¿Valls es de izquierda?
El socialista Manuel Valls reniega del socialismo clásico. Hace de Blair y no de Mitterrand, de Schröder y no de Mélenchon. Pero, ¿qué es una política de izquierda en las circunstancias presentes? En aras de la igualdad, podríamos decidir que el esfuerzo recaiga solo en las clases superiores y en las empresas. La verdadera izquierda habría dado su imprimátur. La dificultad es que esta vía ya fue emprendida desde la elección de François Hollande. (...)
La otra solución consiste en aplazar los sacrificios, aceptando que los déficits perduren y que la deuda aumente. (...) Desde hace años, ...
El socialista Manuel Valls reniega del socialismo clásico. Hace de Blair y no de Mitterrand, de Schröder y no de Mélenchon. Pero, ¿qué es una política de izquierda en las circunstancias presentes? En aras de la igualdad, podríamos decidir que el esfuerzo recaiga solo en las clases superiores y en las empresas. La verdadera izquierda habría dado su imprimátur. La dificultad es que esta vía ya fue emprendida desde la elección de François Hollande. (...)
La otra solución consiste en aplazar los sacrificios, aceptando que los déficits perduren y que la deuda aumente. (...) Desde hace años, Francia acepta un déficit de más del 4% del PIB; su deuda pública ha pasado del 60% a más del 90%. No obstante, su crecimiento permanece átono y el paro no deja de aumentar (...) Una variante consistiría en abandonar el euro y devaluar la moneda para ganar cuota de exportación. Pero además de que daría un golpe terrible al proyecto europeo, esta decisión dramática no dispensaría de ningún modo a Francia de reequilibrar sus cuentas. (...)
Los países que tienen hoy los mejores resultados sociales, medidos en términos de paro y poder adquisitivo, son aquellos que procedieron más temprano a reformas similares a las que proyecta Manuel Valls: los países escandinavos, Alemania o Canadá. Con fórmulas de derecha (a ojos de los franceses) llegan a resultados de izquierda (...) Se puede comprender a los diputados socialistas. Manuel Valls no les pide solidaridad, sino heroísmo. Entonces, protestan. A menos que consientan en levantar los ojos más allá de su distrito para echar una ojeada al vasto mundo...
L. Joffrin. París, 1 de mayo