El PSOE de Granada se suma a la petición de elegir ya al candidato a la Junta
La dirección federal esperará hasta después de las elecciones madrileñas para tomar una decisión
El PSOE de Granada, la segunda agrupación más numerosa de Andalucía, ha apostado este sábado por la convocatoria anticipada de primarias en el PSOE andaluz para elegir cuanto antes al candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía. La posición de la ejecutiva provincial de Granada se suma a la de Jaén y a otras agrupaciones, secretarios locales y alcaldes a favor de un relevo de liderazgo en la federación andaluza. También anticipa un cambio en la correlación de fuerzas en torno a la expresidenta de la Junta Susana Díaz, aunque la votación, cuando se convoque, estará en manos de los 45.75...
El PSOE de Granada, la segunda agrupación más numerosa de Andalucía, ha apostado este sábado por la convocatoria anticipada de primarias en el PSOE andaluz para elegir cuanto antes al candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía. La posición de la ejecutiva provincial de Granada se suma a la de Jaén y a otras agrupaciones, secretarios locales y alcaldes a favor de un relevo de liderazgo en la federación andaluza. También anticipa un cambio en la correlación de fuerzas en torno a la expresidenta de la Junta Susana Díaz, aunque la votación, cuando se convoque, estará en manos de los 45.759 militantes, según el último censo oficial disponible.
No ha habido votación en la ejecutiva de Granada, sino que sus dirigentes se fueron pronunciando ante el debate abierto por su secretario general, José Entrena. A favor del adelanto se manifestaron 20 dirigentes, entre ellos el nuevo delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, diputados al Congreso, y los alcaldes de Armilla, Dolores Cañavete, y Maracena, Noel López Linares —las agrupaciones más grandes de Granada—, así como el portavoz municipal y secretario de Granada capital, Francisco Cuenca. En contra solo hubo dos pronunciamientos, entre ellos el de la exdelegada del Gobierno Sandra García, cuya reciente destitución se interpretó como el fin del pacto entre Pedro Sánchez y Susana Díaz, según fuentes socialistas.
En un comunicado, la ejecutiva granadina ha pedido este sábado “a las direcciones regional y federal que acuerden una fecha cuanto antes para no dilatar el debate, de forma que el partido esté preparado para abordar cualquier escenario electoral y centrado en los problemas actuales de la ciudadanía”.
En un goteo continuo, las direcciones provinciales y locales del PSOE andaluz van sumando apoyos para reclamar a la dirección federal la convocatoria de unas elecciones internas para elegir a su cartel electoral a la Junta, antes de que se celebre el congreso regional previsto para fin de año. El argumento que los dirigentes críticos a Díaz emplean es que el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno (PP), puede convocar elecciones andaluzas, que no tocarían hasta dentro de 19 meses, cuando le convenga y coger al PSOE andaluz sin tener hechos los deberes. Moreno niega la mayor, aunque también deja su punto de incertidumbre. “No tengo intención de adelantar las elecciones salvo causa de necesidad, es decir, que me quede sin sustento en el Parlamento”, aseguró este viernes.
Esa es la explicación que dan en las reuniones de las ejecutivas algunos dirigentes, aunque, en el fondo, de lo que se trata es de propiciar cuanto antes un cambio de caras en el PSOE andaluz, que por primera vez en la historia de la autonomía se encuentra en la oposición tras casi 37 años en el poder.
El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, la persona elegida por la dirección federal para pilotar el cambio, defendió el lunes pasado en la reunión de ejecutiva sevillana en la que ocupa una vicesecretaría que había que tomar ya una decisión para no depender del botón electoral del presidente de la Junta y ante la evidencia de que el debate sobre la elección del candidato está de plano instalado en el PSOE.
Desde entonces, Espadas se siente más libre para hablar, pero aún se resiste a hacer pública su candidatura. Y no lo hará, según fuentes próximas, hasta que se convoquen las primarias. “Lo más inteligente sería ganar unos meses en la celebración de esas primarias para poder reforzar el liderazgo del compañero o compañera que obtuviera el respaldo de la militancia y poder centrarnos en el proyecto que presentaremos a los andaluces”, aseguró el pasado miércoles.
La estrategia de los críticos a Susana Díaz pasa por ir sumando apoyos a favor del adelanto, de manera que la dirección federal tenga que tomar una decisión que solo tiene en su mano, como bien recuerdan desde la ejecutiva regional. Ahora mismo Ferraz no dispone ni de un segundo para otra cosa que no sean las elecciones madrileñas y cuando pasen ya se verá. Espadas cree “posible” el adelanto después del 4 de mayo, aunque otros dirigentes consideran “que no es algo seguro” y dejan caer que dependerá del resultado.
Según los críticos, en Andalucía hay cuatro agrupaciones claramente decantadas a favor del cambio de liderazgo: las de Jaén, liderada por Paco Reyes; Granada, por José Entrena; Cádiz, con Irene García al frente; y Huelva, esta última en manos de una gestora. En el resto, Susana Díaz mantiene la mayoría, pero hay divisiones.
En Sevilla, pilotada por Verónica Pérez y a la que pertenece la secretaria general y la más numerosa (supone el 22% del total de militantes andaluces), no hay unanimidad en torno a la expresidenta y cualquier división resta o suma a cualquiera de los aspirantes. En Córdoba, la secretaria de Organización y diputada en el Congreso, Rafi Crespín, abandera el cambio frente al secretario general, Antonio Ruiz; en Almería, su secretario general, José Sánchez Teruel, sacó por unanimidad mantener el calendario de congresos; y en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, se opone a adelantarlo, pero no ha convocado a su ejecutiva, como le han pedido agrupaciones locales destacadas como la de Torremolinos, a favor del anticipo.
Con estas cuentas, los críticos vaticinan que Díaz no tiene la mayoría que obtuvo en Andalucía en las primarias a la secretaría federal en mayo de 2017 frente a Pedro Sánchez, cuando reunió el 63,1% de los votos, frente al 36,7% que sacaron Sánchez (31,6%) y Patxi López (5,1%). La expresidenta mantiene una agenda frenética de contactos por las agrupaciones (ha recorrido más de 70 en apenas mes y medio) y confía en los militantes. En su gira, Díaz asegura que quiere llevar la voz de los ciudadanos al Parlamento, pero cuando comparece ante los medios las preguntas siempre giran sobre las primarias. No solo le pasa a ella, también al resto de dirigentes. Y esa es otra de las dificultades, y no menor ni la única, de que la oposición del PSOE andaluz al primer Gobierno de derechas de Andalucía llegue solo a muy pocos oídos.