Antolín González, el expiloto de F3 acusado de matar a su padre en Aranda de Duero, confiesa que lo degolló
El exconductor de automovilismo de 23 años asegura que su progenitor se abalanzó sobre él con el arma blanca y que tuvo que defenderse
Antolín González, expiloto de automovilismo en la categoría F3 y de 23 años, ha confesado que mató a su padre con una puñalada en el cuello el pasado 5 de julio en Aranda de Duero (Burgos, 33.000 habitantes), donde permanece en prisión provisional desde entonces. El acusado compareció ante el juez para intentar reducir la condena que se le pide por el asesinato de su progenitor y, además de admitir los hechos, ha detallado que fue la víctima, de 56 años, quien primero esgrimió el arma blanca durante una fuerte discusión familiar y que durante la disputa se produjo la muerte. González se dio a la fuga tras el degollamiento y arrojó el cuchillo, según ha reconocido, al cercano río Arandilla. Después fue detenido en la pedanía de Sinovas.
Los acontecimientos sucedieron el pasado 5 de julio, sobre las cinco de la tarde, cuando padre e hijo se encontraban en un polígono industrial de Aranda de Duero donde se halla la nave que aloja la empresa familiar, de venta de aceitunas y encurtidos. Allí se produjo un grave enfrentamiento verbal entre ambos que se saldó con el hijo matando a su padre de una puñalada en el cuello.
Antolín González era conocido por haber sido subcampeón de la F3 asiática. El joven, tras producirse el deceso, abandonó el lugar y tiró el arma homicida al río Arandilla. González lleva en prisión provisional desde ese 5 de julio y ha sido esta semana cuando ha comparecido en el juzgado de Instrucción número dos de Aranda de Duero, encargado de dirimir el caso, para dar su versión de lo ocurrido. El expiloto carecía de antecedentes penales en el momento de cometer el parricidio que se le atribuye.
El joven ha explicado la disputa verbal con su padre, pero ha insistido en que fue este quien se abalanzó sobre él con el cuchillo, de modo que él tuvo que defenderse y en ese forcejeo ocurrió el apuñalamiento mortal de su progenitor. Los servicios de emergencias no pudieron hacer nada cuando lo atendieron, aun con vida, pero gravemente herido.
Este eventual relato, de confirmarse, podría propiciar que se le redujera la pena por existir una defensa sobre el ataque previo de su padre. González fue arrestado “sin oponer resistencia”, según informó la subdelegación del Gobierno en Burgos, al poco del crimen en la pedanía de Sinovas y puesto a disposición judicial al momento, decretándose que entrara en prisión provisional a expensas del juicio.