Irán niega la interrupción del suministro de petróleo a España
Teherán asegura vender crudo a toda Europa, menos Francia y Gran Bretaña
El ministro de Petróleo iraní, Rostam Ghasemi, ha desmentido este jueves la interrupción del suministro de petróleo a España y otros países europeos como represalia por las sanciones de la Unión Europea al sector petrolero iraní. La medida había sido anunciada hace diez días por medios oficiales del país, que citaban fuentes anónimas cercanas al Gobierno de Teherán.
Ghasemi ha asegurado en una rueda de prensa que la venta de crudo sigue suspendida solo para ...
El ministro de Petróleo iraní, Rostam Ghasemi, ha desmentido este jueves la interrupción del suministro de petróleo a España y otros países europeos como represalia por las sanciones de la Unión Europea al sector petrolero iraní. La medida había sido anunciada hace diez días por medios oficiales del país, que citaban fuentes anónimas cercanas al Gobierno de Teherán.
Ghasemi ha asegurado en una rueda de prensa que la venta de crudo sigue suspendida solo para Gran Bretaña y Francia, como se informó en febrero. El ministro, sin embargo, ha admitido que "en el caso de algunos países europeos existen ciertos problemas financieros".
La semana pasada, las cadenas en inglés y árabe de la televisión estatal Press TV y Al Alam habían anunciado la suspensión del suministro a España y a Grecia y señalaban una potencial amenaza para Italia y Alemania. Teherán no desmintió la noticia y el ministro de Petróleo se limitó a decir que el país no había sido dañado por el embargo gradual y que no se enfrentaba a un problema de venta de crudo.
Bruselas asegura que el crudo iraní podría ser sustituido con facilitad por el de otros países
"Vendemos petróleo a toda Europa, con la excepción de Francia y Gran Bretaña", ha afirmado Ghasemi. "No hemos interrumpido las exportaciones a Grecia, aunque existan problemas financieros con este país que estamos solucionando", ha añadido.
Irán abastece alrededor del 15% de las importaciones españolas de crudo, una cantidad cada vez menor, en línea con la tendencia adoptada por otros países de la Unión Europea para frenar el polémico programa nuclear del régimen de Ahmadineyad.
La Comisión Europea asegura que un eventual interrupción del suministro por parte de Teherán no sería un problema para los Veintisiete y que el crudo iraní podría ser sustituido con facilitad por otros proveedores, como Arabia Saudí.