El presunto asesino de una mujer embarazada en Manresa la maltrataba de manera habitual y la encerraba
Los Mossos sostienen que el hombre, en prisión comunicada y sin fianza, fingió que la víctima se había caído por las escaleras
El juez ha enviado a prisión, comunicada y sin fianza, a Ismail H., acusado del asesinato de su pareja en Manresa, una mujer de 31 años embarazada de cuatro meses. El hombre la maltrataba de manera habitual, según la investigación de los Mossos, e incluso la había tenido “retenida” para “evitar que la gente le viera las marcas de violencia”, recoge el auto de prisión. El hombre mató presuntamente a la mujer después de que cogerle el móvil y ver unos mens...
El juez ha enviado a prisión, comunicada y sin fianza, a Ismail H., acusado del asesinato de su pareja en Manresa, una mujer de 31 años embarazada de cuatro meses. El hombre la maltrataba de manera habitual, según la investigación de los Mossos, e incluso la había tenido “retenida” para “evitar que la gente le viera las marcas de violencia”, recoge el auto de prisión. El hombre mató presuntamente a la mujer después de que cogerle el móvil y ver unos mensajes con su expareja, afirma la policía, que define al sospechoso como una persona “celosa, controladora y posesiva”. Y aseguran que el investigado fingió que la víctima se había caído por las escaleras del domicilio que compartían.
La investigación de los Mossos, “todavía en fase muy inicial”, advierte el auto judicial, considera que la noche del 5 al 6 de mayo, la víctima se encontraba con su pareja y dos amigos más en la casa de otro joven, que también había sido novio de la mujer, donde algunos de ellos consumieron alcohol y drogas. A las 11 de la noche, “molesto porque se lo pasase bien”, según varios testigos, y después de decir frases del tipo “esta noche voy a dormir en la cárcel”, Ismail H. obligó a la víctima a regresar al domicilio que compartían en la calle de Gaudí de la ciudad desde hacía un par de meses.
La policía asegura que en la casa, el acusado le cogió el teléfono a la víctima, leyó unos mensajes suyos con su expareja y reaccionó de manera violenta. La prima de la mujer es la última persona que habló con ella, cerca de las tres de la mañana. Ella le dijo que no estaba bien con Ismail H. e incluso sopesaron que se fuese a pasar la noche a casa de ella. Pero él “le quitó el teléfono de las manos” y habló con la prima. La hipótesis policial es que después de eso la agredió, en la cabeza y en el abdomen, y la asfixió hasta matarla. A continuación, la movió para fingir una caída por un tramo de escaleras que separan la cocina del comedor.
Para enmascarar el crimen, Ismail H. regresó a la fiesta en la casa de la expareja de la joven, dijo que la había dejado durmiendo, bebida, algo que extrañó al resto porque no la vieron consumir y alrededor de las siete de la mañana volvió al domicilio acompañado de un amigo. Este declaró a la policía que Ismail H. le hizo esperar fuera, y que en ese tiempo oyó al investigado hablar con su madre y decirle que había hecho “algo muy grave” y que “no sabía lo que iba a hacer”. Y a la mujer, que estaba con el altavoz del móvil activado, responderle que ya le había dicho que “no se pusiese nervioso con ella”.
Finalmente, el amigo contó que Ismail H. le hizo entrar al domicilio, le dijo que había encontrado en las escaleras a la víctima y que comprobase si tenía pulso. Que este se negó, a lo que el acusado le propinó dos puñetazos y le forzó a llamar al 112 mientras le dictaba lo que debía explicar. Algo que quedó grabado y transcrito. Cuando llegaron los sanitarios, poco antes de las nueve de la mañana, encontraron a Ismail H. y su amigo fumando en la puerta, “aparentemente calmados”.
El hombre contó que al llegar de fiesta había encontrado a su pareja en el suelo, como si se hubiese caído por las escaleras y golpeado en la cabeza. Los médicos en el lugar vieron que la postura de la mujer no era propia de un accidente y detectaron señales de asfixia a simple vista, como marcas en el cuello. El forense determinó que llevaba muerta desde las tres de la madrugada aproximadamente. Los policías descubrieron también que había restos de sangre en la cocina, en algunos interruptores y en el cubo y mango de la fregona, como si se hubiese limpiado la escena del crimen y el suelo, donde hallaron huellas. El lunes, nueve días después del asesinato, los Mossos detuvieron a Ismail H.
Este miércoles, y con todos esos indicios sobre la mesa, la titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Manresa ha decretado la prisión preventiva para el hombre acusado de un delito de homicidio. Considera que no tiene arraigo, y que hay un elevado riesgo de fuga, además de que pudiese destruir u ocultar pruebas si quedase en libertad, en una fase todavía inicial de la investigación.
El teléfono 016 atiende a las víctimas de violencia machista, a sus familias y a su entorno las 24 horas del día, todos los días del año, en 52 idiomas diferentes. El número no queda registrado en la factura telefónica, pero hay que borrar la llamada del dispositivo. También se puede contactar a través del correo electrónico 016-online@igualdad.gob.es y por WhatsApp en el número 600 000 016. Los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10. Si es una situación de emergencia, se puede llamar al 112 o a los teléfonos de la Policía Nacional (091) y de la Guardia Civil (062). Y en caso de no poder llamar, se puede recurrir a la aplicación ALERTCOPS, desde la que se envía una señal de alerta a la Policía con geolocalización.
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