Crítica:MÚSICA | Discos

Mercedes Audras canta a Françoise Hardy

Diez mil kilómetros son los que separan físicamente París de Buenos Aires, los dos países (el de adopción y el de origen) de Mercedes Audras. Las emociones de esta cantante y compositora suelen verse amplificadas cada vez que viaja de uno de esos dos puntos al otro, y deja atrás algunas de sus más íntimas querencias para encontrarse con otras igualmente determinantes. Por eso cuando Carlos Tarque (cantante de MClan) le envió a la artista la canción 10.000 km, ella vislumbró enseguida el que sería el título perfecto para su nuevo álbum. Un disco en el que la de Tarque aparece como la rep...

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Diez mil kilómetros son los que separan físicamente París de Buenos Aires, los dos países (el de adopción y el de origen) de Mercedes Audras. Las emociones de esta cantante y compositora suelen verse amplificadas cada vez que viaja de uno de esos dos puntos al otro, y deja atrás algunas de sus más íntimas querencias para encontrarse con otras igualmente determinantes. Por eso cuando Carlos Tarque (cantante de MClan) le envió a la artista la canción 10.000 km, ella vislumbró enseguida el que sería el título perfecto para su nuevo álbum. Un disco en el que la de Tarque aparece como la representación patria de una larga lista de colaboraciones estelares, que se imbrican en esta grabación con la misma naturalidad con la que Audras alterna temas entonados en español y en francés. Los contrapuntos vocales del disco los ejercen voces como las de JP Nataf en el evocador Ton aparénce éclair o Ale Sergi del grupo argentino Miranda!, y, en la parte compositiva, destacan las aportaciones de Sally Seltmann (creadora del reluciente 1234 de Feist), Jacques Duvall (autor de algunas canciones de Jane Birkin, como Les Clés du Paradis del Arabesque) o Jean-Louis Pierot (responsable de algunos de los temas de Marianne Faithfull). En este sentido, la más sobresaliente de todas -y la que ejerce como colofón ante una grabación que en momentos como este nos retrotrae a la época dorada de la chanson femenina- es Yeux d'enfant, un tema inédito de Françoise Hardy de finales de los años sesenta y que ella misma reescribió para Audras a principios de los noventa. Una canción que hoy ve finalmente la luz (con los convenientes arreglos que Mercedes ha aportado para la ocasión), ante una tardanza que la cantante explica así: "En el momento en que Françoise me cedió esta canción yo sentía que todavía debía madurar bastante musicalmente para enfrentarme a ella y estar bastante más serena".

"En los lapsos de tiempo en los que comienza la concepción de un disco me aíslo en todos los sentidos", afirma Audras. "No escucho nada y tampoco leo porque justamente estoy escribiendo, concentrada nada más que en mi música y en mi trabajo. Es una necesidad, un recogimiento buscado que me es fundamental para llegar a lo que quiero". A pesar de ello Audras se ocupa personalmente en este nuevo trabajo de algo mucho menos gratificante en general, como es la producción. "No es fácil llevar todo, pero a veces es necesario, sobre todo porque es la única manera de tener una libertad artística plena". Aunque siempre se suele citar a Françoiz Breut, la propia Hardy o incluso Carla Bruni, las influencias reales de esta cantante son más bien anglosajonas: Nick Drake, The Velvet Underground, David Bowie y The Pretenders encabezan la nómina de sus artistas favoritos. Aun así estos 10.000 km les encantarán a todos los amantes del mejor pop francés en femenino.

10.000 km está editado por Green Ufos. www.mercedesaudras.com.

Mercedes Audras practica "una libertad artística plena".

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