Ayuso calcula que la armonización fiscal supondría a los hogares madrileños 2.000 euros más al año en impuestos
La presidenta madrileña cierra su visita a Barcelona afirmando que percibe un cambio de tendencia porque la gente “no puede más”
Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, ha estimado este viernes que la armonización fiscal que propugnan el Gobierno de Pedro Sánchez y Esquerra Republicana le podría comportar a los hogares madrileños el pago de 2.000 euros más en impuestos. La presidenta madrileña no ha aclarado cómo ha realizado el cálculo, pero ha cargado con acritud contra la alianza del Gobierno y el “economista” Gabriel Rufián y ha afirmado que el diálogo no será posible en el...
Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, ha estimado este viernes que la armonización fiscal que propugnan el Gobierno de Pedro Sánchez y Esquerra Republicana le podría comportar a los hogares madrileños el pago de 2.000 euros más en impuestos. La presidenta madrileña no ha aclarado cómo ha realizado el cálculo, pero ha cargado con acritud contra la alianza del Gobierno y el “economista” Gabriel Rufián y ha afirmado que el diálogo no será posible en el Congreso en ese capítulo porque es solo una imposición y un “ataque desmesurado”. “Primero dividieron a Cataluña y luego a las comunidades autónomas”, ha afirmado Ayuso señalando que el principal problema es que el partido socialista “alimenta” esa política.
Tras reunirse estos dos días de visita en Barcelona con entidades en favor del bilingüismo y representantes de la hostelería, la presidenta madrileña ha explicado en rueda de prensa que los diversos colectivos le han trasladado su hartazgo porque o bien no pueden educar a sus hijos en castellano o porque se sienten perseguidos por la política fiscal del independentismo. “El negocio del independentismo asfixia a ciudadanos que no tienen libertad para elegir los colegios para sus hijos y en impuestos”, ha dicho recalcando que muchos se trasladan a Madrid porque “no aguantan más”. “Y ahora se encuentran que no se pueden librar de ellos. A Madrid se viene a vivir en paz”, ha afirmado, dispuesta a que los empresarios se organicen.
Cataluña celebrará el 14 de febrero, si la pandemia no lo impide, las elecciones autonómicas y las reuniones de Ayuso si no son precampaña electoral se le parecen mucho. Ayuso ha deslizado que no ha pensado si participará en la campaña, pero ha insistido en que es la cuarta ocasión que viaja a Cataluña como presidenta y que lo seguirá haciendo por su fuerte compromiso como española y madrileña con una sociedad catalana que percibe dividida pero bajo un cambio de “tendencia” porque la gente no puede más. Ayuso y Pablo Casado han coincidido este viernes en Cataluña aunque el presidente del partido está en Tarragona, visitando el Banco de Alimentos de Reus, y ella al mediodía ha viajado a Zaragoza para reunirse con el presidente Lambán. Ayuso ha aclarado la extraña coincidencia aclarando que Casado viaja todos los viernes a Cataluña y que su agenda le impide a ella hacerlo entre semana.
Su diagnóstico es que el independentismo se aprovecha históricamente cuando el Estado está más debilitado y ha recalcado que esa armonización fiscal solo está destinada no a beneficiar a Cataluña, sino a “perjudicar a Madrid”. “Madrid es un paraíso de libertad y respeto”, ha dicho jugando con el término de “paraíso fiscal” utilizado por el republicano Gabriel Rufián. “No hay derecho a que la Administración asfixie a los ciudadanos”, ha remachado minimizando que el ministro popular Cristóbal Montoro solo llegó a esbozar un borrador.
Ayuso ha defendido su política de mantener abierta la restauración en esta segunda ola y dar con un equilibrio entre salud y economía a diferencia de lo que ha sucedido en Cataluña. No ha querido aclarar con qué agrupaciones de hosteleros se reunió este jueves ―solo dijo que tenían también negocios en Madrid― y ha sido precavida con las cifras de la pandemia porque ha admitido que el virus “es traidor”. Su agenda ha excluido las reuniones con Govern y el Ayuntamiento de Barcelona al esgrimir que pretendía entrevistarse con la sociedad civil deslizando: “no espero mucho de esos políticos”. Solo, ha matizado, se reunirá con colectivos afines: “Me reuniré con quienes no quieren ser expulsados de su tierra ni sentirse atropellados. Con los que hacen tiranía no voy a perder tiempo”.