El PP admite que la legislatura va para largo aunque mantendrá el cerco a Sánchez
La dirección popular reconoce que “ya no espera” que el presidente del Gobierno dimita y convoque elecciones. Génova cree que el acoso al socialista le está funcionando
Después de semanas reclamando la dimisión una y otra vez a Pedro Sánchez, Alberto Núñez Feijóo cambió el paso este domingo y emplazó al presidente del Gobierno a medirse con él en las próximas elecciones generales, que si nada cambia están previstas para 2027. “Aguanta, Pedro, no te mereces irte con honor, te vamos a echar los españoles libre y democráticamente”, dijo el líder del PP en su discurso de clausura de la reunión intermunic...
Después de semanas reclamando la dimisión una y otra vez a Pedro Sánchez, Alberto Núñez Feijóo cambió el paso este domingo y emplazó al presidente del Gobierno a medirse con él en las próximas elecciones generales, que si nada cambia están previstas para 2027. “Aguanta, Pedro, no te mereces irte con honor, te vamos a echar los españoles libre y democráticamente”, dijo el líder del PP en su discurso de clausura de la reunión intermunicipal que los populares celebraron en Valladolid como espejo del congreso del PSOE en Sevilla. Ese mensaje de Feijóo sorprendió porque parecía revelar un cambio en la estrategia de la oposición, asumiendo que Sánchez no dimitirá y resignándose por tanto a una legislatura larga. La dirección del PP acota el alcance de las palabras del líder: era “una ironía”, subrayan en Génova, y no anticipa un giro estratégico. Pero la ironía de Feijóo tiene como trasfondo que la cúpula popular admite que lo más probable es que la legislatura dure. Ahora bien, incluso en ese contexto, Feijóo mantendrá la estrategia de acoso y derribo al líder del PSOE, porque “está funcionando”, se felicitan en la dirección del PP.
Este lunes, tras la reunión del comité de dirección de los populares, la vicesecretaria Ester Muñoz ha reconocido que el PP no espera que Sánchez atienda las reiteradas llamadas de la oposición para que deje el cargo. “Sabemos que Pedro Sánchez debería dimitir y convocar elecciones. ¿Lo va a hacer? No”, ha reconocido la dirigente popular. Preguntada sobre si el PP asumía que la legislatura va a durar, la vicesecretaria ha admitido implícitamente que eso es lo más probable, teniendo en cuenta que Génova no espera que Sánchez renuncie al cargo. “Debería convocar elecciones si tuviera dignidad, pero es evidente que ya no esperamos ni eso del señor Sánchez”, ha remachado Muñoz.
El PP maneja desde hace tiempo en privado como principal escenario una legislatura larga, a pesar de que su discurso en público insista en que el tiempo de Sánchez se ha agotado. A mediados de octubre lo reconoció uno de los principales dirigentes del partido, el vicesecretario de Política Autonómica y Municipal, Elías Bendodo, cuando se hizo público por error un vídeo en el que confesaba a dirigentes populares en una reunión interna que “es muy posible que haya Presupuestos”. Pero a medida que avanzaban las investigaciones judiciales sobre la esposa de Sánchez y sobre el caso Koldo, Feijóo intensificó la ofensiva contra el presidente del Gobierno, instándole a dimitir y tratando de generar el clima de que era posible que sucumbiera. La semana pasada llegó a pedirle un paso atrás dos veces: el miércoles, durante el debate parlamentario sobre la dana, y el jueves, la víspera del comienzo del congreso del PSOE en Sevilla, en el que el líder socialista se ha conjurado en cambio con los suyos para resistir.
Después, Feijóo ha pasado a emplazar a Sánchez a verse las caras en las urnas. El entorno de Feijóo desvincula este nuevo discurso del ejercicio de resistencia de Sánchez en el congreso del PSOE, mientras advierte de que no va a cejar en su estrategia de acoso y derribo al líder socialista. “El marcaje intenso al Gobierno está funcionando”, defienden fuentes del gabinete del líder popular. El análisis del núcleo duro de Feijóo es que no conviene aflojar porque con esta estrategia de oposición, Sánchez “ha consumido ya un tercio de legislatura sin que el Gobierno respire”. Por eso, que Feijóo no reclamara la dimisión al presidente este domingo no significa que no vuelva a hacerlo pronto, y en todo caso mantendrá el discurso de ataque frontal. La vicesecretaria Ester Muñoz catalogó este lunes el cónclave socialista como “el congreso de la apología de la corrupción”.
Feijóo se ve obligado, al mismo tiempo, a un difícil equilibrio entre mantener activada a la derecha contra Sánchez y decirle a los suyos que de momento no hay forma de desalojarle de La Moncloa. Después de haber amagado con una moción de censura, el líder del PP ha constatado otra vez que los socios parlamentarios del Gobierno no se mueven, e incluso se ha llevado el reproche del PNV por alentar escenarios hoy por hoy imposibles. El portavoz vasco Aitor Esteban le afeó la semana pasada en el Congreso sus “prisas” para echar al líder socialista. “Mire lo que le ocurrió a Albert Rivera (exlíder de Ciudadanos, fuera de la política)”, le advirtió Esteban. “Yo no tengo prisa”, se revolvió Feijóo, que se mueve siempre con el reto de manejar la ansiedad de la derecha por expulsar a Sánchez del poder.