La forense desaconseja que Griñán entre en la cárcel por el riesgo vital que supone
La médica recomienda al tribunal que el expresidente andaluz permanezca en casa para tratar sus padecimientos “incurables”
La médica forense del Instituto de Medicina Legal de Sevilla que ha examinado el estado de salud del expresidente andaluz José Antonio Griñán ha concluido que es conveniente que se trate del cáncer que padece fuera de prisión. La facultativa ya hizo un primer informe, pero los jueces de la Audiencia de Sevilla, encargada de ejecutar la sentencia de la pieza política del caso ERE, consideraron que ...
La médica forense del Instituto de Medicina Legal de Sevilla que ha examinado el estado de salud del expresidente andaluz José Antonio Griñán ha concluido que es conveniente que se trate del cáncer que padece fuera de prisión. La facultativa ya hizo un primer informe, pero los jueces de la Audiencia de Sevilla, encargada de ejecutar la sentencia de la pieza política del caso ERE, consideraron que no fue concluyente. Ahora la forense sí es tajante al recomendar que permanezca en casa para tratarse los “padecimientos incurables” que acarrea su “enfermedad muy grave”.
La forense desaconseja que Griñán entre en la cárcel por el riesgo vital que supondría su entrada en prisión: “No se necesita solamente cuidados médicos en prisión, sino evitar entre otros, el peligro de infecciones en personas con un sistema inmunológico deprimido y que pueden suponer riesgos vitales, por la edad (77 años) y por la propia enfermedad, y ello en aras al bienestar físico y psíquico que necesitan estas personas con padecimientos graves”, refleja el informe médico trasladado a los magistrados. Ahora la Fiscalía Anticorrupción y las otras dos acusaciones, PP y Manos Limpias, tienen tres días para pronunciarse sobre Griñán, condenado a seis años y un día de cárcel por malversación y prevaricación, debido al mecanismo de pago de los ERE fraudulentos. El expresidente andaluz recurrió la sentencia del Tribunal Supremo ante el Constitucional por vulneración de derechos fundamentales, y ahora el órgano de garantías estudia su recurso y el de otros 11 condenados en la pieza política de la macrocausa judicial.
Tras la última revisión médica al expresidente andaluz, la médica destaca que algunos de los síntomas secundarios derivados de los medicamentos “han mejorado, otros persisten y exigen control periódico con excarcelaciones frecuentes”. Estos síntomas hacen patente la dificultad de mantener una “dinámica carcelaria”, por lo que recomienda que Griñán no ingrese en prisión porque sería muy compleja su recuperación con continuos traslados al hospital. La médica recuerda a los jueces que la cárcel ya admitió los problemas para trasladar al hospital a los presos enfermos de graves dolencias en las consultas programadas y no programadas.
Ahora que ha finalizado el tratamiento de radioterapia y continúa con el tratamiento hormonal, el estado de salud del expresidente andaluz es muy grave, puesto que sufre una “enfermedad incurable”, aunque ciertos tratamientos podrían lograr que remitiera, matiza la facultativa. El servicio de oncología revisó el estado de salud de Griñán hace 10 días y este no presentó mejoría. Sobre la situación actual, la forense concluye: “No existen criterios médicos que permitan hablar de remisión del cáncer que padece”.
Tanto los jueces como la Fiscalía Anticorrupción instaron a la médica a que aconsejara si el expresidente podía ser tratado o no dentro de la prisión de su cáncer, pero la facultativa no lo interpretó así. Ahora matiza que se le solicitó “exclusivamente el resultado de la revisión médica prevista para el 6 de junio”, para verificar si la situación de gravedad de la enfermedad persistía o había remitido.
Las acusaciones tienen dos días para pronunciarse tras el informe médico, y la semana próxima los jueces previsiblemente dictaminarán que Griñán sea tratado en casa del cáncer que padece. La semana pasada el exconsejero andaluz de Trabajo José Antonio Viera accedió al tercer grado debido a su estado de salud, tras cumplir cinco meses en prisión.