‘Ignacio’ golpea a la Península y Baleares con vientos de 100 kilómetros por hora y olas de hasta siete metros
Alerta en todas las comunidades salvo Canarias, con lo peor en Andalucía, Castilla-La Mancha, Murcia y Comunidad Valenciana
Los vientos de fuertes a muy fuertes continúan este sábado arreciando en el norte, centro y oeste de la Península y en Baleares, donde se están volviendo a superar las rachas de 80/100 kilómetros por hora. El temporal lleva asociada mala mar, con olas de cuatro a cinco metros en el Atlántico gallego y en el Cantábrico, y de tres a cuatro en el Mediterráneo peninsular. En Baleares incluso pueden elevarse a siete metros. Toda España salvo Canarias y las ciudades autónomas...
Los vientos de fuertes a muy fuertes continúan este sábado arreciando en el norte, centro y oeste de la Península y en Baleares, donde se están volviendo a superar las rachas de 80/100 kilómetros por hora. El temporal lleva asociada mala mar, con olas de cuatro a cinco metros en el Atlántico gallego y en el Cantábrico, y de tres a cuatro en el Mediterráneo peninsular. En Baleares incluso pueden elevarse a siete metros. Toda España salvo Canarias y las ciudades autónomas están en alerta por viento, lluvia, nevadas, deshielos y mala mar, con lo peor en Andalucía, Castilla-La Mancha, Murcia y Comunidad Valenciana, donde el nivel de aviso en algunas zonas es naranja ―el segundo de una escala de tres, lo que implica riesgo importante para las actividades al aire libre― por vientos de hasta 100 kilómetros por hora.
Se trata de la borrasca Ignacio, el siguiente vagón del tren de borrascas que comenzó el martes con Gaetan y siguió el jueves con Hortense. Ignacio ya empezó a últimas horas del viernes a afectar a España, aunque no se espera que sea tan potente como Hortense, que dejó una racha de 179 kilómetros en el municipio oscense de Panticosa y un reguero de incidentes, pero no daños personales. De momento, la racha más potente de Ignacio se queda en 107 kilómetros por hora en Pobla de Benifassà-Fredes (Castellón), 100 en Estaca de Bares (A Coruña) y 99 en Pontons (Barcelona). “En solo 12 horas, atravesará la Península. Será probablemente la última con nombre de esta serie”, anota el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo.
Ignacio también deja lluvias de oeste a este, aunque no se esperan grandes cantidades, salvo en el sur de Galicia, donde pueden ser fuertes o persistentes. También se espera que llueva con cierta abundancia en el oeste de la cordillera Cantábrica y en puntos de los Pirineos. La cota de nieve arranca en 800/1.000 metros en el norte, aunque irá subiendo hasta 1.800/2.000 metros al mediodía para caer a última hora a 1.500 metros. “No se esperan grandes cambios en las temperaturas, si acaso bajarán en la mitad oriental peninsular y Baleares y subir por el noroeste. Habrá heladas en zonas de montaña”, explica Del Campo.
El domingo habrá una subida de las temperaturas, especialmente en el centro y mitad sur. El ascenso será muy marcado en las mínimas, con entre cuatro y seis grados más. Los días siguientes, esta tendencia se irá extendiendo al resto del país. Este día terminará de pasar el frente asociado a Ignacio a primeras horas de la mañana pero, sin un minuto de descanso, por la tarde llegará un nuevo frente asociado a una nueva borrasca. Así, aún puede haber por la mañana lluvias dispersas en Baleares, mientras que en la Península, hasta que entre el nuevo frente, habrá cielos nubosos con “cuatro gotas”, salvo en Galicia, el Cantábrico y en zonas de montaña, donde pueden ser lluvias algo más intensas. Además, el viento seguirá soplando con fuerza en el norte y este peninsular, aunque ya no serán rachas tan intensas como el sábado e irá amainando a lo largo del día.
Este sistema frontal atravesará la Península y dejará lluvias a su paso el lunes, aunque en general serán débiles salvo en las montañas. La cota estará en 1.200 metros en el norte, pero en 600/800 en Pirineos. Las temperaturas subirán en la mitad sur y bajarán algo en la mitad norte. Los termómetros alcanzarán valores bastante altos en el sur del área mediterránea, con entre 20 y 22 grados, y el viento soplará del oeste, pero ya sin tanta fuerza. Otro sistema frontal llegará el martes y dejará de nuevo precipitaciones abundantes en Galicia, Cantábrico y zonas de montaña de la Península y lluvias ocasionales y dispersas en puntos de la meseta y en las sierras del sureste.
La situación irá tendiendo la estabilidad, con gran parte de España en situación anticiclónica salvo en Galicia y en las comunidades cantábricas, a las que rozarán extremos de sistemas frontales. Esta calma atmosférica favorecerá la aparición de bancos de niebla y de nubes bajas que pueden ser extensos y que pueden dejar los cielos cubiertos en muchas zonas del interior durante buena parte del día. Las temperaturas serán “bastante altas para la época a partir del miércoles”, sin heladas nocturnas y con valores diurnos que superarán los 20 grados en buena parte del Mediterráneo y tercio sur peninsular e incluso los 22 o 24 grados en la Comunidad Valenciana y Murcia. A orillas del Cantábrico el ambiente será muy cálido, con más de 20 grados en las horas centrales del día. “Los valores estarán entre 5 y 10 grados por encima de lo normal”, puntualiza Del Campo.