El Tribunal de Cuentas concluye que la pandemia redujo la facturación de Aena a la mitad
La compañía gestora de aeropuertos pasó de ingresar 4.303 millones en 2019 a 2.243 un año más tarde, con un tráfico que descendió un 72,2% en Barajas y un 75,5% en Barcelona-El Prat, según el órgano auditor
El Tribunal de Cuentas ha dado a conocer este jueves un informe sobre el impacto económico que la pandemia de coronavirus tuvo sobre el tráfico aéreo, en el que destaca que los ingresos consolidados del Grupo Aena “tras una evolución positiva y alcanzar los 4.503 millones de euros en el año 2019, se redujeron a la mitad en 2020, hasta los 2.243 millones”. Pese a esta drástica reducción, AENA aplicó para hacer frente a la situación una serie de incentivos extraordinarios por...
El Tribunal de Cuentas ha dado a conocer este jueves un informe sobre el impacto económico que la pandemia de coronavirus tuvo sobre el tráfico aéreo, en el que destaca que los ingresos consolidados del Grupo Aena “tras una evolución positiva y alcanzar los 4.503 millones de euros en el año 2019, se redujeron a la mitad en 2020, hasta los 2.243 millones”. Pese a esta drástica reducción, AENA aplicó para hacer frente a la situación una serie de incentivos extraordinarios por importe de 20,3 millones de euros a través de bonificaciones en la tarifa de aterrizaje, al tiempo que concedió aplazamientos de cobro por 58,5 millones de euros y eximió del pago de las tasas de aterrizaje y tránsito aéreo a las aeronaves que transportasen material sanitario durante la duración del primer estado de alarma, por valor de 567.000 euros.
La crisis sanitaria provocó un fuerte descenso de la actividad de Aena respecto a 2019, tanto en el número de operaciones (53,4 %) como en el tráfico de pasajeros (72,4%); y, en menor medida, también en el de mercancías (26,3%). Aunque todos los aeropuertos de la red de Aena experimentaron caídas importantes en el número de viajeros, destacan Madrid-Barajas (72,2%), El Prat-Barcelona (75,8%), Palma de Mallorca (79,4%) y Málaga (74%). En cuanto al número de operaciones de tráfico, las mayores caídas afectaron a Madrid-Barajas (61,1%), El Prat-Barcelona (64,4%), Alicante-Elche (63,4%) y Palma de Mallorca (64,6%). Y, en el tráfico de mercancías, destacan los aeropuertos de Málaga (70%), Tenerife Sur (63%) y Lanzarote (59%).
En cuanto a los resultados de explotación por aeropuertos, los más afectados por la emergencia sanitaria fueron los de mayor tráfico de pasajeros, con una caída en sus resultados que se situó entre el 87% y el 124%. La pérdida de ingresos aeronáuticos y comerciales afectó al flujo de efectivo proveniente de las operaciones de explotación, que descendió un 92%.Y Aena estimó en 2.060 millones de euros la necesidad de efectivo para afrontar las obligaciones a lo largo del ejercicio 2020.
Por otra parte, para paliar la reducción de sus gastos operativos Aena elaboró e implantó un “plan de contención de gastos” cuyo principal objetivo fue mantener la actividad imprescindible para proteger su liquidez. La previsión inicial de ahorro de Aena mediante la aplicación de este plan fue de 205 millones de euros, superada por los 433 millones de ahorro que alcanzó a finales de diciembre de 2020.
Financiación
En relación con su financiación, Aena implantó un “plan de fortalecimiento de la liquidez”, de modo que la financiación ajena se convirtió en su principal fuente generadora de flujos de efectivo. Por estas causas, su endeudamiento a finales del ejercicio se situó en 7.504 millones de euros, con un aumento de 1.349 millones respecto de 2019.
En 2020 Aena afrontó gastos por importe de 62,5 millones de euros para hacer frente a la covid-19 (destinados a la recuperación operativa, a la prestación de servicio a Sanidad Exterior para el control sanitario de pasajeros y a garantizar la distancia social). El Real Decreto-ley 21/2020 implantó la obligación de realizar el control sanitario de pasajeros y estableció que Aena debía poner a disposición de Sanidad Exterior los recursos humanos, sanitarios y de apoyo necesarios para garantizar el control sanitario de la entrada de pasajeros de vuelos internacionales.
El informe fiscaliza de forma transversal objetivos como la sostenibilidad, la transparencia e igualdad. En el caso de la transparencia no se han detectado deficiencias. En el de la sostenibilidad se constata que Aena dispone de un plan de acción climática orientado a impulsar el consumo de combustible de aviación sostenible y la reducción de emisiones, y en el campo de la igualdad el informe detecta que Aena se encuentra lejos de acreditar una igualdad efectiva en todos los segmentos de su plantilla.
Entre las recomendaciones del Tribunal de Cuentas a Aena figura la integración en una única herramienta informática de toda la información con los datos relevantes de cada uno de los recintos aeroportuarios para mejorar la interactividad y que revise el procedimiento de gestión del canal de denuncias. Por otra parte, La crisis sanitaria no tuvo un impacto relevante en la plantilla de Aena ya que el personal vinculado a los servicios afectados por la disminución de la actividad no era personal propio de esta sociedad, sino que pertenecía a empresas externas.