de razón y es una de esas pocas cosas en la vida que hago tanto como puedo. Hace unos pocos años le dije a mi amigo Miguel Ángel Santos (52 años), ¿por qué no creamos una solución de base tecnológica para todos los que salimos al mar?”, cuenta en entrevista con EL PAÍS. Dicho y hecha, ShoreView suma 100.000 descargas en apenas tres años y para miles de personas ha empezado a convertirse en aquello que Arnaiz y Santos idearon junto al tercer cofundador y empresario, Javier Lasarte (39 años): “un Google Street View de realidad aumentada para cambiar la experiencia de echarse al mar”.
La oportunidad era doble: “El mar está lleno de incertidumbres para aquellos que salen 2, 3 o 10 veces al año, para aquellos que no son pescadores ni mercantes. Todo funciona por cartas de navegación en 2D y, en general, la náutica recreativa es un sector poco tecnologizado, especialmente si hablamos de herramientas al alcance de cualquiera”. ShoreView es gratuita y parte de su éxito radica en la colaboración, con una media de 1.000 alertas diarias publicadas por sus propios usuarios. Los avisos señalan zonas donde se encuentran buceadores, bancos de medusas o restos flotantes, entre otras amenazas efímeras. Un servicio al alcance de 240 millones de navegantes, 35 millones de surfistas o 15 millones de buceadores son el público objetivo de esta aplicación.
¿Pero quién está usando ShoreView actualmente? Enfocados por el momento en dos zonas geográficas, el Caribe y el Mediterráneo occidental, “los usuarios son todo tipo de navegantes. Los hay del tipo profesional, capitanes de barcos de alquiler y personas en el servicio de este tipo de embarcaciones. Pero por ejemplo, hemos hablado recientemente con una kayakista estadounidense que hace quilómetros y está encantada con la app. También hemos sabido este verano de una escuela de paddle surf que lo recomienda porque, para personas no experimentadas, alejarse una milla del lugar de partida puede ser angustioso. Algo sencillo que se resuelve fácilmente con ShoreView. Es útil para gente con motos de agua o con un pequeño barco recreativo”, comenta Arnaiz.
Lo cierto es que al abrir la app en mitad del mar, la realidad aumentada combina alertas de última hora, información climatológica y geológica con mensajes comerciales. De ruta por un lugar inesperado, también podemos saber dónde está una gasolinera cercana, un restaurante o todo tipo de servicios náuticos. Y esta es solo la primera de las escalas de una empresa con sede social en Valencia y una decena de trabajadores, porque, pese a que el año de su fundación es 2019, los fundadores ya han dado el primer golpe de timón al ampliar sus servicios con una nueva estructura: SeaCoast.
En noviembre, ShoreView pasará a formar parte de este paraguas de servicios para la náutica junto a PortView y PaperBoat. La primera de ellas es la solución marítima más parecida a la función ‘cómo llegar’ dentro de Google Maps, ya que el 70% de los accidentes con embarcaciones de alquiler o prestadas se producen, precisamente, en el momento de amarre. La segunda es un gestor de reserva de amarres conectado con el sistema de gestión de puertos deportivos y clubes náuticos, subvencionada por Puertos del Estado. Un servicio que, hasta ahora, además de ser bastante engorroso, requería del envío de documentación y certificados digitales, pero que esta aplicación asegura convierte en una experiencia parecida a la reserva hotelera, con un comparador de precios y de con archivos encriptados.
SeaCoast, además, ha decidido combinar sus servicios con la tecnología blockchain. “No pensamos en los tokens como una posibilidad para captar recursos, sino como una forma a partir de la cual podemos fomentar algunos servicios y dinamizar la recurrencia de los usuarios en la plataforma”, concluye Arnaiz. Una comunidad que también gestionan a través de Telegram y que pretende premiar a los usuarios más activos. “Cuando fundé DigiMobil ninguno de los planes de negocio contemplaba que llegáramos a cuatro millones de clientes como en la actualidad. Con SeaCoast no quiero fijar cuál será el puerto de destino. Nuestra ambición es máxima porque, en apenas tres años, el viento solo ha sido favorable”.