Dos puntualizaciones
Sobre su editorial del pasado domingo, el plan de construcción en la zona E1 no “rompería la continuidad geográfica en Cisjordania”, ya que deja 15 kilómetros de margen en su punto más estrecho, curiosamente la misma distancia que quedaría para Israel entre Cisjordania y el Mediterráneo si se retirara a las líneas del armisticio del 67. En segundo lugar, por mucho que su diario no considere que Jerusalén es la capital de Israel, Tel Aviv no “pacta” tregua alguna, ni decide nada, ya que jamás ha sido sede del Gobie...
Sobre su editorial del pasado domingo, el plan de construcción en la zona E1 no “rompería la continuidad geográfica en Cisjordania”, ya que deja 15 kilómetros de margen en su punto más estrecho, curiosamente la misma distancia que quedaría para Israel entre Cisjordania y el Mediterráneo si se retirara a las líneas del armisticio del 67. En segundo lugar, por mucho que su diario no considere que Jerusalén es la capital de Israel, Tel Aviv no “pacta” tregua alguna, ni decide nada, ya que jamás ha sido sede del Gobierno.— Masha Gabriel. Directora de ReVista de Medio Oriente.Boston, EE UU.