La riqueza financiera neta de las familias repunta un 9,3% y alcanza un récord de 2,49 billones
El grueso de la subida se explica por la revalorización de los activos financieros; la tasa de deuda cae a mínimos de más de dos décadas
El patrimonio de las familias crece al calor del tirón bursátil y el mayor apetito inversor. La riqueza financiera neta de los hogares españoles, calculada como la diferencia entre sus ahorros y deudas, alcanzó los 2,49 billones de euros en el segundo trimestre de este año, la cifra más elevada desde que hay registros, equivalente a un incremento del 9,3% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Si se considera el patrimonio bruto, la cifra alcanzó los 3,28 millones (el 200,9% del PIB), un 7,8% superior al pasado ejercicio y resultado en su mayoría de la revalorización de los activos financieros, según los últimos datos que publica este miércoles el Banco de España en su estadística Cuentas financieras de la economía española.
El supervisor destaca que más de la mitad del aumento de la riqueza de las familias —de la que forman parte depósitos, acciones, fondos de inversión—, una subida de más 238.000 millones interanuales, se debe a la revalorización que han experimentado a lo largo del último ejercicio sus activos financieros. El incremento de valor de los instrumentos en manos de los hogares supuso, en concreto, un incremento patrimonial de 155.000 millones. El resto de la subida se explica por las nuevas adquisiciones netas, que alcanzaron los 80.200 millones en el acumulado desde finales del segundo trimestre de 2024.
Los mercados financieros están en ebullición y el Ibex 35, el principal selectivo español, se mueve en máximos históricos. En lo que va de año se ha revalorizado en más de un 30% y coquetea con los 16.000 puntos, un nivel al que no llegaba desde 2007. Buena parte de este rally bursátil se explica por el sector bancario, que se ha saneado después de la Gran Recesión y ha experimentado una fuerte revalorización a raíz de recientes subidas en los tipos de interés y las mayores remuneraciones al accionista.
En general, hay una exuberancia empresarial generalizada, sobre todo entre las grandes empresas que cotizan en el Ibex 35, cuyos beneficios han escalado más de un 7% en el primer semestre pese al panorama internacional complejo por las tensiones geopolíticas y la guerra comercial lanzada por los Estados Unidos de Donald Trump. Además, las magnitudes macro marchan viento en popa. La economía española crece el doble de la eurozona, el empleo está en máximos, los salarios reales recuperan poder adquisitivo y el turismo sigue siendo tirando de la actividad, todos elementos que han llevado en las últimas semanas a mejorar el rating de la deuda soberana de España.
Por instrumentos financieros, la revalorización de activos se ha concentrado en gran medida en las participaciones en el capital, señala el Banco de España; del lado de la adquisición neta de activos, la batuta la llevan los fondos de inversión y los depósitos. Estos últimos, junto al efectivo, son el vehículo que más peso tiene sobre el total de la riqueza de los hogares (34,4%, con una subida del 3,5% en el año), seguidas por las participaciones en capital, que registraron el mayor aumento interanual en lo que va de año, del 13%.
Menos deuda sobre el PIB
Aunque la deuda de las familias creció al cierre de junio con respecto a las cifras de hace un año, en un 2,6% hasta los 719.000 millones, su peso sobre el PIB se redujo en más de un punto, hasta el 44%, la menor ratio en más de dos décadas, desde el año 2000. También creció en cifras absolutas la deuda de las empresas, un 1,6%, hasta los 1,02 billones, pero se redujo en tasa de PIB a mínimos desde 2001, situándose en el 65,1%.
En volúmenes absolutos, la deuda consolidada de empresas y hogares alcanzó al cierre de junio los 1,7 billones de euros, un alza del 2% frente al segundo trimestre de 2024. En términos del PIB, sin embargo, la tasa mantiene una senda descendente, y se situó en el 106,5% frente al 110,5% del mismo periodo de 2024.