Praga a través de sus leyendas
La Ciudad Vieja de la capital checa no solo hace gala de antiguos edificios. Sus calles y monumentos susurran viejas y fantásticas historias que te transportan a un pasado mágico
El Castillo de Praga, el puente de Carlos y la plaza de la Ciudad Vieja, con su reloj astronómico, son solo algunos de los tesoros con los que Praga da gustosa la bienvenida al viajero. Pero hay mucho más: con su mezcla de arquitectura gótica, torres barrocas y una vida cultural vibrante, la capital checa promete una experiencia inolvidable que alimenta el alma y despierta los sentidos.
La mejor época para viajar a Praga
Un buen momento para viajar a Praga es durante la primavera e inicio del verano (de abril a julio), o bien a principios de otoño (en septiembre y octubre), cuando la ciudad luce su encanto bajo temperaturas agradables y un clima moderado. Estas estaciones ofrecen también la ventaja de estar menos masificadas, lo que permitirá disfrutar con tranquilidad de todo lo que la ciudad tiene para ofrecer.
Leyendas de Praga
Praga, la Ciudad de las Cien Torres, es un laberinto de calles adoquinadas que susurra una miríada de historias que hablan de tiempos pasados. Cada rincón de su casco histórico, conocido como Staré Město, está impregnado de mitos y leyendas que invitan al viajero a sumergirse en una atmósfera mística que mezcla ecos de historias pretéritas reales o imaginadas. Por eso, desde Escaparate Viajes queremos invitarte a acompañarnos en un recorrido por algunos de sus rincones más emblemáticos, donde historia y la fantasía se entrelazan, y sugerirte alojamientos céntricos y a buen precio para que descanses sin tener que desplazarte lejos.
La plaza de la Ciudad Vieja y su reloj astronómico
El corazón palpitante de Praga es la plaza de la Ciudad Vieja, un espacio que ha sido testigo de innumerables eventos históricos y que alberga un famoso reloj astronómico que cuenta ya con más de 600 años de antigüedad. Su creación, obra del maestro relojero Nicolás de Kadán, está relacionada con un ejemplo perfecto de fake news medieval, pues una leyenda divulgada durante siglos le adjudicó erróneamente su origen a otro maestro, Hanus Ruze.
Según esta historia, Hanus habría sido cegado por orden de los concejales de la ciudad para que no pudiera replicar su obra en otro lugar; y, en venganza, este habría manipulado el mecanismo del reloj, dejándolo inoperativo durante años (de hecho, el reloj, de 1410, no terminó de funcionar bien hasta su reparación en 1570). Una historia injusta y doblemente falsa, porque Hanus realizó numerosos trabajos de restauración por toda Europa, y Kadán recibió en pago por su trabajo una casa en la ciudad.
La Iglesia de Nuestra Señora de Týn y el Gólem de Praga
Dominando la plaza con sus imponentes torres góticas, la Iglesia de Nuestra Señora de Týn está vinculada a la leyenda del Gólem, una criatura de barro que habría sido fabricada por el rabino Judá Leví ben Betzalel en el siglo XVI para proteger al barrio judío de Praga de los abusos y persecuciones de las que era objeto. Se dice que el gólem fue creado en la sinagoga Vieja-Nueva, situada a poca distancia de la iglesia, y que su cuerpo inerte aún descansa en su ático, esperando ser despertado en tiempos de necesidad.
Hotel Palác U Kočků
El hotel Palác U Kocku (Palacio de los Gatos) ocupa un edificio barroco protegido y tiene una ubicación perfecta en el centro histórico de Praga, junto a la plaza de la Ciudad Vieja y a apenas tres minutos andando de su famoso reloj astronómico. Todas las habitaciones son amplias y cuentan con aire acondicionado y conexión gratuita a internet. La recepción está abierta las 24 horas.
Grand Hotel Praha
Al optar por este alojamiento de cuatro estrellas te asegurarás de disfrutar de la mejor experiencia posible en tu visita a Praga, ya que está ubicado en la misma plaza de la Ciudad Vieja, en frente del reloj astronómico, y muy cerca de otras visitas obligadas como el puente de Carlos, el castillo de Praga y la plaza de Wenceslao. En solo tres palabras, comodidad, lujo y conveniencia.
El puente de Carlos y San Juan Nepomuceno
El icónico Puente de Carlos, que conecta la Ciudad Vieja con Malá Strana, es escenario de múltiples leyendas. Una de las más conocidas es la de San Juan Nepomuceno, un sacerdote que fue arrojado al río Moldava desde el puente por negarse a revelar los secretos de confesión de la reina Sofía. Se dice que, al caer al agua, aparecieron cinco estrellas sobre el lugar, y por ello, su estatua en el puente está adornada con una aureola de estrellas. Tocar la placa bajo su estatua y pedir un deseo es una tradición que siguen muchos visitantes. Nada pierdes con probar...
