Trabajo fijará por ley que los repartidores pasen a ser asalariados
La patronal acepta el cambio legal ante el criterio del Tribunal Supremo, pero quedan puntos por negociar en la ley de ‘riders’
En la última reunión para regular el trabajo en las plataformas digitales, el Ministerio de Trabajo, los sindicatos y los empresarios coincidieron en, al menos, un punto en común: los repartidores —los llamados rider— son asalariados, apuntan varias fuentes presentes en la mesa. La CEOE lo hizo cuando en el documento que trasladó a la mesa habla de llevar a la legislación la sentencia del Tribunal Supremo, que hace meses falló que los repartidores son asalariados. No puede decirse que hay un acuerdo general, pues el Gobierno debe aunar en un texto definitivo las posiciones expresadas po...
En la última reunión para regular el trabajo en las plataformas digitales, el Ministerio de Trabajo, los sindicatos y los empresarios coincidieron en, al menos, un punto en común: los repartidores —los llamados rider— son asalariados, apuntan varias fuentes presentes en la mesa. La CEOE lo hizo cuando en el documento que trasladó a la mesa habla de llevar a la legislación la sentencia del Tribunal Supremo, que hace meses falló que los repartidores son asalariados. No puede decirse que hay un acuerdo general, pues el Gobierno debe aunar en un texto definitivo las posiciones expresadas por las partes.
La incógnita que se ha despejado este miércoles es la postura de CEOE, apuntan desde los sindicatos. Hasta ahora la patronal, y pese a que han pasado mas de tres meses de conversaciones, no había fijado una posición. Las diferentes posturas dentro de la organización y de las empresas afectadas (Glovo, Deliveroo, Just Eat, Ubereats) se lo ponían muy difícil a sus negociadores. Finalmente, este miércoles la patronal habría entregado un documento en que acepta que los repartidores son, en su mayoría, asalariados.
Este sería, en principio, la principal conclusión de la reunión de hoy y el punto sobre el que se puede edificar el resto del acuerdo. No obstante, todavía hay algún obstáculo para poder hablar de un pacto conjunto. La regulación que presentará Trabajo se circunscribirá a los llamados rider, que es el colectivo al que se refería la sentencia del Tribunal Supremo que fallaba en septiembre a partir de un caso de en Glovo que los repartidores son asalariados. Y esto es algo que no gusta a los sindicatos, que siempre han demandado que la norma fuera más ambiciosa.
No gusta, en cambio, a la patronal la intención de Trabajo, plasmada en una de sus últimas propuestas, de que los representantes de las plantillas tengan acceso a la información laboral de los algoritmos.
La reunión es la última que se iba a celebrar sobre este punto. El secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, ya había advertido la semana pasada que su intención era no demorar más las conversaciones y legislar si finalmente no hay acuerdo. “Aunque no es un escenario que me gustaría”, apuntó, “la iniciativa legislativa no puede depender de alcanzar o no un acuerdo”. Fuentes del diálogo social apuntan que estas palabras habrían tenido efecto para desbloquear un situación que ya se prolongaba desde octubre, cuando se abrieron estas conversaciones.
La negociación para regular el trabajo en las plataformas digitales ha estado sobre la mesa desde hace bastante tiempo. Empezó avanzado octubre, semanas después de que el Tribunal Supremo zanjara las sentencias de jueces en instancias inferiores no aclararan si estos trabajadores eran autónomos o asalariados, aunque esta última postura era la mayoritaria. El alto tribunal no dejó lugar a dudas: son asalariados. Su pronunciamento llegó después de que la Inspección de Trabajo levantara múltiples actas a Glovo, Deliveroo, Amazon y Ubereats regularizando la situación de casi 20.000 trabajadores que cotizaban como autónomos cuando tenían que hacerlo como asalariados.
Aunque figuró en los planes del Gobierno ya desde la moción de censura. Finalmente, como la mayoría de planes laborales, no vieron la luz y volvió a la agenda con el Pacto de Gobierno. La pandemia aplazó estos planes, también las fricciones entre los Ministerios de Trabajo y Economía. Las conversaciones comenzaron en la segunda mitad de octubre y, con el parón navideño, se han prolongado a un ritmo lento hasta ahora.
En esta lentitud, ha tenido mucho que ver la posición de CEOE que, según apuntan las otras partes en la mesa, no ha definido su posición ni ha hecho propuestas alternativas hasta este miércoles a las planteadas por Trabajo y los sindicatos. Esta indefinición estaría condicionada por la propia posición distinta de las empresas de reparto: mientras Deliveroo o Glovo apuestan por un modelo de trabajadores autónomos; otras como Just Eat, en cambio, apuesta por contratar y darles de alta en la Seguridad Social.
Para tratar de unificar posturas, estas empresas se reunieron este mismo martes con responsables de la patronal. “La voluntad de CEOE es llegar a un consenso”, señala Patrik Bergareche en conversación con EL PAÍS, director general de Just Eat, quien defiende con nitidez la posición de que los repartidores son asalariados. “Apostamos por el modelo laboral y permite garantizar el modelo. Hay otros que no lo ven de otra manera. Hay una sentencia del Supremo que lleva el tema al plano técnico. Unos jueces opinan que la relación es laboral”, añade Bergareche, quien apuntaba que él todavía no conocía la postura que los representantes de la patronal han llevado a la mesa de negociación.
Durante estos meses, las propuestas de Trabajo han ido cambiando bastante. En uno de los primeros borradores, a demanda de UGT, llegó a incluirse un registro de plataformas que finalmente fue eliminado porque este departamento no tiene competencia sobre un asunto así.