El Supremo anula las sanciones fiscales a las orquestas vinculadas al `rey de las verbenas´ en Galicia
También considera nulo el registro en la empresa de Ángel Martínez, por la que el mayor comisionista del sector del espectáculo se ha librado de elevadas condenas
Las empresas del espectáculo vinculadas al empresario Ángel Martínez, Lito, el ‘rey de las verbenas’ en Galicia, han ganado su propia batalla judicial después de que varias sentencias anulasen el registro de la Agencia Tributaria que desencadenó en 2013 la denuncia de uno de los mayores fraudes en el sector de las orquestas. Además de exonerar al empresario y mayor comisionista del sector de millonarias multas y elevadas condenas, ahora el Tribunal Supremo también ha cons...
Las empresas del espectáculo vinculadas al empresario Ángel Martínez, Lito, el ‘rey de las verbenas’ en Galicia, han ganado su propia batalla judicial después de que varias sentencias anulasen el registro de la Agencia Tributaria que desencadenó en 2013 la denuncia de uno de los mayores fraudes en el sector de las orquestas. Además de exonerar al empresario y mayor comisionista del sector de millonarias multas y elevadas condenas, ahora el Tribunal Supremo también ha considerado que la entrada y registro “vulneró derechos fundamentales” y ha anulado las liquidaciones y sanciones fiscales impuestas a estas empresas.
La sección segunda de la sala contencioso administrativo ha dictaminado que no es una “prueba válida” por lo que “inhabilitan el material” intervenido en el registro a la sociedad Representaciones Lito S.L., considerada por Hacienda como la “oficina” del sector. En tres sentencias consecutivas, el tribunal destaca que “queda justificada la corrección de la actuación inspectora y la regularización y sanción impuesta” por la información obtenida por los inspectores de la Agencia Tributaria.
El Supremo argumenta que la entrada y registro llevada a cabo en las oficinas de las empresas mercantiles relacionadas con Lito “no fue lícita en su ejecución por la AEAT, ni se respetaron las garantías constitucionales exigibles“, ya que, “estuvo plagada de múltiples y graves irregularidades que invalidaron aquel registro en toda su extensión”.
Así, el tribunal alega que “no pueden reputarse válidas las pruebas obtenidas en el registro a efectos penales ni a otros efectos, pues se trata de la misma e indisociable vulneración, basada en las mismas infracciones, excesos y omisiones, lo que afecta a todo lo encontrado durante el registro”. Sobre las infracciones, el Supremo sostiene en sus tres fallos que “la regularización y sanción seguida es nula” y que “la prueba de cargo en que se basó una y otra se obtuvo con flagrante infracción de los derechos fundamentales”.
El registro fue declarado nulo por sentencia firme de la Audiencia de Pontevedra por lo que Ángel Martínez fue recientemente condenado a dos años y tres meses de cárcel y multas de más de un millón de euros por no declarar 326.374 euros correspondientes al IVA de los años 2011 y 2012, cuando su compañía de orquestas, Representaciones Lito, tuvo unos ingresos de más de 2,5 millones.
Este fue el cuarto envite judicial para el empresario desde que Hacienda lo denunciara en 2013 al descubrir un enorme agujero contable que derivó en cuatro causas judiciales por las que Lito se enfrentaba a 47 años de prisión y multas que superaban los 40 millones de euros, situando a la compañía en el epicentro del caso.
Pero la batalla legal que emprendió el empresario, unido a su deteriorado estado físico, desinfló completamente las expectativas de la Agencia Tributaria. En marzo de 2019, el Tribunal Supremo anuló su primera condena de 12 años de prisión porque la empresa Representaciones Lito S.L., acusada en todos los procesos penales, no estaba debidamente representada, por lo que no se habían respetado los derechos de la empresa y ordenó repetir el juicio.