Dimite el secretario de Estado de Portugal que creó empresas inmobiliarias mientras impulsaba la ley para construir en suelo rústico

Hernâni Dias, que fundó dos sociedades para la compraventa de propiedades, es investigado por otros asuntos por la Fiscalía europea

Hernâni Dias, a la izquierda, cuando era alcalde de Bragança, junto al presidente de la Diputación de Zamora, Javier Faúndez, en 2023.Mariam A. Montesinos (EFE)

El Gobierno de Portugal perdió a última hora del martes a uno de los impulsores de la reforma legal que permitirá construir en suelos rústicos. Hernâni Dias, secretario de Estado de Administración Local y Ordenación del Territorio, dimitió pocos días después de que ...

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El Gobierno de Portugal perdió a última hora del martes a uno de los impulsores de la reforma legal que permitirá construir en suelos rústicos. Hernâni Dias, secretario de Estado de Administración Local y Ordenación del Territorio, dimitió pocos días después de que la cadena pública RTP desvelase que había constituido dos empresas inmobiliarias cuando ya pertenecía al Gobierno, en manos de una coalición entre el centro derecha y los conservadores que encabeza Luís Montenegro.

En la empresa MCRH, creada el pasado octubre en Bragança con mil euros de capital social, Dias cuenta con el 35% de las acciones, al igual que su esposa y gerente. El restante 30% se reparte equitativamente entre sus dos hijos. El objeto social es la promoción inmobiliaria y, entre otros fines, se cita “la construcción, compra, venta y alquileres de propiedades rústicas y urbanas”. Dos semanas después se constituyó Prumo, Esquadria e Perspectiva, cuya titularidad se reparte entre la sociedad anterior (MCRH) y una menor de edad. La mujer de Hernâni Dias es una de las gerentes de esta firma, creada con 2.000 euros de capital y también con un objeto social centrado en el sector inmobiliario y la construcción civil.

A finales de diciembre el Gobierno aprobó un decreto-ley que modificaba el Régimen Jurídico de Instrumentos de Gestión Territorial, vigente desde 2015, para autorizar la reclasificación de terrenos rústicos para construir viviendas. La medida, impulsada desde el Ministerio de Cohesión Territorial al que pertenecía Dias, se justificó como una herramienta para combatir la carencia de viviendas a precios accesibles en el país. El ejecutivo recurrió a un procedimiento para aprobar el cambio sin debates previos, pero fue forzado a llevar el diploma al Parlamento a posteriori, donde se han introducido algunas correcciones para limitar tanto los suelos que pueden cambiar de naturaleza como los precios de las futuras casas, que han sido pactadas con el Partido Socialista, principal fuerza de la oposición.

Mientras se negociaba en la Asamblea de la República, la figura de Hernâni Dias ya estaba en entredicho aunque todavía se desconocía que había constituido dos empresas que podrían beneficiarse de la reforma legal. Una investigación periodística, también de la televisión RTP, desveló que la Fiscalía europea estaba indagando a Dias cuando fue alcalde de Bragança, en el norte de Portugal. La justicia investigaba si el político había recibido contrapartidas mientras era regidor de una constructora que supuestamente emitió y cobró facturas por trabajos no realizados en la ampliación del parque industrial en Bragança. Curiosamente, el hijo del alcalde residió durante varios años en un apartamento en Oporto que pertenecía a familiares de los socios de la constructora. Hernâni Dias aseguró en un comunicado que habían pagado un alquiler por ello y que los trabajos extras abonados a la empresa estaban justificados con documentos.

El asunto que le ha dado la puntilla llegó el 24 de enero, cuando salió a la luz que el secretario de Estado había constituido dos empresas junto a su esposa e hijos después de haber entrado en el Gobierno cuyos objetos sociales incluían, entre otros, la actividad inmobiliaria. La oposición solicitó de inmediato la dimisión de Hernâni Dias por entender que había un conflicto de intereses entre su misión pública y su actividad privada, además de exigir su comparecencia en el Parlamento.

El Gobierno, por su parte, respaldó inicialmente a su alto cargo, pese a que en el pasado, mientras ejercían la oposición, convirtieron la denuncia de las irregularidades de los miembros del ejecutivo del socialista António Costa en una de sus principales líneas de ataque. Hernâni decidió dimitir a última hora del martes. En su carta, enviada a la agencia Lusa, el ex secretario de Estado afirma que tiene la conciencia “absolutamente tranquila” y alude a las informaciones publicadas como “una ola de noticias que contienen falsedades, tergiversaciones e insinuaciones injustificadas”.

El primer ministro Luís Montenegro, que aceptó de inmediato la dimisión, alabó “el desprendimiento personal” de Dias y su gestión para materializar el programa de Gobierno “en áreas de especial importancia”. El dimitido justifica su renuncia también como una medida destinada a proteger “la estabilidad” del Gobierno y del primer ministro. El código de conducta aprobado por el equipo de Montenegro cuando tomó posesión pretendía combatir, entre otros desvíos, el conflicto de intereses, existente “cuando los miembros del Gboierno, o de sus gabinetes, se encuentren en una situación en virtud de la cual se pueda dudar seriamente de la imparcialidad de su conducta o decisión”.

Es la primera dimisión del Gobierno conservador que tomó posesión la pasada primavera después de ganar las elecciones por un estrecho margen.

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