Una pena infinita
La presidenta del Congreso destaca de su jefe de gabinete, José de Francisco, fallecido este jueves, su empuje y ánimo inquebrantables
Anoche falleció el que ha sido en los últimos años mi jefe de gabinete, José de Francisco. Y nos deja con una pena infinita, sin su empuje y su ánimo inquebrantables y con tantos recuerdos y enseñanzas como cariño y aprecio recibió de todos quienes tuvimos la fortuna de conocerle. Jose ha sido hasta su último momento el apoyo y el impulso más intenso y brillante del que hemos disfrutado su familia y sus amigos. Porque en todas sus intensas y entregadas tareas profesionales así como en su vida personal supo no sólo hacerse imprescindible, sino sobre todo crear un vínculo profundo de pasión y am...
Anoche falleció el que ha sido en los últimos años mi jefe de gabinete, José de Francisco. Y nos deja con una pena infinita, sin su empuje y su ánimo inquebrantables y con tantos recuerdos y enseñanzas como cariño y aprecio recibió de todos quienes tuvimos la fortuna de conocerle. Jose ha sido hasta su último momento el apoyo y el impulso más intenso y brillante del que hemos disfrutado su familia y sus amigos. Porque en todas sus intensas y entregadas tareas profesionales así como en su vida personal supo no sólo hacerse imprescindible, sino sobre todo crear un vínculo profundo de pasión y amistad.
Desde luego, con los responsables políticos para quien trabajó, siempre en el ámbito del Parlamento, desde sus inicios con Diego López Garrido a sus últimos días en el Gabinete de la Presidencia del Congreso, pasando por los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez con la vicepresidenta Fernández de la Vega y los ministros Francisco Caamaño y Ramon Jáuregui, y por el Grupo Socialista del Congreso de Alfredo Pérez Rubalcaba, de Edu Madina, de José Antonio Alonso, de Antonio Hernando, de Margarita Robles, de Adriana Lastra y del propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Pero esa misma amistad y pasión crecieron también entre quienes trabajaron bajo su dirección, a su lado y también frente a él. Tras más de 30 años de actividad política sólo conozco buenas palabras, agradecimiento e inmenso cariño por Jose, sea entre sus equipos, en los mundos del periodismo y la academia, a los que siempre se esforzó en ayudar, o entre los responsables de otros grupos y partidos, con quienes estableció siempre lazos de lealtad y aprecio. De todos, sin excepción, recibió elogios y afecto sincero, y a todos ofreció, aún con mayor intensidad, su ayuda y su consideración. De nadie puedo decir con tanta justicia que fue un gran profesional y una persona buena que hizo siempre mejores a quienes estuvimos cerca de él.
En una vida demasiado corta que él hizo plena y fructífera en todas sus vertientes, Jose se convirtió en garantía de esfuerzo y acierto, de conocimiento y respeto al Derecho, de coherencia y firmeza en la defensa de los principios propios, de generosidad hacia los demás, independientemente de ideologías y adscripciones. Con su labor hizo siempre más efectivos y fructíferos los principios constitucionales de pluralismo, igualdad y solidaridad en los que tanto creía. Como jurista comprometido, ese fue sin duda su objetivo y su mayor logro.
Con él, el Parlamento pierde a su mejor conocedor y a uno de sus grandes servidores, porque nadie como él hizo, desde su compromiso político, mejor servicio a la institución parlamentaria. También al Partido y al Grupo Socialista a quien entregó su más intensa y capaz cabeza, siempre atenta a la búsqueda de la mayor eficacia transformadora desde el profundo respeto al marco constitucional. Para sus equipos ha sido el director más querido y generoso, el que siempre daba ánimo, multiplicaba fuerzas y reconocía el trabajo. Para sus amigos, una luz y un apoyo inigualable. A mí me deja un gran agujero en el alma.
Con nuestro recuerdo y nuestro cariño queremos acompañar a su esposa y sus hijas, que tan feliz le hicieron y fueron su máximo orgullo, y mantener, para bien de quienes le sobrevivimos, su memoria.
Meritxell Batet es presidenta del Congreso de los Diputados.