Paris Hilton: “Soy una mujer de negocios, no una tonta”

La heredera del imperio hotelero asegura que le gustaría ser reconocida como una empresaria y no por el frívolo papel que interpretó en 'The Simple Life'

Paris Hilton, en Las Vegas.STEVE MARCUS (REUTERS /Cordon Press)

Paris Hilton es más que una niña mimada heredera de un imperio hotelero. A sus 35 años, la celebridad se ha convertido en toda una empresaria. Su negocio comenzó con perfumes, tanto para mujeres como para hombres, más tarde se abrió paso en la industria del diseño, primero con la creación de bolsos, luego vinieron las joyas y la ropa. También tiene ...

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Paris Hilton es más que una niña mimada heredera de un imperio hotelero. A sus 35 años, la celebridad se ha convertido en toda una empresaria. Su negocio comenzó con perfumes, tanto para mujeres como para hombres, más tarde se abrió paso en la industria del diseño, primero con la creación de bolsos, luego vinieron las joyas y la ropa. También tiene una faceta como dj y además, ostenta su propia línea de hoteles de lujo, que obviamente llevan su nombre, en lugares como Dubai, Nueva York y Las Vegas. Su fortuna ronda los dos mil millones de dólares. Es por todo esto que a ella le molesta que la gente la siga recordando como “la tonta” que aparecía en la televisión.

“Soy una mujer de negocios que trabaja muy duro y así me gustaría ser reconocida”, dijo en una entrevista con Access Hollywood. Hilton sabe que esta imagen frívola de ella se debe en gran medida a The Simple Life, el show que protagonizó hace algunos años junto a Nicole Richie. Según reveló, los productores fueron muy claros. “Nicole será la chica mala y Paris la cabeza hueca’. No teníamos ni idea de que el programa tendría tanto éxito y que tendríamos que seguir interpretando esos papeles por cinco años”, explica Hilton.

La también actriz se considera una gran “emprendedora”, aunque no niega que tener el respaldo de su familia le ha ayudado en gran medida, y que es una mujer inteligente y ágil con los negocios por eso quisiera ser reconocida por su trabajo y logros. “Después de hacer ese papel parece que te quedas atrapada en él y que lo tienes que seguir fingiendo”, se sincera.

Aunque ahora de alguna manera le pesa tener esa imagen de “rubia tonta”, admite que en algún momento le benefició. “Si hubiera sido más seria en el show, quizá me hubiera sido más difícil alcanzar el éxito”, asegura.

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