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(Dedicado a Arabic, Nieves, Laura A. y Cristina Santorio, que me recomendaron venir aquí)
La República Checa es mucho más que Praga. Desde luego.
Y si hubiera que elegir un lugar para empezar este recorrido por esa otra Chequia fuera de la capital sería Karlovy Vary, la ciudad de Bohemia desde la que hoy escribo. Karlovy Vary es como una ciudad de cuento de hadas encajada en un estrecho y alargado valle por el que discurre el río Tepla (caliente, en checo). ...
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(Dedicado a Arabic, Nieves, Laura A. y Cristina Santorio, que me recomendaron venir aquí)
La República Checa es mucho más que Praga. Desde luego.
Y si hubiera que elegir un lugar para empezar este recorrido por esa otra Chequia fuera de la capital sería Karlovy Vary, la ciudad de Bohemia desde la que hoy escribo. Karlovy Vary es como una ciudad de cuento de hadas encajada en un estrecho y alargado valle por el que discurre el río Tepla (caliente, en checo).
Todo el casco viejo de Karlovy Vary es un decorado historicista cuajado de edificios barrocos, art noveau y neoclásicos. Una unidad arquitectónica casi perfecta, rota solamente por dos o tres pastiches estalinistas de la época en que esto se llamaba Checoslovaquia y el comunismo era todavía una utopía para unos y un yugo soporífero para los que tenían que soportarlo.
Uno de esos atentados al buen gusto es el enorme hotel Thermal y otro, curiosamente, la galería acristalada en pleno centro urbano que cubre el chorro de agua termal que dio origen a la ciudad. Karlovy Vary significa en checo las termas de Carlos, en alusión al emperador del Sacro Imperio Romano-Germánico Carlos IV, que al pasar un día de 1370 por aquí en una de sus cacerías descubrió unas fuentes de aguas termales en un paraje bucólico (imagino que en aquella época todo debería ser bucólico y salvaje en Bohemia).
El caso es que las aguas curaron una dolencia de rodilla del magnánimo prócer y éste decidió construirse un castillo junto al geiser delque manaba –y sigue manando - agua a 74 grados centígrados.
Con el tiempo, Karlovy se convirtió en el balneario más chic de Centroeuropa, frecuentado por la jet y la nobleza desde hace al menos 200 años. El poeta alemán Goethe, por ejemplo, era asiduo de la pensión U Tri Moureninu (Los tres moros), en la que estuvo en nueve ocasiones.
Lo curioso es que Karlovy Vary no es desconocida para el turismo de masas. Pero sus habitantes se quejan de que lo que les llega en su mayoría son hordas de viajes organizados en autocar desde Praga (una hora y media de viaje) que pasan el día, compran unas chucherías de cristal de Bohemia y se largan por donde han venido. De los dos millones de visitantes del año pasado (sin contar los que venían en busca de tratamientos termales), solo 80.000 pernoctaron aquí.
Peor para ellos. Se perdieron el momento más divertido de Karlovy Vary, que llega a eso de las seis de la tarde, justo antes de la cena. En ese momento, los cientos (o miles) de clientes de los diversos hoteles y balnearios salen a dar un paseo por las bellísima Promenade a lo largo del río Tepla armados con unas jarrita de porcelana en forma de pipa, muy características de Karlovy Vary, para tomar las aguas de alguna de las 13 fuentes medicinales que manan en el casco urbano, cada una con temperatura y propiedades diferentes (al menos eso dicen los karlovaraci; a mi me parece que salen del mismo lugar, pero qué más da; la fe mueve montañas).
El caso es que la gente hacen largas colas en una determinada fuente mientras que la de al lado está vacía. Algunas fuentes están cubiertas por elegantes galerías porticadas, como la del Molino (132 metros de largo y 124 columnas); otras, por un quiosco de madera o por un templete neobarroco. Una vez llena la jarrita, cada uno sigue su paseo bebiendo sorbitos del agua termal (que sabe a rayos, por cierto, como todas las aguas ferruginosas), como quien come pipas por el paseo marítimo de una playa cualquiera.
