Antolin congela inversiones y dividendo a causa del coronavirus
El grupo reduce su beneficio neto un 99% por ajustes contables tras reducir sus ventas un 3,9%
Grupo Antolín ha paralizado su plan inversor para el segundo y tercer trimestres de este año y ha congelado el 16% de las inversiones en I+D en 2020 a causa de la crisis del coronavirus. Es una de las medidas del plan de choque que ha puesto en marcha el conglomerado industrial especializado en el sector de la automoción, entre las que también se encuentra la cancelación del pago de dividendos en 2020 y reducciones salariales de l...
Grupo Antolín ha paralizado su plan inversor para el segundo y tercer trimestres de este año y ha congelado el 16% de las inversiones en I+D en 2020 a causa de la crisis del coronavirus. Es una de las medidas del plan de choque que ha puesto en marcha el conglomerado industrial especializado en el sector de la automoción, entre las que también se encuentra la cancelación del pago de dividendos en 2020 y reducciones salariales de los directivos.
Son fórmulas con las que el grupo del sector auxiliar de la automoción pretende proteger su tesorería del impacto de la crisis. La compañía familiar asegura, sin embargo, que cuenta con una sólida posición de liquidez de 380 millones que ha reforzado con diferentes líneas bancarias que le ofrecen 250 millones de euros adicionales. Además, ha iniciado un plan de reducción de existencias y está reduciendo a la mínima expresión el suministro de productos.
Tras paralizar la mayor parte de sus centros de producción en todo el mundo, el grupo ha comunicado hoy que está reanudando la actividad en algunos centros, aunque de forma “muy lenta” a medida que lo demandan sus clientes, básicamente fabricantes de vehículos.
Grupo Antolin no pudo contener la caída del mercado de la automoción del año pasado y redujo su facturación un 3,9%, hasta situarla en los 5.214 millones de euros. El conglomerado familiar afirma, en embargo, que su evolución fue “mejor” que la industria mundial, que se contrajo en torno al 5,6%. La caída de la facturación fue paralela a la de los beneficios, que se situaron en los 500.000 euros y registraron un descenso del 99% comparado a los 47 millones de 2018. La compañía explica la caída por “el ajuste de valor de algunos activos”.