18 heridos al ser atropellados durante un concierto en una carpa de las fiestas de Vilanova
El vehículo iba conducido por una octogenaria a quien acompañaba su pareja, el veterano traficante Falconetti
Al menos 18 personas han resultado heridas en la noche de este domingo tras ser atropelladas por un pequeño turismo que irrumpió en una carpa donde se ofrecía un concierto por las fiestas de San Miguel de Deiro, en Vilanova de Arousa (Pontevedra). El automóvil estaba conducido por Digna Díaz Oubiña, de 82 años, que iba acompañada por Luis Falcón Pérez, Falconetti, de 83, un histórico contrabandista de las Rías Baixas, ...
Al menos 18 personas han resultado heridas en la noche de este domingo tras ser atropelladas por un pequeño turismo que irrumpió en una carpa donde se ofrecía un concierto por las fiestas de San Miguel de Deiro, en Vilanova de Arousa (Pontevedra). El automóvil estaba conducido por Digna Díaz Oubiña, de 82 años, que iba acompañada por Luis Falcón Pérez, Falconetti, de 83, un histórico contrabandista de las Rías Baixas, según La Voz de Galicia. El siniestro se produjo sobre las 23.25, en un momento en que el entoldado estaba repleto de personas. Según algunos testigos, la pareja que provocó el siniestro también estaba siguiendo desde el coche la actuación de París de Noia, una de las grandes orquestas festivas gallegas. Entre los heridos hay un niño en estado grave con una hemorragia abdominal y fractura de cadera, según el alcalde, Gonzalo Durán.
La parroquia de Deiro, un núcleo de Vilanova de unos 1.700 vecinos, celebraba anoche el día grande de sus fiestas patronales. Por la mañana, estas habían empezado con procesión y vermú, y por la noche el colofón era la “gran verbena a cargo de la espectacular orquesta París de Noia” en el palenque, tal y como reza el cartel de la celebración. En plena actuación, un Smart automático fuera de control irrumpió en la carpa. Según algunos testigos, Falcón y su mujer estaban viendo desde el coche el concierto cuando este se puso en marcha sin que la mujer, sentada al volante, pudiera controlarlo. El vehículo se metió unos 15 metros el interior del recinto y atropelló a un número aún por determinar de personas , además de derribar parcialmente la pérgola. Varias personas tuvieron que ser ayudadas para salir de debajo del coche, informa Efe.
Hasta el lugar se trasladaron los servicios de Urxencias Sanitarias-061, Bomberos de O Salnés, Protección Civil de Vilanova y Vilagarcía, y Guardia Civil, y se procedió a la evacuación del campo donde se estaban celebrando las fiestas parroquiales. Asimismo, fueron movilizados efectivos del Grupo de Intervención Psicológica en Catástrofes y Emergencias (GIPCE) por si resultase necesaria su intervención.
La Policía Judicial de la Guardia Civil de Cambados ha abierto diligencias y todo apunta a que se investigará a la conductora por un supuesto delito de lesiones imprudentes. Asimismo, efectivos de este cuerpo trabajan en la zona del siniestro para reconstruir lo sucedido y recabar información. Las fuentes consultadas cifraron inicialmente en 11 los heridos, pero no descartan que el número sea mayor, ya que precisan que hubo personas que se desplazaron por sus propios medios hacia el hospital. El balance ha sido elevado finalmente a 18, de los que 13 ya han sido dados de alta.
Dos de los heridos presentan lesiones graves: el citado niño, ingresado en el hospital Clínico de Santiago de Compostela tras sufrir una hemorragia abdominal, y una mujer de 66 años, que está en la unidad de cuidados intensivos del Complejo Hospitalario Universitario de Pontevedra con politraumatismo grave.
Las causas por las cuales la conductora perdió el control del vehículo no han sido divulgadas. La mujer, que ahora es investigada por los supuestos delitos de lesiones por imprudencia y daños, dio negativo en las pruebas de alcohol y drogas. El alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, ha confirmado que el “desgraciado accidente” se produjo porque la conductora, que iba acompañada de su marido en el coche, perdió el control del vehículo “por causas que se desconocen”. “Solo pudo ser por dos motivos, o mecánico o un despiste o fallo”, ha señalado, y ha confirmado que el coche impactó contra uno de los pilares de la carpa y arrolló a varias personas.
“No hay que darle más vueltas, fue un accidente desgraciado, había mucha gente, pero pudo ser mucho peor porque la carpa no se cayó por suerte, solo el pilar”, ha añadido Durán que ha trasladado su preocupación por las personas heridas y su deseo de que se recuperen cuanto antes. El regidor de Vilanova ha subrayado que la comisión organizadora de la fiesta cumplía con todas las condiciones de seguridad, y que el recinto estaba vallado adecuadamente, según exige la normativa.
La pareja es muy conocida en la localidad por las andanzas de quien iba de copiloto, Luis Falcón Pérez, más conocido como Falconetti, uno de los viejos contrabandistas que dio el salto al narcotráfico en Galicia. Estuvo preso al menos seis años por tratar de introducir en 1988 por el País Vasco 1,2 toneladas de hachís.
Retirado de la vida pública desde hace años, el nombre de Luis Falcón Pérez regresó de forma inesperada a los medios de comunicación, de los que siempre renegó, como protagonista de un suceso fatídico que también colocó a su pueblo natal en el centro de la noticia. El que fuera uno de los históricos contrabandistas de la ría de Arousa, fue también el primero en ser detenido por narcotráfico.
El patriarca tabaquero, uno de los más mediáticos de la década de los setenta y ochenta, dio el salto del Winston ilegal al hachís, por lo que pasó 6 años en la cárcel tras ser condenado por la Audiencia de San Sebastián por un alijo incautado en 1988 en el País Vasco. Falconetti, sin embargo, siempre ha negado su relación con las drogas y culpó al abogado y narcotraficante Pablo Vioque, ya fallecido, de haberle traicionado, y lo acusó de estar detrás de la operación.
Tras salir de la prisión, Falcón había perdido parte de su emporio por las deudas, aunque logró recuperarse rápidamente del bache. Su nueva vida la centró en el sector inmobiliario y hostelero. En 2012 fue juzgado de blanquear hasta 6 millones de euros supuestamente procedentes de las ganancias del narcotráfico, pero fue absuelto por falta de pruebas. La causa se cerró y Luis Falcón, con una salud precaria, solo se dejaba ver conduciendo un Smart, como el que causó el accidente este domingo, y en algún restaurante de confianza de forma esporádica.