Un teatrillo de lo más curioso y divertido en el que participa gente de todas las edades. Luego cada cual se va a su escondrijo a cenar y Karlovy Vary se sume en un silencio elegante y solemne, como si fuera el entreacto de una ópera de Rossini en el que tanto público como actores se han ido a la cantina y el decorado ha quedado allí, mudo y en claroscuros, majestuosos con sus fachadas de columnas, pórticos y frisos clásicos en espera del siguiente acto.
Pero ese acto no tendrá lugar hasta mañana, cuando toque la ración de agua termal de antes del desayuno. (Mañana sigo yo también, aunque creo más en las propiedades curativas de la cerveza checa que en las de las aguas termales, para qué os voy a engañar)
Comentarios
Una pena que un pais tan bonito sea hogar de gente racista, especialmente contra los gitanos, con esterizaciones a mujeres y la segregacion de los pequenos en las escuelas
03/21/2012 09:26:00 AM
Por cierto, te sigo con interes porque me pilla todo a una patada y por supuesto, alguna ideilla para fin de semana sacaremos de todo esto...
Un supersaludo
03/21/2012 09:34:13 AM
Sabes otra cosa que me impresiono de Praga es la profundidad del "metro",la ciudad es bellísima ,las Torres los museos,el Precioso teatro,tuve la ocasión de ver Aida y Cosí fan Tute,y en una pequeña Iglesia El Requien de Mozart,creo que es la vez que mas me ha emocionado una musica,y este me lo se casi de memoria........ah,que no se me olvide el Cementerio y un pequeño Museo de Mozart que lo disfrutes y nos sigas contando,cuando lo veremos sen la Tele ? un saludo desde Fuerteventura. nieves
03/21/2012 09:38:47 AM
Y la Becherovka, tocayo, no te olvides de la Becherovka para completar la acción curativa de las aguas ferruginosas. Aunque luego tal vez necesites una cerveza, o un par, para borrar el gusto amargo de la Bechehrovka¿Y has resuelto el enigma de si la pieza de caza tras la que iba Carlos IV y que le hizo descubrir el milagroso manantial era un rebeco o un ciervo? Yo no conseguí aclararlo del todo.
Praga conserba un bosque en plena ciudad Chequia es un paraíso. Lo que demuestra que pese a esos dos edificios stalinistas, el comunismo no fué tan destructivo como nos quiere hacer creer el capitalismo de por acá que es el verdadeero destructor de bosques valles y playas. sobre todo en España...para asombro de mi yerno, que es checo; Ha tenido que venir aquí para saber lo que es una dictadura, sobre todo políticamente , como fué la española. Se le quedaron los ojos "a cuadros" y así sigue aunque disfrutamos de democracia...no le parece lo bastante buena...¡Esperaba más!...
03/21/2012 10:19:54 AM
Creo que se "conserba" mejor con " v " ¡Dónde va a parar!
03/21/2012 10:22:01 AM
No he grabado el mensaje: Decía que, Chequia, pese a esos dos edificios stalinistas, conserva sus hermosas construciones y un gran parque en el centro de Praga,; lo que demuestra que el comunismo no fué tan bárbaro como el capitalismo de acá quiso hacernos creer; precisamente somos los que no respetamos montes valles ni playas en favor de la construcción de casas, casas casas. Mi yerno, que es checo, se enteró de lo que era una dictadura cuando vino a España y vió las consecuencias políticas y sociales de la nuestra; se quedó con los ojos "a cuadros" ...
03/21/2012 10:50:34 AM
Apuntado queda :D
03/21/2012 02:20:26 PM
Estoy contigo, mi niño, "creo más en las propiedades curativas de la cerveza checa (del mundo, diría yo) que en las de las aguas termales".
Chico, empezando con aguas termales, no me voy animando, claro que en mi jubilación, puede que no salga de ellas.
Un abrazo [déjate de tonterías, y a la cerveza].
03/21/2012 03:00:54 PM
Estoy contigo, mi niño, "creo más en las propiedades curativas de la cerveza checa (del mundo, diría yo) que en las de las aguas termales".
