Cartas al director

Verso suelto en las Olimpiadas

El militar kuwaití Fehaid Aldeehani, que participa en los Juegos de Río bajo la bandera del Comité Olímpico Internacional por sanción de su país, ha logrado notoriedad al ganar la medalla de oro en doble trap de tiro. Sin pretenderlo, porque no es su caso, ha visibilizado la posibilidad de estar en unos Juegos bajo el paraguas de la entidad organizadora, sin participar de la épica del honor patriótico asociado al deporte. Desgraciadamente, los apátridas y los deportistas independientes son fruto de la precariedad y la necesidad y no de una conciencia de superación de la lógica de los ...

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El militar kuwaití Fehaid Aldeehani, que participa en los Juegos de Río bajo la bandera del Comité Olímpico Internacional por sanción de su país, ha logrado notoriedad al ganar la medalla de oro en doble trap de tiro. Sin pretenderlo, porque no es su caso, ha visibilizado la posibilidad de estar en unos Juegos bajo el paraguas de la entidad organizadora, sin participar de la épica del honor patriótico asociado al deporte. Desgraciadamente, los apátridas y los deportistas independientes son fruto de la precariedad y la necesidad y no de una conciencia de superación de la lógica de los Estados. Todavía se ve lejos la consecución de estructuras organizativas que protejan efectivamente a personas y naturaleza, y que trasciendan respetuosamente territorios y culturas. A veces, sin embargo, se gana la partida con un ocho, un nueve o con una carta que aparentemente no ligaba. Queda esperanza.— Santiago Aragón Guarné. Elche (Alicante).

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