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Viaje inmersivo a la naturaleza salvaje

Los Bioparc de Fuengirola, Valencia y el Acuario de Gijón, ofrecen a los visitantes actividades complementarias con experiencias inéditas en plena naturaleza. Dormir entre tiburones, observar la alimentación de gorilas o conocer las crías de dragón de Komodo son algunas propuestas del “ocio con causa” para concienciar sobre la biodiversidad

Nunca estuvo tan cerca descubrir el corazón de la selva para contemplar especies salvajes en peligro de extinción y entender la importancia de su conservación. Los tres Bioparc, situados en Valencia, Fuengirola y Gijón, ofrecen experiencias inmersivas durante todo el año.

Todas las mañanas abren las puertas los tres parques de zooinmersión referentes en España: a las 10, Bioparc Valencia y Bioparc Fuengirola (Málaga), y a las 10.30, Bioparc Acuario de Gijón (Asturias). Así dan comienzo a un nuevo día de aventuras, naturaleza en estado salvaje y concienciación medioambiental.

Gori, la cría de hipopótamo de Bioparc Valencia, que acaba de cumplir tres años, espera el enriquecimiento ambiental que le habrá preparado ese día el equipo técnico. ¿Le habrán dejado gelatinas de zumo de frutas en el gran acuario que recrea la famosa cueva africana de Kitum? Este escenario es la única visión subacuática en España de hipopótamos nadando, jugando o caminando de puntillas bajo el agua, donde interaccionan con coloridos peces bajo la atenta mirada de los visitantes.

Mientras tanto, en Bioparc de Fuengirola, Juanito, Fénix, Embum, Drakarys y Saya, las cinco crías de dragones de Komodo que han sido cuidados hasta ahora en interior por el departamento de Herpetología, se preparan para las ocasiones especiales en las que saldrán a conocer el mundo exterior, por primera vez este verano. A la misma hora, en Bioparc Acuario de Gijón, un grupo de niños de ocho a 14 años se despiden de los tiburones con los que han dormido, junto al Gran Oceanario, en una actividad nocturna insólita para conocer los misterios submarinos.

Durante todo el año, pero especialmente en verano, coincidiendo con las vacaciones, los tres Bioparc desarrollan actividades complementarias para los viajeros que tengan como destino las ciudades de Valencia, Fuengirola o Gijón. Nunca estuvo tan cerca el corazón de la selva o la sabana, donde contemplar, sin barreras visuales, el día a día de especies salvajes en peligro de extinción y entender la importancia de la biodiversidad y su conservación. La propuesta de “ocio con causa” de los Bioparc es una iniciativa innovadora y reconocida internacionalmente, que tiene como objetivo acercar la belleza de la naturaleza y sus ecosistemas, sin salir de nuestras fronteras, para concienciar a través de la emoción y el amor por el planeta. Cada día y a distintas horas, la programación varía en cada uno de los Bioparc, por lo que la mejor forma de organizar la visita es consultar sus respectivas agendas el día anterior, para saber cuáles son los horarios de las exhibiciones, proyecciones o actividades guiadas.

Lecciones de comportamiento animal en Valencia

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Del 24 de junio al 3 de septiembre, todas las mañanas se podrá observar el majestuoso caminar de las protagonistas más altas de Bioparc Valencia, en la actividad Buenos días, jirafas, y escuchar las vocalizaciones de los lémures, mientras los visitantes se adentran en el bosque de ribera y la selva que recrea la isla de Madagascar. A lo largo del día, según la programación, se puede asistir a los Encuentros con el equipo de cuidado animal.

¿Para qué sirve, por ejemplo, esconder en cajas de cartón o en altura, las frutas y verduras en el espacio de los primates? La clave está en el enriquecimiento ambiental, que fomenta en los animales comportamientos de forrajeo, de búsqueda y juego para conseguir sus alimentos favoritos. Será distinto, según las peculiaridades y características que explicarán especialistas, en el caso de alimentar a leones, rapaces o elefantes, en esta última especie con la oportunidad de contemplar a Makena, la cría que acaba de cumplir 7 meses.

Para profundizar en estas propuestas de divulgación, entre la ciencia y el ocio, se puede posteriormente asistir a las visitas guiadas Explora, el anfiteatro donde se exponen los Misterios del mundo animal y la exhibición educativa El ciclo de la vida entre aves y mamíferos, que permite presenciar en primera persona los rituales de caza, defensa o búsqueda de alimentos, como harían en su hábitat natural.

Bioparc Valencia ofrece, además, zonas de descanso y recreo para los más pequeños, oferta gastronómica —como el restaurante Samburu, con extraordinarias vistas panorámicas a la sabana— y sesiones de cine para relajarse con la emisión de documentales sobre el trabajo de Bioparc en conservación in situ y ex situ (dentro y fuera de su entorno natural) de las especies en peligro de extinción.

Danzas africanas y dragones de Komodo en Fuengirola

Una de las actividades estrella que sorprenderá a niños y mayores en Bioparc Fuengirola (Málaga) es el formidable espectáculo de danza del grupo senegalés Sicobana, compuesto por percusionistas, coreógrafos y bailarines. Quienes serán los responsables de trasladar el amor por su cultura y tradiciones a los visitantes a través de la danza, con actuaciones todos los días de la semana.