Chico, empezando con aguas termales, no me voy animando, claro que en mi jubilación, puede que no salga de ellas.
Un abrazo [déjate de tonterías, y a la cerveza].
03/21/2012 03:00:54 PM
Es una ciudad muy bonita y se llega muy fácil desde Praga. Saludos.
03/21/2012 03:39:03 PM
Muchas gracias por mostrarnos una Checa ,a los que solo la conociamos a traves de Milan Kundera y su insoportable levedad de ser.Felices dias en la Republica.
03/21/2012 04:45:26 PM
excelente artículo, para que recordemos que ver Europa es algo más que París, Berlín, Roma o Londres. Un inciso curioso; en Italia, durante los años 70, época en la que la lucha armada de grupos como las Brigadas Rojas no sólo copaba las primeras planas de la prensa nacional, sino que su eficacia "militar" ( el triste "caso Moro") daba pie a todo tipo de conjeturas conspiracionistas, se hablaba (y eso llegó incluso a mencionarse en juicio!) de las "conexiones" con los países del telón de acero y especialmente de un fantasmagórico "campo de entrenamiento" para terroristas de todo pelo justamente en... Karlovy Vary. La cosa hizo correr rios de tinta en la época, luego se demostró que las Brigadas Rojas eran "nacionales" y más "artesanas" de lo que indicaban esas teorías de instrumentalización por parte del bloque soviético. Me alegro de que ahora se pueda comprobar que Karlovy Vary -para los que se acuerden de aquello - no es más que una hermosísima ciudad, a juzgar por las fotos y el artículo.
03/21/2012 05:29:42 PM
Uy, qué ganas de ir! Me ha encantado este artículo!
03/21/2012 06:00:26 PM
Muchas gracias por el post, creo que resume muy bien el ambiente señoral y relajado de Karlovy Vary.
Sin embargo, hay un aspecto que a mí me llamó mucho la atención hace un par de semanas (cuando estuve por allí) y que ya me habían comentado amigos checos, que no se menciona en el artículo. Karlovy Vary se ha convertido en un centro vacacional de millonarios rusos, y es muy curioso recorrer la ciudad, llena de carteles en ruso, menus en ruso....y las mejores y exclusivas tiendas de marca con letreros en ruso! Incluso se oye hablar ruso por todos los sitios!
Por algún momento, tuve la sensación de estar en Rusia más que en Praga!
03/21/2012 06:05:53 PM
Yo también suscribo la última línea. Feliz viaje!!!
03/22/2012 06:04:19 AM
Uix que mono eso de beber en una "jarrita con forma de pipa" mientras das un paseo...Ana María
03/22/2012 04:24:52 PM
Bebí en esa fuente. Y después bebí cervaza.
03/22/2012 09:35:34 PM
¡Qué honrada me siento con la dedicatoria! Y, a la vez, avergonzada. Es verdad que cuando los sitios se ven así (cogiendo un autobús desde otro punto y pasando unas cuantas horas) no se termina de empatizar con el lugar. De hecho me perdí K. Vary de noche y me he quedado enganchada a la primera foto. Los sitios de noche destilan otro ambiente: más romántico y misterioso.¡Gracias por compartirlo!
03/24/2012 12:06:00 PM
Me has convencido y pernoctaré para ver la movida de los karlovaraci al caer la tarde. No te prometo que le de a las aguas ferruginosas aunque seguramente haré cola en alguna para ver lo que se cuece alrededor. Bien dices que la fe mueve montañas y mi fe está toa-toíta con el vino tinto y sin sifón.
Besos.
03/27/2012 12:02:04 PM
Paco, tarde, pero gracias por la dedicatoria. Un abrazo.
08/27/2012 02:33:35 PM
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04/06/2013 08:38:45 PM
Hoy mismo salgo para alla, Paco. Fin de semana sin Supernenes, yuhuuuu. Me bebere un vasito de aguas termales a tu salud.Un supersaludo
07/26/2013 01:05:04 PM
Que interesante lugar para beber aguas termales y si sobre todo sin son curativas aun mas beneficioso, seria genial llegar algún día alli