Cartas al director

Gestos

Veo gestos de nobleza en los nuevos alcaldes —esos a los que algunos califican de populistas o radicales— cuando ofrecen el bastón de mando a los ciudadanos para indicarles que comparten con ellos la responsabilidad de gobernar; cuando se asignan sueldos similares a los que tenían en sus profesiones; cuando renuncian a los coches oficiales y en su lugar utilizan la bicicleta o el metro; cuando comparten el despacho con otros compañeros; cuando los principales asuntos en sus agendas son saciar el hambre de los niños y asegurar un techo a las familias. Sí, ya sé que puede parecer muy poquita cos...

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Veo gestos de nobleza en los nuevos alcaldes —esos a los que algunos califican de populistas o radicales— cuando ofrecen el bastón de mando a los ciudadanos para indicarles que comparten con ellos la responsabilidad de gobernar; cuando se asignan sueldos similares a los que tenían en sus profesiones; cuando renuncian a los coches oficiales y en su lugar utilizan la bicicleta o el metro; cuando comparten el despacho con otros compañeros; cuando los principales asuntos en sus agendas son saciar el hambre de los niños y asegurar un techo a las familias. Sí, ya sé que puede parecer muy poquita cosa pero, después de tanta indecencia, estos gestos son una bendición. Y una esperanza.— Pedro Serrano.

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