"Los últimos serán los primeros"

José Bono no resistió la tentación de volver a ser José Bono. El presidente del Congreso tomó la palabra antes de la última votación e inició una despedida sin precedentes, que constará en la solemnidad del Diario de Sesiones y en la que incluyó chascarrillos como la referencia al embarazo de Soraya Sáenz de Santamaría, a sus relaciones con los nacionalistas o a la placa que quiso poner en homenaje a una monja; palabras emotivas, como las dedicadas a Uxue Barkos; agradecimientos de partido, como los dirigidos a Zapatero por haberle designado presidente del Congreso: "Gracias por lo que no te l...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

José Bono no resistió la tentación de volver a ser José Bono. El presidente del Congreso tomó la palabra antes de la última votación e inició una despedida sin precedentes, que constará en la solemnidad del Diario de Sesiones y en la que incluyó chascarrillos como la referencia al embarazo de Soraya Sáenz de Santamaría, a sus relaciones con los nacionalistas o a la placa que quiso poner en homenaje a una monja; palabras emotivas, como las dedicadas a Uxue Barkos; agradecimientos de partido, como los dirigidos a Zapatero por haberle designado presidente del Congreso: "Gracias por lo que no te las den, por lo que hayas sufrido y no esté reconocido y por lo que hayas hecho en favor de España", e insinuaciones que sonaron a pronósticos electorales, dirigidos al PSOE en momentos de abatimiento de los socialistas: "Mi inclinación cristiana me lleva a esperar que los últimos serán los primeros". Constará en el acta, como el homenaje que Joan Tardà (ERC) rindió ayer a Arnaldo Otegi, condenado por pertenencia a ETA, desde la tribuna: "¡Otegi askatu [libertad]! ¡Aúpa Arnaldo!".

Más información
Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete