El ocaso de las sicav en cifras: más del 70% se liquidará para traspasar el dinero a fondos de inversión
Las principales fortunas de España optan por seguir operando con estos vehículos a pesar del endurecimiento fiscal que entró en vigor en enero
El pasado mes de enero entró en vigor un cambio legal que afectaba a la fiscalidad de las sicav, el vehículo de inversión favorito de las grandes fortunas españolas. En concreto, una modificación de la ley antifraude exige a estas sociedades acreditar que cuentan con 100 socios con una inversión mínima de al menos 2.500 euros cada uno para poder acogerse al gravamen del 1% en el Impuesto sobre Sociedades. La medida fue adoptada para acabar con la figura de los mariachis, inversores que f...
El pasado mes de enero entró en vigor un cambio legal que afectaba a la fiscalidad de las sicav, el vehículo de inversión favorito de las grandes fortunas españolas. En concreto, una modificación de la ley antifraude exige a estas sociedades acreditar que cuentan con 100 socios con una inversión mínima de al menos 2.500 euros cada uno para poder acogerse al gravamen del 1% en el Impuesto sobre Sociedades. La medida fue adoptada para acabar con la figura de los mariachis, inversores que figuraban en muchos de estos instrumentos únicamente para completar el número mínimo de accionistas exigido por la ley con el fin de tributar de forma ventajosa.
A pesar de este endurecimiento, el legislador, para evitar la fuga de dinero al exterior, ofrece una salida ventajosa a los propietarios de estos vehículos. En concreto, si optan por reinvertir en un fondo con formato Ucits (el estándar europeo) el patrimonio acumulado en la sicav no tendrán que tributar por las plusvalías que tengan acumuladas en ella. Eso sí, los gestores de estos vehículos tenían la obligación de comunicar a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) qué decisión tomaban. En este sentido, el supervisor bursátil acaba de publicar las primeras cifras sobre los acuerdos adoptadas por los grandes patrimonios españoles.
La gran conclusión es que, a pesar de que la gran mayoría ha decidido dejar de operar y pasarse a otro régimen, las mayores sociedades del mercado continuarán operando como una sicav. 467 entidades, que representan el 20,4% de las inscritas y el 43,6% del total de patrimonio, prevén continuar como sicav. Dentro de este grupo, 384 continuarán tributando al 1% con 11.925 millones de euros, y 83 se mantienen como sicav pero tributando al 25%, con 740 millones de patrimonio. También habrá 19 que se transformarán en sociedades de inversión libre (hedge funds). Entre las grandes sicav que continuarán tributando al 1% porque cumplen con la nueva normativa están Soixa, vehículo de la familia Hernández (principales accionistas de Ebro Foods), que cuenta con un tamaño de 376 millones de euros, Torrenova (el vehículo de inversión de la familia Marcha), que maneja un patrimonio de 954 millones o Allocation (familia Del Pino, dueños de Ferrovial) cuyo volumen de activos está valorado en 453 millones.
En cambio, 1.582 sicav se liquidan (para traspasar el capital a fondos de inversión) con un patrimonio de 12.864 millones de euros, mientras que 174 sicav se transformarán en Sociedad Limitada o Sociedad anónima, con un volumen de 2.896 millones. Una de las sicav más destacadas que ha aprobado su conversión en sociedad limitada es Soandrés, controlada por la mujer más rica de España, Sandra Ortega, hija del fundador de Inditex. Este vehículo cuenta con un patrimonio de 255 millones de euros. A 31 de marzo, todavía había 63 vehículos (el 3% de los inscritos) que aún no habían adoptado ninguna decisión. Entre los grandes patrimonios que todavía no han comunicado al supervisor qué estructura societaria elegirán se encuentra Alicia Koplowitz, cuya sicav, Morinvest, contaba con un volumen bajo gestión de 582 millones al cierre del pasado ejercicio.
“Es previsible que una parte importante del patrimonio de las sicav que han adoptado acuerdos de liquidación revertirá en aportaciones a instituciones de inversión colectiva, conforme a lo contemplado en el régimen transitorio previsto en la nueva normativa fiscal para estas entidades”, señala la CNMV en una nota. “Sobre las entidades que aún tienen pendiente la decisión, en la mayoría de los casos se debe a la expectativa de cambios fiscales en el País Vasco. La previsión que tienen las gestoras en relación con estas sicav es que la mayoría se liquiden o transforme”, añade el organismo que preside Rodrigo Buenaventura.