¿Vocación olímpica?

Estos días nos hemos visto privados por los medios de comunicación de masas de la retransmisión de los Campeonatos del Mundo de atletismo 2011 en Daegu. Ante las críticas hacia la programación, las cadenas de televisión siempre dicen lo mismo: "No es del interés general", porque, como todo el mundo sabe, los medios de comunicación son los auténticos depositarios del interés general. Por ello, no dejan de retransmitir motos y coches, coches y motos, hasta que, al fin, descubramos cuál es nuestro verdadero, desconocido y oculto interés por unos deportes en los que unos millonarios pilotan vehícu...

Estos días nos hemos visto privados por los medios de comunicación de masas de la retransmisión de los Campeonatos del Mundo de atletismo 2011 en Daegu. Ante las críticas hacia la programación, las cadenas de televisión siempre dicen lo mismo: "No es del interés general", porque, como todo el mundo sabe, los medios de comunicación son los auténticos depositarios del interés general. Por ello, no dejan de retransmitir motos y coches, coches y motos, hasta que, al fin, descubramos cuál es nuestro verdadero, desconocido y oculto interés por unos deportes en los que unos millonarios pilotan vehículos millonarios al servicio de equipos millonarios con intereses millonarios.

Si la retransmisión del, sin duda, deporte más emblemático del programa olímpico no es del interés de los medios de comunicación y, por ende, de la sociedad española, ¿no debería alguien advertir al señor Gallardón para que se evite el gasto de otros 40 millones de euros para la promoción de la candidatura de Madrid para 2020? ¿No debería alguien advertir al COI de la verdadera vocación de negocio, que no olímpica, de un país al que no le interesa un evento del nivel de un Campeonato del Mundo de atletismo?