De Margarita Seisdedos a Maite Galdeano: las madres de los 'realities'

Venga, ya está aquí el Día de la madre. Ya pueden subir todas estas fotografías de sus progenitoras a las redes sociales como si ellas tuviesen su propio perfil de Instagram para verlo -lo de mezclar felicitaciones cariñosas con selfies medio desnudo todavía no he terminado de comprenderlo-. Apelar al sentimiento es la mejor forma de ganar cierta popularidad y unos cuando likes. Ocurre con las muertes de los personajes populares -ay, Prince, ay, Chus- y también con estas invenciones en forma de festejo que nos llevan a correr a los centros comerciales en busc...

Venga, ya está aquí el Día de la madre. Ya pueden subir todas estas fotografías de sus progenitoras a las redes sociales como si ellas tuviesen su propio perfil de Instagram para verlo -lo de mezclar felicitaciones cariñosas con selfies medio desnudo todavía no he terminado de comprenderlo-. Apelar al sentimiento es la mejor forma de ganar cierta popularidad y unos cuando likes. Ocurre con las muertes de los personajes populares -ay, Prince, ay, Chus- y también con estas invenciones en forma de festejo que nos llevan a correr a los centros comerciales en busca de regalos de última hora. Cada año igual. No aprendemos nada.

Si con esas, todavía tienen ganas de celebrar el Día de la madre como manda la tradición -reciente, pero tradición-, tengan en cuenta que hay muchas formas diferentes de hacerlo. Desde comprando una plantita en el primer bazar que encuentren hasta cantando el Todo se me fue contigo, madre en la versión de Rosa Benito. Nosotros hemos decidido hacerlo recordando a las diez mejores madres que han pasado por los platós de los realities. Las más guerreras, las más icónicas y también las más pesadas. Disfruten de la jornada como se merecen y aprovechen el tiempo, que ya se lamentarán cuando se les pase la resaca de la comida familiar. Ah, ¡y un beso para ti madre!

10. Mª Ángeles Delgado. Cuando España todavía no se había recuperado de descubrir a Aída Nízar -y mira que había pasado tiempo-, Mediaset decidió regalarlos a su madre. Mª Ángeles Delgado fue la explicación que todos necesitábamos. De tal palo, tal astilla. Tanta fue su presencia mientras su hija concursaba en Supervivientes que se ganó un puesto en  Acorralados  y una silla de gancho en Mujeres y hombres y viceversa. En Telecinco la llaman 'madre', así sin más, como Cher o Madonna.

9. Bárbara Rey. ¿Se imaginan llegar a este mundo y que tu madre sea Bárbara Rey? No puede haber nada mejor. Vedette, estrella del circo, murciana de pro, actriz del destape y animal televisivo. Bárbara lo tiene todo. Lleva años dejándose la piel defendiendo a su hija Sofía Cristo y, ya de paso, sacándole también un poquito de provecho. Acabó concursando en Acorralados con la que por entonces era su nuera, Nagore Robles.

8. María, aka 'madre de Fortu'. Puede que la tengan un poco desubicada, ya que su paso por televisión ha sido más que breve, pero seguro que recuerdan a aquella señora que cantó 'va a estallar el obús' como si fuese la mismísima Nina Hagen. La madre del cantante Fortu vivió el concurso de su hijo con mucha intensidad. Tanta que acabó asistiendo desde el plató al  edredoning que se marcó su hijo con su novia en plena isla. ¿Era necesario? No.

7. Franciska. La madre de Rebeca, la de Duro de pelar, es la única persona capaz de quedarse dormida en medio del escándalo de un plató de televisión. Todavía lloramos con su sobresaltado despertar. Franciska, además de madre amantísima, también fue cantante y es pariente de Benicio del Toro -algo que su hija se encarga de recordarnos de vez en cuando-. Ojalá esto fuese Estados Unidos y alguien les ofreciese ya un reality a madre e hija.

6. Mari Carmen. La mejor madre que ha pasado por  ¿Quién quiere casarse con mi hijo? es ahora una estrella de los realities. Creadora de frases ya míticas como "el glamú se mama, se mama y se sale de la barriga de tu madre", abandonó su Peal de Becerro para triunfar en la televisión. Ahora concursa en  Supervivientes  y está dispuesta a ganar. O a volver locos a todos los participantes. Una de dos.

5. Makoke. La última edición de GH VIP tuvo su propia protagonista fuera de la casa. Makoke, la MILF de España -con permiso de Mariló Montero-, acudió poco a defender a su hijo, tal vez atemorizada por las críticas que despierta en cada una de sus apariciones, pero lo resolvió concediendo trescientas entrevistas. La más Kardashian de todas y también la menos querida. ¿Por qué será?

4. Encarni Manfredi. Hubo un tiempo, ya lejano, en que la madre televisiva de España era Encarni Manfredi. Saltó a la fama como progenitora y defensora de Patricia, aquella concursante de  Gran Hermano que ha pasado a la posteridad por haber sido novia de Kiko Hernández. Pero su gracejo y sus ganas de cámara la auparon como estrella con entidad propia. Terminó en Hotel Glam, ahí es nada.

3. Maite Galdeano. "Che, che, documentasión, la papela del camión". ¿Qué madre canta esto? Pues la misma que se pone a recrear las posturas sexuales de su último encuentro delante de su hija como si hubiese salido de Los sexoadictos. Maite Galdeano es la madre más tróspida que ha generado Gran Hermano. La elegida de Dios, la apasionada de los senegaleses, la pesadilla de todos los presentadores. Simplemente, Maite.

2. Isabel Pantoja. “Los cañones hacia mi persona”. La llegada de Isabel Pantoja a Telecinco fue el hito del momento. La tonadillera abandonaba su torre de marfil y se unía al populacho gracias a la participación de su hijo Kiko en Supevivientes. Tanto gustó que terminó dando las Campanadas. El orgasmo televisivo que sentimos cuando entró en plató tan solo es comparable a la decepción que nos produjo su falta de interés por Chabelita. Maribel, cariño, a las duras y a las maduras.

1. Margarita Seisdedos. Las lágrimas de Yurena acordándose de su madre y mandándole un mensaje desde Supervivientes  nos han reblandecido nuestro duro corazón. Para toda una generación, Margarita Seisdedos es un referente. Siempre pegada a su hija, defendiéndola bolso en mano -con ladrillo dentro- y dispuesta a hacer lo que fuese con tal de verla cumpliendo su sueño. ¡Qué grande! ¡Qué mítica!