Las mejores barbacoas eléctricas portátiles para llevar a cualquier lugar

Tradicionalmente, la imagen asociada a las barbacoas es la de una máquina de tamaño medio o grande que se utiliza en espacios abiertos y que para funcionar necesita carbón o leña. Sin embargo, no es la única opción disponible. Existe una versión que por su tamaño compacto y peso ligero recibe el nombre de barbacoa portátil. Su diseño es desmontable, funciona conectada a la corriente eléctrica y los alimentos se preparan a través de una tecnología de calentamiento mediante infrarrojos.

Además, este tipo de propuestas se caracteriza porque puede utilizarse no solo en espacios exteriores sino interiores porque no desprenden humo. Esto es posible gracias a que la bandeja recoge grasas tiene que llenarse con agua, por lo que siempre deberemos procurar que no falte.

¿Qué barbacoas eléctricas portátiles hemos elegido?

La siguiente selección está formada por los modelos Aigostar Lava 31LDQ (7,25), Ariete Party Grill (8,25), Tristar BQ-2813 (7) y Jata BQ101 (8). Los criterios valorados en sus respectivos análisis son:

- Materiales: cómo es la calidad de construcción de la barbacoa portátil. Predomina el plástico y el acero inoxidable, este último para la bandeja donde se colocan los alimentos, la bandeja recoge grasas y la resistencia.

- Potencia: si la potencia ofrecida es suficiente para asar los alimentos de manera adecuada.

- Limpieza: el diseño de todas las piezas es desmontable, lo que facilita a priori las labores de limpieza. ¿Es fácil limpiar y retirar la suciedad acumulada de la barbacoa tras utilizarla?

- Experiencia de uso: hay que partir de la premisa de que no se puede comparar cómo cocina una barbacoa de este tipo con las de leña o carbón. A partir de aquí, hemos comparado cómo se preparan los alimentos, si el punto en el que quedan es el adecuado, texturas… ¿Se sobrecocinan? También se ha tenido en cuenta el grado de adherencia.

Comparativa barbacoas portátiles eléctricas: así las hemos probado

A lo largo de varias semanas, hemos utilizado cada una de estas cuatro barbacoas portátiles eléctricas para comprobar cómo funcionan, si calientan o no rápido, cómo se distribuye el calor por toda su superficie o se asan los alimentos. Para ello, hemos elegido distintas verduras (pimiento, champiñón, espárragos verdes, calabacín…) y carne, ternera y pollo, así como chorizo.

Con una valoración media de 8,25 puntos, la barbacoa eléctrica Ariete Party Grill ha conseguido la puntuación más alta. Ofrece una amplia superficie para la preparación de los alimentos, se cocinan muy bien y con un sabor y una textura que te sorprenden gratamente.

Barbacoa eléctrica Ariete Party Grill

Incorpora una superficie de cocinado generosa gracias a sus 410 x 240 milímetros. En este sentido, y aunque su diseño es grande, no impide que la podamos llevar cómodamente en nuestros desplazamientos si fuese necesario. Además, su peso se siente liviano cuando la sostienes.

Con la ventaja añadida de regularse en dos posiciones (la más baja está indicada para los alimentos que exigen una cocción lenta), hemos desarrollado la mayoría de las pruebas utilizando la posición más alta. ¿El resultado? Se desmarca de sus competidoras y logra la mejor puntuación en el apartado de experiencia de uso. Se desenvuelve igual de bien ya sea con verduras como con carnes. Así, es muy fácil cogerle ‘el punto’ porque enseguida te familiarizas con su termostato regulable.

Mientras, la adherencia tampoco representa ningún problema, porque la cantidad de comida que se pega es mínima; de hecho, en ocasiones no se pega nada. En cuanto a los materiales, emplea plástico en la base y en la zona de donde ‘sale’ el cable con el interruptor de la corriente eléctrica. Tanto la bandeja antigrasa como la parrilla son de acero inoxidable. Esta calidad es correcta, pero si tenemos en cuenta el precio de la barbacoa esperábamos algo más.

Barbacoa eléctrica Jata BQ101

A pesar de que su tamaño es más contenido que otras de las propuestas que participan en esta comparativa, esto no le impide ofrecer la potencia más alta de todas: 2.400 vatios. A este respecto, la barbacoa eléctrica portátil de Jata ha demostrado durante nuestras pruebas que es un producto que cumple con lo que promete y que para reuniones de tres o cuatro comensales está bien. Por ejemplo, las hamburguesas de pollo quedan muy bien de sabor y con un punto crujiente y una textura agradable al paladar, y con el calabacín la experiencia es igual de positiva.

Eso sí, la temperatura no se puede regular por lo que es necesario estar pendiente en todo momento de los alimentos que preparamos si no queremos que se quemen. Asimismo, hay que estar muy pendiente de que la bandeja recoge grasas tenga siempre agua porque se evapora muy rápido: mientras cocinas, hay que rellenarla varias veces. Como en el caso de la Tristar BQ-2813, admite dos alturas. Mientras que la baja se recomienda para la carne, la alta se aconseja para la verduras. Desmontar las piezas para su limpieza es muy sencillo y lavarla a mano también.

Barbacoa eléctrica Aigostar Lava 31LDQ

Este modelo de barbacoa eléctrica tiene unas dimensiones similares a las de la propuesta de Ariete. En concreto, posee un tamaño de 500 x 345 x 80 mm, por lo que la superficie donde se cocinan los alimentos resulta espaciosa. Como el resto de participantes, funciona a través de una tecnología de calentamiento por infrarrojos que se activa nada más enchufarla a la corriente eléctrica. Recuerda que antes necesitas llenar la bandeja recoge grasas (está fabricada en acero inoxidable) con agua: se agradece que incorpore un indicador con la cantidad máxima que podemos echar.

La temperatura se controla cómodamente a través del termostato manual que hay situado en la parte frontal. Aunque tarda unos minutos más en calentarse que otras, llama la atención lo bien que distribuye el calor generado. En cuanto a la adherencia, algunos tipos de carne (a nosotros nos pasó con el pollo) se pegan un poco. En cambio, con otros alimentos como el calabacín, el pimiento o los espárragos verdes la adherencia funciona muy bien. La comida se cocina bien y el sabor y la textura de los alimentos resulta agradable.Uno de los pocos ‘peros’ que podemos sacar es que la longitud del cable es un poco corta: 50 cm.

Barbacoa eléctrica Tristar BQ-2813

Toda la estructura descansa sobre cuatro puntos de apoyo que hacen que se eleve ligeramente, característica que le permite ofrecer una buena fijación a la superficie donde se apoya cuando se utiliza. En lo referente a los materiales de fabricación, además del acero inoxidable, destaca el plástico; ambas elecciones están presentes también en el resto de barbacoas eléctricas, aunque en este caso la calidad del plástico de la propuesta de Tristar es mejorable en ciertos detalles.

Aprovecha bien sus 2.000 vatios de potencia y tarda poco tiempo en calentarse. No obstante, la distribución del calor es mejorable si comparamos esta prestación con el resto de modelos. Que la temperatura se controle manualmente según nuestras necesidades es una ventaja.

La barbacoa cumple con su cometido y en cuanto a la adherencia poco hay que objetar porque los alimentos apenas se pegan. Aunque tanto la parrilla como la bandeja recoge grasas se pueden meter en el lavavajillas, hemos preferido lavarlas a mano. Se limpian bien, según lo que habíamos previsto tras repetir este proceso con el resto, aunque la bandeja recoge grasas nos costó un poco más de lo esperado.

*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 19 de junio de 2021.