Investigan qué falló en el bautismo de submarinismo donde fallecieron dos personas
La Guardia Civil trata de reconstruir la inmersión que realizó un grupo de novatos en Segur de Calafell
La muerte de dos hombres que se iniciaban en el submarinismo atendiendo a un curso en un centro de Segur de Calafell (Tarragona) ha motivado la apertura de una investigación a cargo de la Guardia Civil. Las dos víctimas, de 50 y 56 años, realizaban lo que se conoce como un bautizo de buceo. Formaban parte de un grupo que, este domingo por la mañana, estaba en el agua a las órdenes de un instructor con titulación. Por causas que se están i...
La muerte de dos hombres que se iniciaban en el submarinismo atendiendo a un curso en un centro de Segur de Calafell (Tarragona) ha motivado la apertura de una investigación a cargo de la Guardia Civil. Las dos víctimas, de 50 y 56 años, realizaban lo que se conoce como un bautizo de buceo. Formaban parte de un grupo que, este domingo por la mañana, estaba en el agua a las órdenes de un instructor con titulación. Por causas que se están investigando, los dos hombres perdieron el conocimiento durante la inmersión y tuvieron que ser rescatados.
El primero de ellos, el más joven, fue hallado inconsciente por sus compañeros de actividad, que lo sacaron del agua y avisaron al número de emergencias 112 mientras intentaban practicarle maniobras de reanimación cardiopulmonar, que resultaron infructuosas. Paralelamente, el grupo echó en falta a otro submarinista, por lo que se activó a la policía marítima de los Mossos d’Esquadra para buscarlo. Lo encontraron bajo el agua, ya sin vida. La Guardia Civil se desplazó al lugar, cerca del puerto de Segur de Calafell, y recabó declaraciones y muestras del material para tratar de aclarar lo sucedido.
Se investiga si pudo haber alguna disfunción con el aire de las bombonas. La escuela de buceo permanecía cerrada este lunes y sus responsables han sido requeridos para declarar sobre cómo se estaba desarrollando la clase, y para que aportasen toda la documentación relacionada con las autorizaciones para realizar la actividad.
La empresa ofrece cursos de buceo de varios niveles, desde el nivel básico de aprendiz hasta la formación de instructores. Se publicita como especialista en rescates y en las tareas de mantenimiento de equipos de buceo. Una de las víctimas, el hombre de 50 años, era un bombero voluntario del parque de Vilafranca del Penedès. Sus compañeros le recuerdan como una persona de complexión atlética. Era practicante habitual de artes marciales. Era conocido en el municipio porque formaba parte de la cuadrilla del Drac de la fiesta mayor. El otro fallecido, de 56 años, era un vecino de El Vendrell (Tarragona), conocido en el Penedès porque estaba al frente de un negocio familiar de transportes y excavaciones.