El PP termina de deshojar la margarita en Cádiz y escoge al moderado Bruno García para las municipales
El partido conservador ha apurado para elegir a su candidato en una capital con opciones variopintas y en el que el resultado está muy abierto
El presidente provincial del PP de Cádiz, Bruno García León, lleva días de turné política por la provincia. Foto ante el atril un día en San Fernando, otro en Rota, otro más en Tarifa. Tocaba presentar a los distintos candidatos que la formación presenta para las municipales del próximo 28 de mayo. Hasta que este jueves se ha subido de nuevo al escenario, pero para ser revestido él mismo como alcaldable popular por la capital, la última de las provincias andaluzas que faltaba por desvelar. Con José María González Kichi (de Adelante Cádiz) retirado de la partida y opciones tan variopinta...
El presidente provincial del PP de Cádiz, Bruno García León, lleva días de turné política por la provincia. Foto ante el atril un día en San Fernando, otro en Rota, otro más en Tarifa. Tocaba presentar a los distintos candidatos que la formación presenta para las municipales del próximo 28 de mayo. Hasta que este jueves se ha subido de nuevo al escenario, pero para ser revestido él mismo como alcaldable popular por la capital, la última de las provincias andaluzas que faltaba por desvelar. Con José María González Kichi (de Adelante Cádiz) retirado de la partida y opciones tan variopintas como el ex gran hermano Ismael Beiro en la pugna (del partido Cádiz, sí), la ciudad se enfrenta al escenario electoral más abierto e incierto que se recuerda en los últimos años.
En ese ecosistema, el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno, ha elegido la cara más amable, moderada y sin estridencias posibles para Cádiz. Bruno García León, licenciado en derecho y parlamentario andaluz, nació en Jerez de la Frontera hace 43 años. Pero ese hecho, importante en una capital con rivalidades tan coloquiales como históricas con Jerez, no lo es tanto para quien se estrenó en la política, precisamente como concejal del PP en el Ayuntamiento de Cádiz en 2007. Hasta tres mandatos (12 años) estuvo de edil en el consistorio gaditano, dos de ellos con responsabilidades como delegado de Turismo, Fomento y teniente de alcalde. Es en todo ese periodo donde García se ganó a pulso el perfil de moderado, ajeno a los debates broncos y las polémicas que cada vez se hicieron más comunes en el ocaso de las mayorías atronadoras de Teófila Martínez, alcaldesa de Cádiz de 1995 a 2005.
“El sectarismo y la dejadez lo vamos a cambiar por moderación y determinación”, ha avanzado García en una rueda de prensa en la calle con la afamada playa de La Caleta como telón de fondo. Allí, arropado por la propia Martínez —que le ha acompañado en su paseo hasta el atril y le ha escoltado en su comparecencia— llegó la plana mayor del PP local y provincial, tras celebrar una sesión extraordinaria del Comité Ejecutivo provincial del partido en el cercano Parador de Cádiz. El ya candidato ha excusado tanta espera para su nombramiento, ya que era “una decisión importante y que había que madurar”. “Nunca he dicho que no. En el fondo, siempre he querido. Lo que yo no he hecho es moverme para hacerlo, he hecho mi trabajo”, ha justificado García.
García se ha impuesto en el debate interno y externo a la propia Martínez, que también ha sonado durante las últimas semanas con fuerza candidata a las elecciones de 2023. En la terna también estaba Jose Manuel Cossi, actual concejal en el Ayuntamiento y autor del Carnaval. Pero el anuncio de Kichi de no presentarse para mayo y, con ello, cumplir con su palabra dada cuando entró en política, convulsionó al Partido Popular gaditano. Fue ahí cuando en la formación de derechas se percataron que cualquier decisión sería clave para tener más cerca recuperar el añorado despacho de la plaza de San Juan de Dios. “La ciudad no está dormida, pero sus gobernantes sí lo han estado. Yo quiero que las izquierdas me voten a mi, que me voten todos los gaditanos”, ha explicado García.
Han sido semanas de encuestas y rumores internos que primero apuntaban a Martínez como la opción más segura para hacerse con el bastón de mando. Ella, mientras, guardaba silencio paciente y su entorno aseguraba que se sentía cómoda en su actual desempeño de presidenta de la Autoridad Portuaria de Cádiz. Pero las tornas comenzaron a cambiar con otras voces internas que empezaron a plantear que volver a presentar a la que fue la alcaldesa más votada de las capitales de provincia de España —en 2003 y 2007— no decía mucho a favor del supuesto deseo del PP andaluz de Moreno de rejuvenecer al partido. Y ahí fue cuando García ha ganado enteros, hasta convertirse en la opción escogida. Así lo ha defendido Mercedes Colombo, la presidenta local de la formación en Cádiz, en su presentación del candidato: “Es el mejor ejemplo de la nueva forma de gobernar de Juanma Moreno”.
Frente a Bruno García se abre el escenario más abierto e incierto de las últimas elecciones municipales en Cádiz. El periodista y escritor David de la Cruz ya está confirmado como sucesor de Kichi en Adelante Cádiz. El candidato joven, entusiasta y con don de palabra tiene en su haber —para bien y para mal— presumir de la gestión de la ciudad más verde y social, de la que saca pecho su partido. En el centroizquierda está también confirmado Óscar Torres como alcaldable del PSOE, actual concejal en la oposición y el más previsible de los posibles en un partido que lleva años inmerso en cambios de portavoz y crisis internas en su agrupación local. García ha dejado claro que la batalla ya ha empezado al proclamarse a sí mismo como el posible “alcalde más social”, una bandera enarbolada especialmente por el consistorio de González.
El candidato más estrambótico que figurará en las papeletas del 28M es el ex gran hermano Ismael Beiro. El también empresario se postula bajo las siglas de Cádiz, sí, una formación localista surgida bajo el auspicio de un partido de corte andalucista como Andalucía por sí. De las entrevistas que ya ha dado, el candidato asegura que no tiene predilecciones por ninguna formación política, pero define a Pedro Sánchez como “un Napoleón de marca Hacendado”, a Alberto Núñez Feijóo como “honesto” y a Moreno como “muy trabajador”.
Otra marca local será la de Ahora Cádiz, liderada por el empresario Eugenio Belgrano, que también se define como ajeno a la política tradicional, aunque es especialmente beligerante en sus críticas contra el gobierno de Kichi. Vox, que en las elecciones de 2019 no sumó los votos suficientes para entrar en el salón de plenos, presenta al arquitecto Francisco Miguel Martín como candidato. Con esos mimbres, los candidatos tendrán que luchar por alcanzar los 14 concejales que permiten tener la mayoría absoluta en el Ayuntamiento gaditano. O conseguir el número suficiente de ediles que les permitan llegar a pactos de gobierno.