Espadas se reunirá con Díaz a final de semana para abordar la transición en el PSOE andaluz tras derrotarla en las primarias
El alcalde de Sevilla quiere tener “nuevas caras” en el grupo parlamentario andaluz en el pleno de la próxima semana
El nuevo candidato del PSOE de Andalucía a la Junta, Juan Espadas, tiene prisa por hacer valer su victoria en las primarias y el primer lugar donde quiere visibilizar el cambio de rumbo en el partido es en el grupo parlamentario. La semana que viene hay pleno y su intención es que entonces ya no sea Susana Díaz quien ejerza como portavoz del partido en las interpelaciones al presidente andaluz, Juan Manuel Moreno. Así lo ha dado a entender el alcalde de Sevilla ...
El nuevo candidato del PSOE de Andalucía a la Junta, Juan Espadas, tiene prisa por hacer valer su victoria en las primarias y el primer lugar donde quiere visibilizar el cambio de rumbo en el partido es en el grupo parlamentario. La semana que viene hay pleno y su intención es que entonces ya no sea Susana Díaz quien ejerza como portavoz del partido en las interpelaciones al presidente andaluz, Juan Manuel Moreno. Así lo ha dado a entender el alcalde de Sevilla en la Embajada de España en París, adonde ha acudido a presentar un proyecto turístico común entre la capital andaluza y Barcelona. Espadas también ha avanzado que se reunirá con la secretaria general de su partido a finales de esta semana.
“Mi primera prioridad es el grupo parlamentario, la semana que viene hay sesión plenaria e intentaremos llegar a tiempo en los plazos para tener ya a las personas que van a identificar las nuevas caras de esos cambios en la estrategia de oposición”, ha señalado Espadas. El regidor ha manifestado que en su encuentro con Díaz, a finales de esta semana, también quiere analizar “cómo hacer el reparto de roles” dentro de ese grupo parlamentario “en relación con la dirección política del mismo” y cómo se puede “articular” el futuro papel de Díaz.
La secretaria general del PSOE-A ya adelantó el pasado domingo, tras conocerse su derrota por casi 17 puntos con respecto de Espadas, que no se presentaría a la reelección y que se ponía a disposición del ganador de las primarias, pero se negó a presentar su dimisión. Díaz, sin embargo, eludió concretar si esa colaboración supondría el abandono de su puesto como portavoz del grupo en el Parlamento andaluz y pidió esperar a reunirse con el alcalde de Sevilla.
En el partido, muchos dudan del alcance de la colaboración de Díaz, pero Espadas asegura que no quiere forzar ninguna salida. “Pediría no especular porque vamos a trabajar en la línea de hacer posible este proceso de transición, porque en este proceso no solo es el fondo, sino las formas, lo que importa”, ha señalado Espadas. El candidato a la Junta de Andalucía ha insistido en su mensaje de unidad. “En el PSOE no sobra nadie, todos debemos y tenemos que jugar y remar en la misma dirección”.
Aumenta la presión para que Díaz dimita
Los críticos de Díaz y la dirección de Ferraz esperan que sea la propia dirigente socialista la que, además de un paso a un lado, dé un paso atrás y acabe presentando su dimisión para evitar la imagen de una expresidenta de la Junta como una diputada rasa más en la bancada parlamentaria.
Y esa presión para que la dirigente socialista deje la secretaría general se multiplica cada vez desde más frentes. “Si me preguntan en mi caso qué haría, pues probablemente me iría”, ha afirmado este martes Guillermo Fernández Vara. El presidente extremeño ha remarcado en una entrevista en la Cope que “no debería alargarse mucho en el tiempo” la decisión. Fernández Vara, el único de los barones que pertenece a la dirección federal del PSOE, ha recordado no obstante que en 2011 perdió la Junta y entonces se le dio la oportunidad de presentarse en los siguientes comicios. “El tiempo te dice al final si acertaste o te equivocaste”, ha concluido. Fuentes de la Junta de Extremadura diferencian su caso del de Díaz: Fernández Vara fue desbancado por una alianza “contra natura” entre PP e IU, informa José Marcos.
El dirigente extremeño ha sido el único de los presidentes autonómicos del PSOE que se ha pronunciado en público sobre el futuro de Díaz. Otros barones consultados comparten en privado que la expresidenta andaluza debe renunciar como responsable de la principal federación socialista y facilitar la sucesión a Espadas.