Por su parte, el personal técnico de Exhibición y Educación del parque se encargará de explicar las amenazas más graves que enfrentan las especies de los animales protegidos en Bioparc y el porqué de la necesidad de conservar sus hábitats. Los visitantes también podrán asistir, en el Claro de la selva, a la actividad de aves y mamíferos, que permite observar en directo la búsqueda de alimento o de refugio y la interacción en el ciclo de la vida.

Si el viajero desea asistir a un auténtico espectáculo de danza africana debe visitar Bioparc de Fuengirola. Allí, el grupo senegalés Sicobana, compuesto por percusionistas, coreógrafos y bailarines, mostrará el amor por su cultura con una vibrante actuación.

Otro de los grandes atractivos de Bioparc Fuengirola es su departamento de Herpetología, puntero en la difícil tarea de reproducción de dragones de Komodo, especie de la que solo quedan 1.500 ejemplares en el planeta. Por eso se considera un hito de la conservación el nacimiento de cinco crías de estos grandes varanos en marzo de 2023, después de la cópula exitosa entre los dragones Reo y Ora, ocho meses de incubación artificial de los huevos y finalmente, su eclosión y supervivencia.

De hecho, este parque es el único centro que ha logrado reproducir dragones de Komodo en España en los últimos 10 años, y el quinto en conseguirlo en Europa. Este verano, el equipo de Herpetología podrá presentar a las crías y explicar con detalle a las personas interesadas cómo ha sido el proceso de reproducción y cuáles son las peculiaridades de su especie, que puede alcanzar los dos metros y medio de largo y 70 kilos de peso.

Y si el calor del verano aprieta y los visitantes prefieren acudir a última hora de la tarde, las selvas tropicales recreadas en Bioparc Fuengirola se transforman en un escenario distinto con un sofisticado juego de luces que permite, sin molestar a los animales, desvelar el comportamiento nocturno del tapir malayo, el hipopótamo pigmeo o el tigre de Sumatra. La experiencia inmersiva se puede completar con la oferta gastronómica nocturna de su restaurante, ambientado en la India colonial británica, con vistas sobre la inmensidad de la selva.

Misterios submarinos y realidad virtual en Gijón

Bioparc Acuario de Gijón tiene como objetivo concienciar al público visitante sobre los riesgos que amenazan a los ecosistemas marinos y las labores de conservación. Con la idea de que solo se protege aquello que se ama, el equipo técnico y de especialistas vuelcan su conocimiento para que niños y mayores entiendan los misterios bajo el agua y la importancia de protegerlos.

Los lunes, miércoles y viernes —a primera hora y con reserva previa— se ofrece un pase especial e insólito, el Acuario oculto, que incluye la visita tradicional, y además enseña las bambalinas de Bioparc: todo aquello que no se ve y es fundamental para su funcionamiento. Los visitantes conocerán la zona donde el personal de cuidado animal se encarga de su bienestar, la cocina donde se prepara su alimentación y el trabajo de acuaristas, que explican las labores de mantenimiento de los tanques y control del agua, en lo que podría ser una actividad perfecta para despertar vocaciones científicas.

Otro momento estelar se da, abierto al público, todos los lunes y viernes a las 13 horas, cuando los buzos se preparan para la inmersión en el acuario principal, donde les esperan las rayas y tiburones para recibir su comida. Durante esta actividad, una de las educadoras del Acuario explica cada movimiento e interacción, para comprender la complejidad de la conservación de los grandes animales marinos.

Para terminar el día por todo lo alto, Bioparc Acuario de Gijón ofrece también una experiencia culinaria en el restaurante Kraken ArtFood. Por las noches, sus 'Cenas bajo el mar' están dirigidas a contemplar la majestuosidad del Gran Oceanario, mientras se disfruta de la velada. Jose Maria Irastorza Perez

La zooinmersión sube de nivel en Bioparc Acuario de Gijón, en la experiencia La Última frontera, donde los visitantes podrán observar, con gafas de realidad virtual, los misterios de las fosas abisales y las profundidades marinas. Durante 12 minutos, la experiencia inmersiva que da una visión de 180 grados, escrita por el director de la Fundación Bioparc, Fernando González Sitges, permite al público sumergirse entre extraordinarias criaturas marinas, como medusas fantasma gigantes o peces víbora, y asistir al enfrentamiento entre un cachalote y un calamar gigante.

Para terminar el día de ocio con causa submarino, Bioparc Acuario de Gijón ofrece también una cuidada oferta de restauración, en la Cafetería Kraken Beach Bar o el restaurante Kraken ArtFood. Por las noches, las Cenas bajo el mar están dirigidas a contemplar la majestuosidad del Gran Oceanario y su vida marina, mientras se disfruta de la velada.

Por último, los menores de 8 a 14 años, que son el futuro del planeta, tienen el privilegio de asistir —con reserva previa— a la actividad Durmiendo con tiburones, desde las 20 horas hasta las 10 de la mañana del día siguiente. Esta experiencia nocturna consiste en una visita guiada muy especial, que se completa con talleres educativos y una proyección, antes de dormir junto a los más de 5.000 animales del Gran Oceanario, donde podrán observar a través del cristal los tiburones toro, musola y gris que lo habitan.

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