“Las empresas que no sean flexibles se van a quedar atrás”
El consejero delegado de Línea Directa, Miguel Ángel Merino, ve cambios “definitivos y profundos” por la pandemia
Miguel Ángel Merino (Madrid, 61 años), consejero delegado de Línea Directa Aseguradora, no oculta su entusiasmo por salir a cotizar a Bolsa. Lo hará el jueves 29 de abril y se convertirá en la tercera firma del ramo en el parqué, junto con Mapfre y Catalana Occidente. Línea Directa Aseguradora, la empresa número 13 del sector por volumen de primas, es filial al 100% de Bankinter y cotizará por el sistema listing, es decir, se entregará una acción ...
Miguel Ángel Merino (Madrid, 61 años), consejero delegado de Línea Directa Aseguradora, no oculta su entusiasmo por salir a cotizar a Bolsa. Lo hará el jueves 29 de abril y se convertirá en la tercera firma del ramo en el parqué, junto con Mapfre y Catalana Occidente. Línea Directa Aseguradora, la empresa número 13 del sector por volumen de primas, es filial al 100% de Bankinter y cotizará por el sistema listing, es decir, se entregará una acción de la aseguradora por cada una del banco.
Con 25 años de actividad, es un caso único en un sector cerrado y tradicional como el asegurador, que le recibió con desconfianza y convencido de su fracaso. Sin embargo, sus datos pronto provocaron que otros le imitaran, aunque con poco éxito. Hoy su principal competidor, en palabras del consejero delegado, es Mutua Madrileña, con el que comparte un sistema de venta sin mediadores, lo que explica en parte su alta rentabilidad.
Línea Directa salta al parqué con una rentabilidad sobre recursos propios (ROE) del 35%, “el más alto del sector en Europa”, dice este ejecutivo. La explicación está en un ratio de gastos y de siniestros “que mejora en casi 10 puntos a nuestra competencia, gracias a una selección de riesgos muy sofisticada usando el big data [análisis de macrodatos]. Esta situación nos permite ofrecer un precio hasta un 30% más competitivo que la media del mercado a 3,2 millones de clientes”. Su facturación es de casi 900 millones de euros; estos números los han obtenido de forma orgánica, sin recurrir a compras o fusiones.
Sin embargo, en el mercado existen dudas sobre las ventajas que tendrá salir a cotizar para Línea Directa. Bankinter retendrá el 17,4% de las acciones, aunque no tendrá ningún consejero para liberarse de las exigencias de capital que ahora sufre por imposición del Banco Central Europeo. De hecho, Línea Directa explica parte del éxito de Bankinter, que ha multiplicado por 3,5 su inversión inicial en Línea Directa y de la que ha recibido 1.207 millones en dividendos.
Para Cartival, la firma de Jaime Botín, representada por su hijo Alfonso Botín-Sanz de Sautuola y Naveda, la salida a Bolsa también será ventajosa porque revalorizará su paquete accionarial. Botín es vicepresidente ejecutivo de Bankinter y presidente de Línea Directa, en representación del 20% de sus acciones en el capital.
Pregunta. Casi el 40% de sus acciones estarán en manos de Bankinter y de la familia Botín, luego la firma seguirá bajo su control. ¿Para qué salir a Bolsa?
Respuesta. Nos va a dar más flexibilidad, fuerza e independencia estratégica, además de que reforzará la estructura de capital. Esperamos seguir manteniendo una vinculación con Bankinter, como siempre, pero es un espaldarazo para la firma entrar en el club de las aseguradoras cotizadas, que supone un plus de transparencia. Además, se demostrará que el banco y la aseguradora valen más por separado que juntas.
P. ¿En qué se puede traducir esa mayor fuerza?
R. Nos facilitará potencia para crecer y entrar en nuevos ramos. Estamos en coches y hogar y, desde hace tres años, en salud. Nos interesan negocios de gran crecimiento y que se pueden distribuir de forma masiva. El ramo de decesos y, de alguna manera, el de vida, aunque es más complejo por su componente financiero, encajan en esa definición. No descartamos nada, todo lo tenemos en estudio.
P. ¿También comprar una compañía?
R. Nos sentimos más cómodos con el crecimiento orgánico, pero nada está descartado.
P. La crisis y los fenómenos climáticos han hecho mella en las aseguradoras. ¿No le parece un momento delicado para presentarse en Bolsa?
R. En 2020 el volumen de primas en autos cayó un 2% y nosotros crecimos un 1%. Así ha sido en otros momentos de crisis. Por nuestra estrategia somos un valor anticíclico atractivo, con altas perspectivas de crecimiento y rentabilidad. Lo que quiere todo el mundo.
P. Algunos analistas creen que pueden recibir una OPA. Incluso apuntan que ese puede ser el objetivo de Cartival para vender su paquete más caro. ¿Qué opina?
R. Todo se puede comprar y vender, pero el que quiera quedarse con esta empresa ya puede ir preparando la billetera. Creo que valemos mucho más de los 1.434 millones en los que se nos ha valorado, por cierto, la franja más baja de los diferentes análisis.
P. ¿Saben lo que podrían hacer Bankinter y los Botín si llegara una oferta?
R. De palabra nos han dicho que su intención es mantener la participación.
P. Pero ¿solo de palabra?
R. Sí, aunque han demostrado históricamente que son unos accionistas muy fieles a esta compañía.
P. La crisis económica está acelerando cambios tecnológicos y sociales. ¿Cómo afrontan esta situación?
R. Los cambios son definitivos y muy profundos. Por eso creo que las aseguradoras que no sean flexibles, eficientes e innovadoras no van a tener futuro. Se quedarán atrás. Este sector es tradicional y, en parte, está anticuado. Creo que tendrá problemas para adaptarse a los cambios culturales y sociales. No es solo cuestión de precio, también hay que establecer un vínculo amigable con el cliente. Buscamos tener una relación distinta, no solo mantener contacto cuando hay un problema.
P. Algunos dicen que son baratos para captar clientes, pero luego suben los precios en la renovación...
R. Según ICEA, nuestra prima media en autos es un 13% más barata y en hogar un 24%. Si fuera así, muchos se irían y lo que dice el estudio de Gain Dynamic es que retenemos al 91,3% frente al 88% del mercado.