‘Le Tour’

Francia, grandiosa y entrañable Francia, ha sabido dotarse de dos vínculos de unión política y vertebración social incuestionables: el idioma francés y la soberanía republicana. Además, es buena. Se da. Está presta para la abnegación y el sacrificio con mucha más frecuencia que los otros pueblos. La Unión Europea, la de los ciudadanos, la que ha conseguido superar las dos grandes guerras mundiales, es idea e impulso de la misma Francia que rehusó participar en la guerra preventiva contra Irak (2003), pero que, sin embargo, acude presurosa a Malí, a Libia, a Siria y, finalmente, también a Irak ...

Francia, grandiosa y entrañable Francia, ha sabido dotarse de dos vínculos de unión política y vertebración social incuestionables: el idioma francés y la soberanía republicana. Además, es buena. Se da. Está presta para la abnegación y el sacrificio con mucha más frecuencia que los otros pueblos. La Unión Europea, la de los ciudadanos, la que ha conseguido superar las dos grandes guerras mundiales, es idea e impulso de la misma Francia que rehusó participar en la guerra preventiva contra Irak (2003), pero que, sin embargo, acude presurosa a Malí, a Libia, a Siria y, finalmente, también a Irak (2014) para imponer Gobiernos afines y dóciles. “Los pueblos, como los astros, tienen derecho al eclipse. Y todo está bien, con tal de que vuelva la luz y el eclipse no degenere en noche” (Victor Hugo). Lo del Tour y su épica es un apunte multicolor, una competición deportiva donde se intenta desenmascarar a los jugadores de ventaja, ¡ojalá que lo consigan!— Luis Fernando Crespo Zorita. Alcalá de Henares (Madrid).