Urgell: "No hay ninguna posibilidad de evitar el cierre"
La consejera de Cultura, Blanca Urgell, eximió ayer al Gobierno vasco de cualquier responsabilidad en el anunciado cierre de Chillida-Leku y afirmó que tampoco tiene "ninguna posibilidad de evitarlo". Urgell recordó que la labor del Gabinete únicamente debe ser "trabajar porque se abra cuanto antes" de nuevo el centro, ya que su consejería no tiene "mucho más recorrido".
Urgell insistió en una rueda de prensa en San Sebastián que no deseaba hablar sobre las negociaciones que el Ejecutivo está manteniendo con los Chillida porque considera fundamental que ambas partes sean respetuosas con...
La consejera de Cultura, Blanca Urgell, eximió ayer al Gobierno vasco de cualquier responsabilidad en el anunciado cierre de Chillida-Leku y afirmó que tampoco tiene "ninguna posibilidad de evitarlo". Urgell recordó que la labor del Gabinete únicamente debe ser "trabajar porque se abra cuanto antes" de nuevo el centro, ya que su consejería no tiene "mucho más recorrido".
Urgell insistió en una rueda de prensa en San Sebastián que no deseaba hablar sobre las negociaciones que el Ejecutivo está manteniendo con los Chillida porque considera fundamental que ambas partes sean respetuosas con el proceso, para encontrar un punto de encuentro. "Estoy segura de que lo vamos a encontrar estos días y espero que podamos anunciar en un plazo razonable que hay un acuerdo para arreglar la situación", sostuvo.
Varias soluciones
La consejera reiteró que el Gobierno trabaja con toda su voluntad para encontrar una rápida solución para el emblemático museo, aunque recordó que es una propiedad privada en la que "no hay ninguna posibilidad de intervenir si no es con el acuerdo de sus propietarios". Precisó que las actuaciones deben partir siempre desde una lógica que conjugue los intereses de las dos partes: "Los privados, muy legítimos, con los de unas instituciones que tienen que velar por el dinero público que les ha sido encomendado".
La tiular de Cultura explicó que su departamento ha propuesto a la familia Chillida varias "medidas, soluciones concretas u opciones" referidas tanto a la propiedad del centro como a su gestión, aunque no quiso desvelarlas. "La familia tiene unas necesidades y unos intereses que tenemos que ver cómo encajan con las posibles soluciones, que son muchas", abundó.