La Generalitat interviene una residencia en Premià de Mar tras registrar 24 muertos
El Ayuntamiento denuncia opacidad en la información de la empresa gestora y estudia emprender acciones legales
El departamento de Salud de la Generalitat ha decidido intervenir la dirección de la residencia de ancianos Ca n’Amell de Premià de Mar después de constatar que 24 usuarios han muerto por coronavirus y que 89 de los más de 200 residentes está contagiado de Covid-19. Esta era una de las seis residencias que la Generalitat estaba evaluando por su situación crítica, y la inte...
El departamento de Salud de la Generalitat ha decidido intervenir la dirección de la residencia de ancianos Ca n’Amell de Premià de Mar después de constatar que 24 usuarios han muerto por coronavirus y que 89 de los más de 200 residentes está contagiado de Covid-19. Esta era una de las seis residencias que la Generalitat estaba evaluando por su situación crítica, y la intervención llega después de varias semanas en las que tanto los familiares como el Ayuntamiento de Premià de Mar hayan denunciado irregularidades por parte de la empresa privada Domus VI, y hayan pedido repetidamente la intervención de la gestión.
El alcalde del municipio, Miquel Àngel Méndez, ha expresado este viernes en un vídeo en las redes sociales “la rabia y la impotencia” ante la situación de la residencia Ca n’Amell, residencia privada donde hay unas 30 plazas concertadas. Este viernes, y después de que se haya desinfectado el espacio, el Ayuntamiento ha conocido los resultados de los test practicados en la residencia, y solo 28 usuarios de los más de 200 que viven en este centro han dado negativo en la prueba de la covid-19.
“Ha habido una negligencia absoluta de la dirección del centro, con el que no nos hemos podido comunicar en ningún momento pese a ofrecernos”, ha afirmado el alcalde. “También quiero denunciar la falta de respuesta correcta de la Generalitat, tanto del departamento de Asuntos Sociales como el de Salud, como máximos responsables de la situación”, ha dicho el alcalde, de Junts per Catalunya, para añadir que durante semanas se ha pedido la intervención total de la gestión del centro, que finalmente se ha producido este viernes.
Tanto los familiares como el consistorio denuncian que, desde el inicio del estado de alarma, la residencia de Ca n’Amell fue el único de los cinco centros que hay en Premià que no proporcionó los datos que se le requerían y hasta comunicó con retraso durante unos días los primeros muertos. Los familiares no podían comunicarse con los usuarios, y no recibían información. A principios del mes de abril, CatSalut intervino médicamente la residencia, y falicitó la información a las familias. Con la intervención de la dirección por parte de la Generalitat, el Ayuntamiento entiende que la situación puede mejorar. “Exigiré una comunicación directa, inmediata y continuada con la nueva dirección asistencial. Queremos que las familias tengan la información directa. Nos hemos sentido desplazados y ninguneados, el despropósito es muy grave: no han demostrado estar a la altura de la gravedad de los hechos, y exigimos ser parte activa de la solución”, ha zanjado el alcalde.