A 40 días de 40 años

En el próximo mes de julio se cumplirán 40 años desde que empecé a trabajar. Lo hice casi en pantalón corto, pasando de ocupar mi asiento en el colegio a descubrir el mundo laboral en una organización a través de la cual conocí el mundo real, y su propio mundo interno. En ella he desarrollado toda mi vida, aunque todo ha ido cambiando hasta el punto de que su propio NIF actual no es el de entonces, tampoco la empresa en sí es la misma; de hecho aquella empresa que era la más deseada por los españoles para trabajar, junto a El Corte Inglés, pasó a ser la causa de la crisis de este país, orillan...

En el próximo mes de julio se cumplirán 40 años desde que empecé a trabajar. Lo hice casi en pantalón corto, pasando de ocupar mi asiento en el colegio a descubrir el mundo laboral en una organización a través de la cual conocí el mundo real, y su propio mundo interno. En ella he desarrollado toda mi vida, aunque todo ha ido cambiando hasta el punto de que su propio NIF actual no es el de entonces, tampoco la empresa en sí es la misma; de hecho aquella empresa que era la más deseada por los españoles para trabajar, junto a El Corte Inglés, pasó a ser la causa de la crisis de este país, orillando mi orgullo de pertenencia a un viejo estante en mis recuerdos. A pesar de ello, me considero un privilegiado, primero por haber trabajado ininterrumpidamente desde entonces, después por haber disfrutado de lo que he hecho en cada uno de los minutos de esos días, de haber sido feliz en mí trabajo, de haberme realizado personalmente, y todo ello, siempre, con una visión de largo plazo, construyendo relaciones profesionales con afán de permanencia y de estabilidad. Algunas heridas quedan, ellas forman parte congénita de la vida y ahora mi reto, tras estos 40 años, es reinventarme y seguir en el mundo laboral porque el futuro, ni el mío, ni el de nadie, está garantizado.— Mario Martín Lucas.