Javier Esparza, presidente de UPN: “Nuestro partido merece un respeto”
El líder de la formación navarra evita confrontar con los diputados que desobedecieron al partido en la votación de la reforma laboral y asegura sentirse “tremendamente respaldado”
El presidente de la formación regionalista navarra, UPN, Javier Esparza, ha manifestado este jueves un “total y absoluto respeto” por la propuesta de sanción emitida por el Comité de Garantías y Disciplina de la formación para los dos diputados que desobedecieron al partido en la votación de la reforma laboral la semana pasada ―Carlos García Adanero y Sergio Sayas― y que es mucho más leve que la sanción re...
El presidente de la formación regionalista navarra, UPN, Javier Esparza, ha manifestado este jueves un “total y absoluto respeto” por la propuesta de sanción emitida por el Comité de Garantías y Disciplina de la formación para los dos diputados que desobedecieron al partido en la votación de la reforma laboral la semana pasada ―Carlos García Adanero y Sergio Sayas― y que es mucho más leve que la sanción recomendada por la dirección, que incluye la expulsión de los dos representantes de sus filas. Esparza ha evitado confrontar con los dos diputados díscolos y ha reclamado “respeto” para su formación, en la que ha dicho sentirse “tremendamente respaldado”.
El Comité de Garantías y Disciplina de UPN se plantea suspender de militancia durante dos años y medio a los dos diputados que se saltaron la disciplina de partido al votar en contra de la reforma laboral en el Congreso. Los diputados afectados, que ya han anunciado que presentarán alegaciones, consideran que la propuesta del órgano de disciplina es un “despropósito” y “profundamente injusta” porque no la ven motivada, ni fundamentada.
La calificación de la desobediencia como falta grave no abre, como tal, la puerta a una posible expulsión. No obstante, si se ratifica la suspensión de militancia durante dos años y medio, en la práctica se estaría dando lugar a esa expulsión —al menos temporal— puesto que ni Sayas ni García Adanero podrían presentarse para ser elegidos en la próxima convocatoria electoral.
Esparza, que ha atendido a los periodistas a su llegada al Parlamento foral para la sesión plenaria semanal, ha subrayado que el procedimiento está “abierto” y tiene carácter “interno”. “No tengo nada más que decir. No voy a entrar en ningún tipo de confrontación con ninguno de los dos diputados. Yo soy el presidente de UPN, nuestro partido se merece un respeto y es lo que voy a hacer, es la manera de proceder”, ha manifestado.
El presidente de la formación navarra ha asegurado sentirse “tremendamente respaldado” por el conjunto de la formación política, por sus órganos, también por los afiliados y por la gente. “La fuerza de UPN está en la gente y yo creo que estamos demostrando que somos un partido muy fuerte y creo que es algo muy positivo para este momento y para UPN en el futuro”, ha incidido.
Unión del Pueblo Navarro quería escenificar, con el apoyo y voto a favor el pasado jueves de sus dos diputados en el Congreso a la nueva reforma laboral, “un gesto para reconducir y reconstruir” su relación maltrecha en estos últimos años con el PSOE en toda España y con el Partido Socialista de Navarra (PSN) en esa comunidad, según fuentes de la dirección de todos los partidos implicados. La jugada, que tenía como transfondo incluso un posible replanteamiento futuro de la actual plataforma electoral de derechas Navarra Suma con PP y Ciudadanos, salió mal por el cambio en el sentido de voto in extremis de sus dos parlamentarios. El error del diputado del PP, Alberto Casero permitió finalmente al Gobierno salvar su proyecto de reforma laboral.