Pruebo los mejores toalleros eléctricos para el baño por menos de 120 euros

Pocas cosas resultan tan placenteras en los días fríos de invierno como envolverse en una toalla caliente en el momento de salir de la ducha. La misma sensación de bienestar también se experimenta al secarse las manos o el rostro con una toalla templada. Para lograrlo, basta con contar con un toallero eléctrico como los que se presentan en esta comparativa. Estos dispositivos no solo mantienen las toallas secas, sino que muchos también actúan como pequeños radiadores capaces de aportar un agradable calor al baño.

Cómo hemos elegido y probado los productos

En casa tengo calefacción de suelo radiante y aunque en los baños también se nota cuando la tengo encendida, lo cierto es que en invierno siempre salgo de la ducha con algo de frío. Por esta razón decidí probar los toalleros eléctricos para el baño y comprobar de qué forma secan las toallas mojadas y si ‘caldean’ esta estancia en pocos minutos. Así, las principales características que buscaría en un toallero de este tipo serían las siguientes:

• Diseño: desde el punto de vista de su calidad de fabricación.
• Instalación: lo habitual es que los toalleros eléctricos se monten en la pared. ¿Cómo es este proceso de instalación?
• Calor: ¿las toallas realmente se calientan?
• Experiencia de uso: si el toallero cumple con lo que promete e incorpora otras funcionalidades extra como, por ejemplo, un temporizador o un regulador de temperatura.

500 W: Create Warm Towell

Para quién es: para los que buscan un toallero bonito y eficaz.

Por qué lo recomendamos: este modelo tiene uno de los diseños más bonitos y decorativos para el baño ya que está disponible en varios colores: azul pastel, blanco, negro, moca… Con unas dimensiones de 96,9 x 55 x 5 centímetros y una potencia de 500 W, está preparado para baños de entre 8 y 12 metros cuadrados e incorpora un cable de 1,25 metros de longitud. Lo primero que llama la atención es que en la parte inferior derecha incorpora una pequeña pantalla LCD que muestra la temperatura con solo un par de botones: uno para encenderlo o apagarlo y otro que funciona como temporizador de hasta 8 horas. Para instalarlo se puede hacer de dos formas: en la pared o añadir unas pequeñas patas (que hay que adquirir por separado) para colocarlo en el suelo. Yo lo instalé en la pared, cerca de una ventana como recomiendan y no tardé demasiado en hacerlo.

Una vez instalado se puede utilizar de dos formas: en modo de calentamiento continuo con el que el toallero funciona ininterrumpidamente hasta que lo apagas; o en modo de calentamiento de toallas que exige pulsar primero el botón de encendido y luego el control que indica 2 horas: transcurrido este tiempo, se apagará automáticamente. En el momento de las pruebas lo utilicé para ambas cosas: para secar las toallas mojadas y para calentar el baño durante el momento de la ducha. Yo tengo dos baños en casa, pero este modelo lo coloqué en el que es más pequeño. En ambas situaciones, me pareció un toallero que hace su función de forma muy correcta, ya que calentó el baño en muy pocos minutos (en menos de 10 minutos la sensación de calor era más que evidente) y luego el secado de las toallas lo realiza en menos de dos horas. Dispone de 10 barras para toallas (aunque lo más recomendable es colocar un máximo de 3 toallas, una en cada sector del toallero), protección contra el sobrecalentamiento, y aluminio y plástico ABS como materiales de fabricación.

Sus puntos débiles: nada reseñable.

14 barras: Manissa Greened

Para quién es: para los que buscan un toallero con muchas barras.

Por qué lo recomendamos: de acero inoxidable, el montaje de este toallero es sencillo, ya que viene con todas las herramientas y accesorios necesarios. Para las pruebas, lo monté en el otro baño que tengo en casa, un poco más grande, para comprobar si calentaba bien, sobre todo tras la ducha. Es importante situarlo cerca de un enchufe porque el cable tiene solo un metro de longitud. En el momento de utilizarlo por primera vez me pareció muy fácil porque solo cuenta con dos botones: uno para el encendido y apagado y el otro para el temporizador, que llega hasta las 4 horas.

Durante las pruebas, me pareció que, aunque calentaba bien (solo cuenta con 80 W de potencia), necesita un poco de tiempo para que el baño ‘entre en calor’. No obstante, una vez que está caliente, mantiene la temperatura muy bien. Para las toallas me pareció muy práctico porque incluye 14 barras, lo que permite colocar entre 3 y 4 sin problemas, y se secan en relativamente poco tiempo (algo más de dos horas) dependiendo de lo mojadas que se encuentren.

