Fernández Gallar renuncia como consejero delegado de OHLA durante la junta de accionistas que lo iba a reelegir

Las tareas ejecutivas de la constructora serán asumidas por los accionistas principales, los hermanos Luis y Mauricio Amodio

José Antonio Fernández Gallar, a la derecha, habla con Luis Amodio, presidente de OHLA, durante la junta de accionistas celebrada este viernes.

El consejero delegado de OHLA, José Antonio Fernández Gallar, ha dejado su cargo este viernes durante la junta de accionistas alegando “motivos personales” tras cinco años al frente del grupo. Su labor la asumirán, por el momento, los hermanos Amodio, principales accionistas de la compañía: Luis compatibilizando esta función con la presidencia y Mauricio en la vicepresidencia ejecutiva.

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El consejero delegado de OHLA, José Antonio Fernández Gallar, ha dejado su cargo este viernes durante la junta de accionistas alegando “motivos personales” tras cinco años al frente del grupo. Su labor la asumirán, por el momento, los hermanos Amodio, principales accionistas de la compañía: Luis compatibilizando esta función con la presidencia y Mauricio en la vicepresidencia ejecutiva.

El anuncio ha llegado en el arranque de la junta, pese a que la reelección de Fernández Gallar era uno de los puntos del orden del día que la empresa iba a someter a votación de los accionistas. La decisión la habría tomado el ejecutivo a partir de la última reunión del consejo de administración celebrada a finales de mayo, en la que se propuso el orden del día de la junta. En este tiempo Fernández Gallar, que ha cumplido 65 años, habría decidido finalmente dejar la empresa y no ser reelegido. “Ha dado un paso al lado, pero los objetivos de la compañía se mantienen”, aseguran fuentes de OHLA. La búsqueda de su sustituto se ha puesto en marcha y la empresa asegura que acelerará el proceso al máximo. No se conocen, sin embargo, los términos de la renuncia: si se activa la cláusula de no competencia el directivo debería recibir una compensación. “Es una decisión del consejo”, resumen en OHLA, y añaden que, en su caso, toda la información se conocerá cuando se presente el informe de remuneraciones de este ejercicio ante la CNMV.

La reestructuración también implica que Tomás Ruiz asumirá la dirección general, posición desde la que cubrirá la gestión del día a día de la compañía. Igualmente, se ha nombrado a Francisco García consejero coordinador y vicepresidente segundo. La empresa ha precisado que la renuncia de Fernández Gallar será efectiva a partir de este viernes, al mismo tiempo que señala que tanto Luis como Mauricio Amodio “acumulan una muy relevante trayectoria en el sector de las infraestructuras que se traduce en casi cinco décadas de experiencia”.

Balance

Fernández Gallar asumió su cargo de consejero delegado en junio de 2018, procedente de Inmobiliaria Espacio, del Grupo Villar Mir. En estos cinco años, la empresa ha reducido en un 37% su deuda bruta, las ventas se han impulsado un 12%, el ebitda ha pasado del terreno negativo (-500 millones) al positivo (114 millones en 2022), la cartera se ha impulsado un 15% y la contratación de proyectos en un 60%. En su primer trimestre contable de este 2023, el resultado neto arroja unas pérdidas de 7,8 millones de euros, que mejoran los 12 millones en negativo del año anterior. El resultado de explotación creció un 40% y se situó en 20 millones.

OHLA defiende que la salida del consejero delegado no afectará al normal funcionamiento de la empresa, por lo que continuará su proceso de transformación, poniendo el foco en la mejora de los márgenes operativos, la rentabilidad y la reducción del endeudamiento. Respecto a este último punto, la compañía prosigue con la venta de su área de servicios (Ingesán), así como de uno de los proyectos deficitarios de la etapa anterior (un hospital en Canadá) y del Centro Canalejas de Madrid. Fuentes de OHLA aseguran que para su área de servicios han recibido varias ofertas y han seleccionado una de ellas. Antes de la definición del precio se llevará a cabo el proceso de auditoría (due diligence).

La deuda es el principal lastre del grupo. Ahora asciende a 423 millones, y sus accionistas esperan poder reducirla tras la venta de Ingesán. En su discurso ante los accionistas, Luis Amodio ha defendido que la empresa seguirá trabajando para alcanzar la estabilidad financiera, poniendo el foco en seleccionar los proyectos y las geografías que permitan maximizar los márgenes de cada contrato. El presidente ejecutivo ha aprovechado para agradecerle al consejero delegado saliente el trabajo realizado en estos últimos cinco años, periodo en el que considera que ha obtenido “destacados resultados sobre el negocio y el balance de la sociedad”, un agradecimiento que ha extendido a la familia Villar Mir, que ha salido recientemente del accionariado.

Por su parte, en su último discurso ante los accionistas, Fernández Gallar ha dado las gracias a Amodio por su apoyo, añadiendo que su deseo ahora es que se cumplan todos los nuevos objetivos para la compañía en el futuro. La junta ha aprobado todos los acuerdos propuestos, incluyendo la reelección de los consejeros independientes Carmen de Andrés Conde, César Cañedo-Argüelles Torrejón y Reyes Calderón, el nombramiento de Ximena Caraza Campos como nuevo miembro del consejo o la fijación del número de consejeros en diez.

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