Ford deja de fabricar en 2023 los modelos S-Max y Galaxy en Almussafes y el icónico Fiesta en Colonia
La multinacional acelera su estrategia hacia la electrificación de sus vehículos en Europa
Ford Europa pondrá punto final a la producción de los monovolúmenes S-Max y Galaxy en la factoría valenciana de Almussafes en abril de 2023, un año antes de lo previsto, dentro de su estrategia para la electrificación de todos sus vehículos. La dirección europea ha realizado el anuncio en una reunión interna en la sede central de la compañía en Colonia (Alemania), en la que también se h...
Ford Europa pondrá punto final a la producción de los monovolúmenes S-Max y Galaxy en la factoría valenciana de Almussafes en abril de 2023, un año antes de lo previsto, dentro de su estrategia para la electrificación de todos sus vehículos. La dirección europea ha realizado el anuncio en una reunión interna en la sede central de la compañía en Colonia (Alemania), en la que también se ha dado a conocer el fin de la producción del icónico modelo Fiesta en la planta germana a finales de junio del mismo año.
Ford Europa ha acelerado su estrategia hacia la electrificación de sus vehículos de pasajeros en 2030 y de toda la gama en 2035 y presentará siete nuevos modelos eléctricos para 2024, aunque ninguno de ellos se producirá en la planta española. Las previsiones de la compañía son vender más de 600.000 vehículos eléctricos para 2026 y, en un plazo de seis años, que la producción llegue a 1,2 millones de unidades.
La finalización de producción de los monovolúmenes S-Max y Galaxy en Almussafes es otro paso anunciado en el camino hacia la electrificación, después de la despedida del Mondeo en marzo de este año, que se fabricará en China. O el fin en fechas próximas del modelo Transit, que se fabrica en la factoría valenciana para los mercados norteamericano y europeo. De la cadena de Almussafes salen unos 80 monovolúmenes de una producción diaria de 1.400 cuando la factoría está a pleno rendimiento.
Valencia se quedará en unos meses con la producción del híbrido enchufable Kuga, que en la actualidad representa la mitad de la producción de la planta española. De Almussafes salen además los motores Ecoboost de 2,0 y 2,3 litros y en el último trimestre de este año se lanza el Duratec 2,5 litros, un motor híbrido que se montará en el Kuga.
Ford Europa apostó en junio pasado por su fábrica española para producir los futuros modelos eléctricos que quedan por asignar a Europa, pero Detroit todavía no ha concretado todavía cuáles serán. Almussafes prevé comenzar la fabricación de los nuevos eléctricos en 2026.
Con este proyecto bajo el brazo, la multinacional se presentó al PERTE del automóvil junto a un conglomerado de empresas, pero en agosto pasado renunció a las ayudas solicitadas tras haber revisado sus previsiones productivas en Europa. La actualización significaba “un retraso” en sus “planes de producción para España”, por lo que quedaba excluida del plan de fondos europeos, que exigía que los desembolsos se produjeran en 2025.
El Ministerio de Industria trabaja con la Comisión Europea en la relajación de plazos del PERTE, lo que permitiría a Ford subirse de nuevo al carro de las ayudas europeas. “Hay proyectos que necesitan unos periodos de maduración un poco más largos y vamos a intentar acomodar sus plazos y sus necesidades de inversión”, aseguró la ministra Reyes Maroto el pasado lunes, durante una visita a la factoría valenciana.
El director de Fabricación de Almussafes, Dionisio Campos, confirmó durante la visita que el próximo año comenzará la negociación para adaptar la plantilla a la transformación del negocio. Almussafes cuenta en la actualidad con 6.000 trabajadores, y ya ha anunciado la prórroga del ERTE vigente hasta el 31 de diciembre por la falta de semiconductores.