Sexo por arte
Un par de amigos, que llevan años sin verse, se meten en el siguiente jaleo tras la primera farra de reencuentro: ¿se puede hacer un filme porno exclusivamente artístico? Ninguno de los dos son gais, pero una copa se suma a otra. Y al día siguiente los pequeños problemas (son heteros, no se lo han dicho a la esposa de uno de ellos, no es que se sientan muy atraídos recíprocamente...) empiezan a hacer zozobrar la apuesta. ¿Podrán rodar su película pornoartística homohetero? Esta es la premisa de Humpday, de Lynn Shelton, una comedia que se proyectó en el certamen de Gijón y con una carre...
Un par de amigos, que llevan años sin verse, se meten en el siguiente jaleo tras la primera farra de reencuentro: ¿se puede hacer un filme porno exclusivamente artístico? Ninguno de los dos son gais, pero una copa se suma a otra. Y al día siguiente los pequeños problemas (son heteros, no se lo han dicho a la esposa de uno de ellos, no es que se sientan muy atraídos recíprocamente...) empiezan a hacer zozobrar la apuesta. ¿Podrán rodar su película pornoartística homohetero? Esta es la premisa de Humpday, de Lynn Shelton, una comedia que se proyectó en el certamen de Gijón y con una carrera exitosa en el circuito de premios indies en EE UU, pero que en España no logró distribución. Shelton, actriz y directora, es capaz de esconder bajo la pátina del humor toda una reflexión lucida sobre la pareja, la amistad y el sexo como negocio. Hoy, en la Casa Encendida, a las 20.00, el mejor plan de la tarde... sexual o no.