El comercio y la restauración tildan de insuficiente el plan de reapertura del Govern
Los hoteles de interior y las estaciones de esquí ven positivo el desconfinamiento perimetral a partir del 21 de diciembre
El plan de reapertura presentado este jueves por el Govern, más flexible que el planteado inicialmente por el Departamento de Salut, no sentó bien (aunque con matices) ni en el sector de la restauración ni en el del comercio. Ambos colectivos lo consideran insuficiente para...
El plan de reapertura presentado este jueves por el Govern, más flexible que el planteado inicialmente por el Departamento de Salut, no sentó bien (aunque con matices) ni en el sector de la restauración ni en el del comercio. Ambos colectivos lo consideran insuficiente para salvar la campaña de Navidad, última oportunidad de conseguir ingresos en un año marcado por la pandemia. El balance es más positivo entre las estaciones de esquí y la hostelería de montaña pese a que el cierre perimetral de Cataluña en fines de semana no se levantará hasta el 21 de diciembre.
“Valoramos positivamente el avance”, afirmaba este jueves el presidente del Gremio de Restauración de Barcelona, Roger Pallarols. Pero acto seguido dejaba entrever que la desescalada no colma sus objetivos, ni tan solo el hecho de que los planes iniciales para que los restaurantes abrieran hasta las 17.00 horas se haya acabado alargando hasta los 21.30, casi al límite del inicio del toque de queda (que es media hora después). El sector considera que los restaurantes que ingresan más de la mitad de su facturación por la noche no abrirán, por lo que se pusieron el objetivo de luchar para que en la segunda fase de la apertura se puedan ampliar los horarios al menos hasta la medianoche.
Igual de crítico era Foment Comerç, cuyo presidente, Roger Gaspa, expresaba la “decepción importante” por el hecho de que los centros comerciales no puedan abrir hasta la segunda etapa. David García, responsable en Cataluña de la Asociación Española de Centros y Parques Comerciales, tildaba de medida “totalmente discriminatoria” al tener que seguir cerrados y subrayaba que era difícil que, en esas condiciones, las tiendas que ocupan esos complejos puedan conseguir la facturación necesaria para salvar la campaña de Navidad. ”Se critican a otros sectores [en referencia al comercio electrónico], pero vamos a ser nosotros los que paguemos los platos rotos”, se lamentaba.
La no representación de centros comerciales entre sus asociados marcaba la diferencia entre la valoración de las medidas de Foment y Pimec. La patronal de pymes expresó su “tranquilidad” por los cambios que el Govern plasmó en el plan definitivo. “No es exactamente como el plan que habíamos diseñado junto de Foment, pero las nuevas medidas aplicadas quitan presión a la situación cuando parecía que el sector comercial iba a explotar; la situación era insoportable”, afirmaba Àlex Goñi, presidente de Pimec Comerç, quien defendió que el aforo al 30% podría aumentarse hasta el 50%.
Después del borrador del plan de recuperación conocido el martes y la batalla interna en el Gobierno catalán, las expectativas empresariales eran más bien escasas. Por ello, la desescalada finalmente aprobada fue recibida con alivio en algunos sectores. Uno fue el de las estaciones de esquí, que quitaron hierro al hecho de que de momento no esté previsto levantar el confinamiento municipal. Para ellas la buena noticia es que el cierre de Cataluña se levantará a partir del 21 de diciembre, lo que abrirá las puertas de ese 50% de clientela que procede de fuera de Cataluña. Antes, pese a que se mantenga primero el confinamiento municipal y después el comarcal, abrirán instalaciones como fórmula para testar las medidas para evitar aglomeraciones, explicaba Quim Alsina, gerente de la Asociación de Estaciones de Esquí de Cataluña. “Abriremos cuando haya nieve, pese a que solo sea para los municipios donde están instaladas las estaciones”, dijo.
Y algo similar defendía Ramon Solsona, responsable del Gremio de Hostelería de Lleida. “Cuando tienes las expectativas tan bajas, todo puede mejorar”, señalaba consciente de que las comarcas de montaña podrán llegar a tiempo de salvar la campaña. Eso sí, reclamaba a la Generalitat medidas de control de la covid para evitar terceras olas de rebrotes y ahorrarse un nuevo estado de alarma como el actual.