La Casa de Fausto en la plaza de Carlos
Situada en la plaza de Carlos, la enigmática Casa de Fausto es un edificio barroco de fachada rosada y gris que se halla envuelto en historias de alquimia y pactos demoníacos, debido a que varios de sus residentes se dedicaron a esta disciplina. Según cuenta la leyenda, durante el reinado del emperador Rodolfo II, el alquimista inglés Edward Kelley llevó a cabo oscuros experimentos en esta casa, tras los cuales desapareció misteriosamente, dejando un agujero en el techo por donde el diablo se lo habría llevado. Aunque la casa ha sido renovada varias veces, su fachada aún evoca un aire de misterio que atrae a curiosos y amantes de lo oculto. Si tú también lo eres, otra opción es visitar el Museo de Alquimistas y Magos de la Praga Vieja.
Prague Inn
El Hotel Prague Inn es una opción ideal que combina confort, modernidad y conveniencia a precios realmente competitivos. Está situado en un edificio histórico que data de 1458 en la famosa plaza de Wenceslao, a 400 metros de la plaza de la Ciudad Vieja y junto a la estación de metro Mustek. Y si te va la cerveza tipo Pilsner, podrás disfrutarla sin necesidad de irte lejos, en el restaurante Svejk (en el mismo edificio). Quienes se han hospedado allí lo puntúan con un 8 sobre 10 (y una ubicación de 9,7).
Central Hotel Prague
El Central Hotel Prague se encuentra cerca de la plaza de la República (Náměstí Republiky) y de los centros comerciales Kotva y Palladium. A escasos 400 metros del centro histórico, este alojamiento de tres estrellas ofrece habitaciones modernas, cómodas y bien equipadas.
La calle Liliová y el jinete sin cabeza
Paseando por la estrecha calle Liliová es posible que sientas un escalofrío al recordar la leyenda del jinete sin cabeza. Se dice que un caballero templario, condenado por sus pecados, aparece en esta calle montando su caballo negro y buscando redención. La única forma de liberarlo de su tormento eterno sería atravesando su corazón con una espada. Aunque pocos aseguran haberlo visto, la atmósfera de la calle, especialmente al anochecer, invita a imaginar su espectral presencia.
El Clementinum y el espíritu del bibliotecario
El Clementinum, un vasto complejo barroco que alberga la Biblioteca Nacional, es también escenario de historias sobrenaturales. Se dice que el espíritu de un antiguo bibliotecario recorre los pasillos por las noches, cuidando celosamente los antiguos manuscritos. Ojo, algunos visitantes afirman haber sentido una presencia inexplicable o haber escuchado susurros entre las estanterías, atribuyéndolos a este guardián espectral.
Las 27 cruces
En la plaza de la Ciudad Vieja, frente al antiguo Ayuntamiento, se observan 27 cruces blancas incrustadas en el pavimento. Estas cruces conmemoran la ejecución de 27 nobles checos el 21 de junio de 1621, tras su derrota frente a las tropas del emperador Fernando II de Habsburgo en la Batalla de la Montaña Blanca, durante la Guerra de los Treinta Años. Según la leyenda, los espíritus de estos nobles regresan cada año y deambulan esa noche por la plaza, recordando su trágico destino.
Otras leyendas
Además de las ya mencionadas, la capital checa ha dado lugar a muchas otras leyendas a lo largo de su historia. Mitos como el del violinista desaparecido de la torre Daliborka, en el Callejón del Oro. En el siglo XVIII, este edificio fue usado como prisión, y su primer reo, el caballero Dalibor, aprovechó su reclusión para aprender a tocar el violín. Un día, sin embargo, la música cesó abruptamente y el prisionero desapareció sin dejar rastro.
La Universidad Carolina, creada por Carlos IV en 1348, era además famosa por tener un esqueleto de portero: sí, como suena, porque a su entrada tenían expuesto un esqueleto equipado con un bastón, como si estuviera vigilando el acceso.
Little King U Malvaze
El hotel Little King U Malvaze (cuatro estrellas) ocupa un edificio histórico del siglo XIV situado junto al puente de Carlos, en el centro de Praga. Su restaurante sigue la tradición de una antigua brasserie y propone platos de cocina checa e internacional, además de una amplia selección de cervezas. Su ubicación céntrica, como el resto de alojamientos sugeridos en esta selección, es uno de los aspectos mejor valorados por sus huéspedes.
Ambassador Zlata Husa
El hotel Ambassador Zlata Husa está ubicado en la céntrica zona peatonal de la plaza de Wenceslao, rodeado de tiendas y a solo 50 metros de la estación de metro Mustek. Además de su excepcional situación y de la calidad propia de su categoría (tiene cinco estrellas a muy buen precio), el hotel alberga el Thai & Wellness Club, especializado en baños relajantes, tratamientos de belleza con envolturas, masajes indios ayurvédicos y masajes tailandeses.