Incautados miles de tomates falsos rellenos con 22 toneladas de hachís

La banda fabricaba bolas de droga que envolvían en plástico y celofán rojo para simular que eran tomates de calidad y con envoltorio

Madrid -

El envío de grandes cantidades de hachís ocultas en cocos, piñas y otras frutas y hortalizas de verdad es un método muy conocido por las policías del mundo. Pero modelar frutas con plástico, celofán y papel charol como envoltura de pelotas de hachís, empaquetarlas y exportarlas por palés como si fueran tomates de verdad y de calidad es algo más exótico. La Guardia Civil y la Policía Nacional se han incautado de 22.370 kilogramos de resina de cannabis camuflados en miles de unidades de tomates falsos (en realidad, mero papel rojo brillante) que ya estaban listos para ser expedidos a Francia. La...

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El envío de grandes cantidades de hachís ocultas en cocos, piñas y otras frutas y hortalizas de verdad es un método muy conocido por las policías del mundo. Pero modelar frutas con plástico, celofán y papel charol como envoltura de pelotas de hachís, empaquetarlas y exportarlas por palés como si fueran tomates de verdad y de calidad es algo más exótico. La Guardia Civil y la Policía Nacional se han incautado de 22.370 kilogramos de resina de cannabis camuflados en miles de unidades de tomates falsos (en realidad, mero papel rojo brillante) que ya estaban listos para ser expedidos a Francia. La red tenía su base en Córdoba, pero prácticamente toda la droga ha sido incautada en Málaga, perfectamente dispuesta en palés de brillantes tomates de mentira.

La Operación Califa Trucks comenzó el pasado 10 de enero, cuando fue interceptada en Málaga una furgoneta que transportaba 2.600 kilos de hachís “distribuidos en varias cajas de tomates falsos”. Aunque algún fruto verdadero había, la mayoría del envío eran pelotas prensadas de resina de hachís, que se envolvían en plástico de alimentación y, a su vez, en charol y celofán y con el logo de una empresa hortofrutícola (con el nombre Lemon, con el dibujo de una especie de limón demoniaco), según han explicado fuentes de la Guardia Civil de Córdoba.

Los palés con los falsos tomates incautados en una nave de Málaga.

Los agentes acudieron a la nave de origen de los tomates full, también en la provincia de Málaga, donde fueron localizados otros 19.700 kilos de resina de hachís. “La droga estaba oculta en 18 palés de grandes dimensiones que contenían bolas de hachís que simulaban ser tomates”, según un comunicado conjunto de Policía y Guardia Civil divulgado esta mañana. En ese almacén fueron detenidas dos personas que se escondían debajo de un camión.

Con la droga ya incautada, se desplegó la operación. Los agentes practicaron cuatro registros en la provincia de Córdoba, donde fueron detenidas cinco personas, entre ellas, el presunto líder de la organización, cuya identidad no ha sido facilitada. Este es “una persona conocida”, según fuentes del instituto armado, que había creado un núcleo duro de confianza, al tiempo que se valía de otras personas para las labores de mayor riesgo. “La organización criminal presentaba una compleja estructura, rica en recursos humanos, técnicos y materiales y con una fuerte capacidad económica”, se asegura en la nota.

Toda la organización tenía la apariencia de una empresa legal, formado por firmas menores. El núcleo duro utilizaba “personas de paja”, testaferros, “sin otra responsabilidad que figurar como responsables de las empresas utilizadas para el alquiler y/o adquisición de vehículos, inmuebles”, afirman. También han sido practicadas detenciones en la provincia de Cádiz, por donde entraba la droga a Europa.

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