Un buen sistema nacional de donaciones

Tengo la oportunidad de leer en las páginas del periódico EL PAÍS de la edición del 6 de diciembre la noticia que habla de los trasplantes de órganos realizado en España durante los días 23, 24 y 25 de noviembre. No me queda más remedio que recordar a quienes han participado en ellos. Muchos de ellos, empleados públicos que han doblado turnos porque la situación lo requería. Han salvado las vidas de pacientes que estaban en "emergencia cero".

Tenemos un sistema de trasplante nacional que los demás países han venido a copiar. Es público y funciona. Para aquellos que no creen en lo públic...

Tengo la oportunidad de leer en las páginas del periódico EL PAÍS de la edición del 6 de diciembre la noticia que habla de los trasplantes de órganos realizado en España durante los días 23, 24 y 25 de noviembre. No me queda más remedio que recordar a quienes han participado en ellos. Muchos de ellos, empleados públicos que han doblado turnos porque la situación lo requería. Han salvado las vidas de pacientes que estaban en "emergencia cero".

Tenemos un sistema de trasplante nacional que los demás países han venido a copiar. Es público y funciona. Para aquellos que no creen en lo público y que practican la privatización de servicios básicos este es un ejemplo de madurez, compromiso y eficacia de un servicio público. Soy empleado público de Educación.

Quiero mostrar mi absoluta solidaridad y admiración por mis compañeros de Sanidad con los que en ocasiones he tenido la suerte de trabajar. Y quiero mostrar mi mayor desprecio por los que atacan los servicios públicos como si fuéramos los causantes de los males de este país.