Sus puntos débiles: aunque calienta bien, debería contar con algo más de potencia si el baño es grande.

Detección de ventanas abiertas: HJM

Para quién es: para los que buscan un toallero con muchos modos.

Por qué lo recomendamos: con una potencia de 500 W, este toallero cuenta con una pequeña pantalla y una botonera con varias funciones. En este caso, ofrece distintos modos: confort, económico, antihielo y turbo. Con ellos, se puede programar el tipo de calor según la circunstancia. Una vez instalado en la pared, fui probando cada modo a diferentes horas y días.

Así, el económico me pareció útil para tenerlo encendido durante más tiempo sin gastar demasiado y sin notar un exceso de calor (sobre todo para calentar la estancia antes de la ducha). Por su parte, el confort es el que pareció más adecuado para el día a día porque ofrece un calor muy agradable y de forma constante. El turbo, por su parte, me resultó muy práctico para secar las toallas mojadas en tiempo récord y calentar el baño con más rapidez si era necesario. Otra cuestión que me gustó es que el toallero detecta si hay un cambio brusco de la temperatura, por ejemplo, con una ventana abierta, y se apaga automáticamente. Eso sí, me costó cogerle el truquillo a la programación ya que no es del todo intuitiva. Y si lo utilizas de noche, la pantalla no está iluminada así que cuesta un poco verlo bien.

Sus puntos débiles: la programación es un poco complicada de hacer al principio y la pantalla no está iluminada.

Con patas: ProfiCare

Para quién es: para los que buscan un toallero compacto y ligero.

Por qué lo recomendamos: este modelo ofrece la posibilidad de instalarlo en la pared o dejarlo en el suelo. En esta ocasión, lo coloqué en el suelo ya que las patas que vienen incluidas eran bastante estables. Es un toallero más pequeño que los modelos anteriores por lo que no ocupa mucho espacio y se puede situar en cualquier parte del baño. En mi caso, lo instalé cerca de un enchufe, pero no ‘molestaba’ para el día a día. Con 8 barras calefactoras, solo cuenta con un botón de encendido y apagado. En el momento de las pruebas, me pareció que calentaba la estancia de forma correcta pero sin notar un exceso de calor. En algunos días en los que fuera de casa hacía más frío, sí eché en falta que calentara un poco más el baño. En cuanto a las toallas, lo más recomendable es poner un máximo de dos toallas para que se sequen bien. En este caso, se secan bien, pero necesitan algo más de tiempo que los anteriores modelos.

Sus puntos débiles: si lo quieres para calentar muchas toallas a la vez, se queda un poco corto.

IPX4: EVVO

Para quién es: para los que buscan un toallero para el secado rápido de las toallas.

Por qué lo recomendamos: el diseño de este toallero de acero me pareció muy elegante y bonito. Quedó muy bien en mi cuarto de baño que es de color blanco. Incluye un kit de instalación en pared que aunque facilita el montaje, es el que más me costó de montar, sobre todo a la hora de colocarlo en los ganchos. También es el que más pesa de toda la comparativa (5 kg), algo que se nota en el momento de la instalación. Tiene 450 W de potencia y una pequeña consola con una pantalla y dos botones para subir y bajar la temperatura. Es muy sencillo de utilizar.

Posee 12 barras para toallas y en el momento de las pruebas me pareció que calentaba la estancia con rapidez, aunque el trabajo principal lo hace en el secado de toallas ya que si se colocan toallas pequeñas están secas en cuestión de minutos. También dispone de protección por sobrecalentamiento: se apaga de forma automática si la temperatura es excesivamente alta en la estancia.

Sus puntos débiles: el montaje cuesta un poco más que el resto.

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Preguntas frecuentes sobre los toalleros eléctricos para baño

¿Cómo funciona un toallero eléctrico?

Funciona conectándose a la corriente eléctrica. Algunos modelos tienen fluido térmico interno (aceite o gel) que se calienta, mientras que otros son de cable seco, en los que las resistencias calientan directamente el metal.

¿Consumen mucha electricidad?

No. El consumo es bajo, similar al de una bombilla. En promedio, entre 50 y 150 watts por hora, dependiendo del tamaño y la potencia del modelo.

¿Es seguro usarlo en un baño?

Sí, siempre que tenga grado de protección IP adecuado (mínimo IP44) contra la humedad y se instale a una distancia reglamentaria de la ducha o bañera.

¿Qué mantenimiento necesita?

Muy poco. Solo se recomienda limpiarlo con un paño húmedo, evitar productos abrasivos y revisar el cableado o el enchufe de vez en cuando.

*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 18 de noviembre de 2025.

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