Sánchez busca reanimar a la izquierda en el congreso de UGT: “Ganamos a los bulos y a la mentira en 2023 y lo haremos en 2027”
El presidente lanza una arenga política y pide al sindicato y a los progresistas que estén “orgullosos” de lo que ha hecho el Gobierno de coalición y seguirá haciendo
Como en 2023, las encuestas privadas ―el CIS sobrevalora sistemáticamente a la izquierda― empiezan a mostrar que el PP y Vox sumarían una mayoría absoluta clara si hubiera elecciones ahora. Eso, sumado a la sucesión de escándalos y situaciones delicadas que afectan al Gobierno ―la última una guerra abierta en Madrid por Juan Lobato― está afectando a la moral del mundo progresista, según señalan esos sondeos. Pedr...
Como en 2023, las encuestas privadas ―el CIS sobrevalora sistemáticamente a la izquierda― empiezan a mostrar que el PP y Vox sumarían una mayoría absoluta clara si hubiera elecciones ahora. Eso, sumado a la sucesión de escándalos y situaciones delicadas que afectan al Gobierno ―la última una guerra abierta en Madrid por Juan Lobato― está afectando a la moral del mundo progresista, según señalan esos sondeos. Pedro Sánchez, que logró darle la vuelta a esas encuestas en 2023, está convencido de que podrá hacerlo de nuevo en 2027, cuando están previstas las siguientes elecciones generales, y sobre todo está decidido a intentar levantar esa moral. Para eso ha aprovechado su participación en el congreso de la UGT en Barcelona para lanzar una arenga política en la que ha pedido a los progresistas que no se dejen avasallar por la presión de la derecha y reivindiquen el orgullo de defender las medidas sociales del Gobierno y la idea de “estar en el lado correcto de la historia”. Además, como es habitual, les ha animado a luchar contras “las mentiras” de la derecha y la ultraderecha. “A los bulos y la mentira les ganamos el 23J [de 2023] y les volveremos a ganar en 2027″, ha rematado.
Todo su discurso ha estado centrado en esa idea de resistencia y de lucha contra la derecha y la ultraderecha. “No nos perdonan haber ganado la moción de censura a un Gobierno cargado con corrupción. No nos perdonan que ganáramos las elecciones de 2019, ni las de 2023, ni que demostráramos que es posible frenar la ola reaccionaria que recorre Europa con Gobierno en coalición y en minoría parlamentaria, que se dice pronto. No nos perdonan que hayamos hecho cosas inimaginables como la reforma laboral, como la reconstrucción del pacto de Toledo y la subida de las pensiones”, ha insistido.
Mientras los militantes de la UGT iban subiendo el nivel de los aplausos ante el tono cada vez más mitinero de Sánchez, el presidente reforzaba esa llamada a la resistencia. “Los ataques quieren hacernos desistir. Quieren que el mundo progresista piense que esta batalla no tiene más salida que la resignación. Tenemos que sentirnos orgullosos de este Gobierno. Además, este proyecto político tiene nuevas metas. Hemos aprobado la ley de vivienda, pero tenemos que aplicarla. Aprobamos la reforma laboral, pero nos queda pendiente la reducción de jornada, y por eso pido a la patronal que se siente para que en esta legislatura tengamos esa reducción de jornada. Nos queda mucho por hacer, por ejemplo, abolir la prostitución”, ha detallado.
Y ahí ha concluido mostrando una convicción absoluta en que la izquierda seguirá en La Moncloa mucho más que los dos años y medio que quedan de legislatura. “Cuando me dicen “aguanta Pedro”, lo agradezco de corazón. Pero quedan tres años y los que vienen después de esos tres años. Siempre miramos adelante. Y estamos del lado correcto de la historia. Porque defendemos que la inmigración es positiva. Defendemos los derechos de las mujeres. Defendemos la legalidad democrática y la paz en Ucrania y en Palestina. Porque la derecha ha renunciado al debate legítimo de ideas, y su único proyecto político son los bulos y las mentiras”, ha insistido, en una clara referencia a las acusaciones del empresario Víctor de Aldama, que sostiene que entregó dinero a varios dirigentes de la cúpula socialista, algo que ellos niegan rotundamente.
Sánchez, además, ha hecho un apoyo muy explícito de Pepe Álvarez, secretario general de la UGT, que aspira a la reelección. Y ha recordado que él también sufre presiones de la ultraderecha en persona. “Pepe me reconoce que no es fácil a veces caminar por determinados barrios. Porque le reconocen, y tiene que sufrir la mirada de la ultraderecha, que le recrimina ser el secretario de la UGT. Doy las gracias a Pepe por dar un paso al frente y no un paso atrás, como quiere la ultraderecha. Los insultos que nos dicen en redes, en las sedes del PSOE, llegan porque defendemos la subida del SMI; la revalorización de las pensiones, la justicia fiscal, el ecologismo, la memoria democrática, Palestina. Por todo eso seguimos aquí en pie. Y en las urnas les volveremos a ganar como en 2019 y 2023″, ha insistido.