Begur instalará el primer regulador de agua a una empresa que gastó 3,2 millones de litros en tres meses

La policía local de Palafrugell detectó al camión cisterna cuando acababa de llenar una piscina en Aiguablava

La playa de Sa Tuna, en Begur.Elisa Barba (Alamy Stock Photo)

El Ayuntamiento de Begur instalará el primer regulador de la presión del agua —pieza metálica que se pone en la cañería y reduce notablemente el caudal— a una empresa especializada en limpieza de alcantarillado y fosas sépticas que gastó, según detectó el consistorio, más de 3,2 millones de litros de agua en tres meses. El consistorio calcula que podría haber llenado más de 70 piscinas de diferentes localidades con agua cogida de la red de Begur, un municipio que se encuentra en situación de emergencia por sequía, que lleva a cabo numerosas medidas para reducir el consumo de agua y que recient...

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El Ayuntamiento de Begur instalará el primer regulador de la presión del agua —pieza metálica que se pone en la cañería y reduce notablemente el caudal— a una empresa especializada en limpieza de alcantarillado y fosas sépticas que gastó, según detectó el consistorio, más de 3,2 millones de litros de agua en tres meses. El consistorio calcula que podría haber llenado más de 70 piscinas de diferentes localidades con agua cogida de la red de Begur, un municipio que se encuentra en situación de emergencia por sequía, que lleva a cabo numerosas medidas para reducir el consumo de agua y que recientemente ha sido multado por la Agencia Catalana del Agua (ACA) con 54.000 euros, por no conseguirlo. Se trata de un empresario reincidente que acumula ya seis expedientes sancionadores por incumplir la ordenanza de sequía.

Sobre las 17.00 horas del jueves, la policía local de Palafrugell paró a un camión cisterna en un control que llevaba a cabo en la entrada del municipio. Al ser preguntado, el empresario reconoció que regresaba de llenar una piscina en Begur y les dio la ubicación. Inmediatamente, los agentes de Palafrugell comunicaron los hechos a la policía local de Begur, que acudió al lugar, en la playa de Aiguablava, y confirmó que se había llenado una piscina. Además, inspeccionaron la nave donde está ubicada la empresa y encontraron un grifo con una manguera con la que se estaban llenando depósitos con el agua de la red municipal. Según fuentes cercanas al caso, averiguaron que en el último trimestre había gastado casi 3.300 metros cúbicos de agua. Ante estos hallazgos, levantaron acta y abrieron un expediente sancionador.

Se trata del sexto expediente abierto a la empresa, que según las mismas fuentes rellenó piscinas, en muchos casos de madrugada y sobre todo a extranjeros y veraneantes de segundas residencias de Barcelona. Los otros cinco expedientes, que ya están resueltos y cerrados, fueron por infracciones leves y graves a la ordenanza de sequía. El empresario reconoció los hechos y, como pagó de inmediato, tuvo una rebaja del 40% de la sanción en cada caso. Según algunas fuentes, en algunos casos habría hecho pagar a los propietarios de las piscinas las sanciones impuestas por el Consistorio.

Fuentes municipales han confirmado que, ante esta actitud reincidente, el Ayuntamiento ha decidido por primera vez instalar un regulador del caudal de agua. A pesar de la extrema sequía y de la prohibición expresa y rotunda de ello, hay una constante demanda de algunos particulares y sociedades para llenar piscinas. El plan de emergencia ante la sequía en Begur establece, como primera medida de urgencia, la limitación a 138 litros de volumen máximo por habitante y día, cuando la Agencia Catalana del ACA lo limita a 200 litros. En diciembre, Begur gastó 495 litros por habitante y día.

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