España dobló la media europea en porcentaje de contratos temporales en 2003
El 30,6% de las contrataciones en España fueron temporales, frente al 12,9% de media comunitaria
España fue el país de la Unión Europea (UE) donde más contratos temporales se firmaron en 2003 ya que representaron el 30,6% de todas las contrataciones realizadas, muy por encima de la media comunitaria situada en el 12,9%, según datos publicados hoy por la oficina de estadística europea, Eurostat.
También se registraron elevados porcentajes de empleo temporal en Portugal (20,6%), Polonia (19,4%) y Finlandia (16,3%). En el otro extremo se situó Estonia, donde sólo el 2,5% de los contratos tenía una duración determinada; seguido de Luxemburgo -con un porcentaje del 3,2%-, y Malta con un...
España fue el país de la Unión Europea (UE) donde más contratos temporales se firmaron en 2003 ya que representaron el 30,6% de todas las contrataciones realizadas, muy por encima de la media comunitaria situada en el 12,9%, según datos publicados hoy por la oficina de estadística europea, Eurostat.
También se registraron elevados porcentajes de empleo temporal en Portugal (20,6%), Polonia (19,4%) y Finlandia (16,3%). En el otro extremo se situó Estonia, donde sólo el 2,5% de los contratos tenía una duración determinada; seguido de Luxemburgo -con un porcentaje del 3,2%-, y Malta con un 3,6%.
Las principales economías europeas no tuvieron índices superiores a la medida europea del 12,9%. Así Francia registró un nivel de contratación temporal en 2003 del 12,7%, seguido de Alemania (12,4%), Italia (9,9%) y Reino Unido (6,1%).
En el conjunto de la UE, las mujeres aceptaron más empleos temporales que los varones europeos, ya que los porcentajes varían del 13,7% para ellas, al 12,2% para ellos. En España las diferencias fueron algo mayores ya que alcanzaron un 33,5% y 28,6%, respectivamente.
El informe presentado también permitió conocer las diversidades entre los países miembros en cuanto a los empleos a tiempo parcial. Las tasas más elevadas se registraron en Holanda (32,8%), Reino Unido (17,4%) y Suecia (16,0%).
Por el contrario, tres países de la Europa ampliada junto a Grecia presentaron las cifras más bajas entre los Veinticinco: Eslovaquia (1,3%); Hungría (2,1%), Grecia (2,3%) y República Checa (2,9%). La media europea se situó en el 10,3%, cifra superior a la de España, que registró un 4,7%.
En lo que se refiere a la tasa de empleo entre las personas de 15 a 64 años, España registró un 59,7%, un índice inferior al de la media de los Veinticinco, que alcanzó el 63%, según Eurostat.
Las cifras españolas se situaron por tanto lejos de las observadas en Dinamarca, un 75,1%; Holanda (73,5%) o Suecia (72,9%). En cambio, las tasas de empleo más bajas en este segmento de edad se observaron en Polonia (51,2%), Malta (54,2%) e Italia (56,1%).
Mayores diferencias
Por géneros, España se sitúo entre los países con mayores diferencias. Así, en 2003 la tasa de empleo masculina alcanzó el 73,2%, mientras que la femenina se estancó en el 46%. En el conjunto de la UE, estas cifras fueron del 70 y 55%, respectivamente.
Grecia y Portugal presentaron desigualdades similares al caso español. En el otro lado de la tabla, Suecia y Dinamarca obtuvieron los mejores resultados de empleo femenino: 71,5 y 70%, cada uno.
En la otra cara de la moneda se situaron los 19,1 millones de parados que había en 2003 en la UE, (el 4,1% de la población en edad de trabajar) y los 6,8 millones de personas que se encontraban buscando un trabajo (el 19,6% de la población activa). En España, la tasa de paro de larga duración se situó en el 3,9%.